Linda Darling-Hammond: ¡°Los ni?os necesitan que les ense?en a lidiar con los m¨®viles, no simplemente quit¨¢rselos¡±
La profesora de la Universidad de Stanford, al frente de la junta de educaci¨®n de California, es una de las voces m¨¢s influyentes en pol¨ªtica educativa en Estados Unidos
Linda Darling-Hammond (Cleveland, Ohio, 72 a?os), presidenta de la Junta de Educaci¨®n de California desde 2019, lleva toda una vida hablando, escribiendo, estudiando y ense?ando sobre educaci¨®n. Profesora en la Universidad de Stanford y asesora educativa durante la campa?a presidencial de Barack Obama en 2008 y la de Joe Biden en 2020, ha escrito numerosos libros y art¨ªculos sobre pol¨ªtica educativa y considera que la ense?anza se encuentra ahora en un punto de inflexi¨®n. Para la acad¨¦mica, que atiende por videollamada a EL PA?S, los estudiantes de las nuevas generaciones necesitan menos memorizaci¨®n y m¨¢s acompa?amiento, ex¨¢menes donde puedan aplicar lo que saben y herramientas para que aprendan desde cualquier parte.
Pregunta: En 2015, durante una charla en Stanford sobre la evoluci¨®n de la ense?anza, dijo que ¡°la educaci¨®n debe responder a la demanda de la era en la que se encuentra¡±. ?En qu¨¦ era estamos ahora?
Respuesta: En la de explosi¨®n de conocimientos, expansi¨®n tecnol¨®gica y cambios masivos en el mundo. Y, por supuesto, con la inteligencia artificial volvi¨¦ndose a¨²n m¨¢s com¨²n y con m¨¢s automatizaci¨®n, los trabajos que las personas tendr¨¢n que realizar y el conocimiento que necesitar¨¢n ser¨¢n muy diferentes. Un ejemplo que a menudo menciono es que entre 1999 y 2003 se cre¨® m¨¢s conocimiento nuevo en el mundo que en toda la historia anterior a ese periodo. El conocimiento ahora se duplica m¨¢s r¨¢pido cada a?o, por lo que la idea antigua de un plan de estudios que los alumnos pueden aprender a?o tras a?o y luego estar listos para el mundo ha quedado completamente obsoleta.
P: ?C¨®mo debe ser esta ¡°nueva¡± educaci¨®n?
R: Los ni?os y adultos necesitan aprender continuamente por s¨ª mismos, porque siempre habr¨¢ nuevo conocimiento para comprender, combinar, evaluar, analizar, sintetizar y aplicar. Adem¨¢s, estamos experimentando cambios masivos en la econom¨ªa y el clima, lo que requiere el uso de la tecnolog¨ªa tanto para el trabajo como para el aprendizaje. Con eventos clim¨¢ticos cada vez m¨¢s frecuentes que afectan la asistencia escolar, la educaci¨®n debe ir m¨¢s all¨¢ de los confines f¨ªsicos de las aulas tradicionales. La tecnolog¨ªa se convierte en un medio vital para asegurar que los estudiantes, incluso cuando no pueden asistir a la escuela, puedan seguir aprendiendo en l¨ªnea y conect¨¢ndose con sus compa?eros y profesores.
P: Mientras esto cambia, el acceso a educaci¨®n superior en muchos pa¨ªses sigue centrada en pruebas comunes, como la EBAU o los A-Leves en Reino Unido.
R: Durante la pandemia no se pudieron realizar muchas pruebas debido al cierre de los centros de evaluaci¨®n. En Estados Unidos, hemos tenido una prueba durante muchos a?os llamada Scholastic Aptitude Test (SAT) que permit¨ªa el ingreso a la universidad. El 80% de las universidades abandonaron el SAT durante la pandemia, ya sea haci¨¦ndolo opcional o indicando que no les importaba en absoluto. Ahora est¨¢n utilizando otras cosas para admitir estudiantes a la universidad.
P: ?Por ejemplo?
R: El programa de Bachillerato Internacional, que est¨¢ en 125 pa¨ªses, donde la evaluaci¨®n es una combinaci¨®n de trabajos de investigaci¨®n y proyectos colaborativos. Cuando completas ese tipo de programa y te desempe?as bien en esas evaluaciones, que son mucho m¨¢s pr¨¢cticas, es un buen indicador de tu capacidad para hacer trabajos universitarios. En los Estados Unidos, est¨¢ el programa de Colocaci¨®n Avanzada, que ha estado realizando este tipo de pruebas y cursos en las escuelas secundarias y ahora est¨¢n agregando proyectos a sus cursos y evaluaciones.
Quiz¨¢s en el pasado, cuando la gente no ten¨ªa libros a los que acudir o Google para consultar, ten¨ªan que memorizar muchas cosas, pero ese no es el modo de aprendizaje m¨¢s ¨²til ahora
P: ?Son este tipo de evaluaciones a las que debe aspirar el sistema educativo del futuro?
R: Las evaluaciones m¨¢s productivas realmente te dan una idea de lo que los ni?os pueden hacer con su conocimiento, no se limitan a conocer cosas y elegir una respuesta entre cinco en una prueba de opci¨®n m¨²ltiple. Si vamos a tener evaluaciones, necesitan volverse m¨¢s aut¨¦nticas, basadas en el rendimiento y depender mucho menos de la memorizaci¨®n. Quiz¨¢s en el pasado, cuando la gente no ten¨ªa libros a los que acudir o Google para consultar, ten¨ªan que memorizar muchas cosas, pero ese no es el modo de aprendizaje m¨¢s ¨²til ahora. Lo que necesitamos es ayudar a los j¨®venes a aprender a indagar y aplicar sus conocimientos en la vida real.
P: En Espa?a no es posible, pero en los Estados Unidos y otros pa¨ªses los padres pueden elegir si inscriben a sus hijos en la escuela o si los educan en casa. ?Cu¨¢l es su visi¨®n sobre la ense?anza en el hogar?
R: La educaci¨®n en el hogar est¨¢ aumentando en los Estados Unidos, y creo que se debe a que tenemos que alejarnos del modelo de escuelas de f¨¢brica que heredamos de hace cien a?os. Estas escuelas son muy r¨ªgidas, burocr¨¢ticas, jer¨¢rquicas y no est¨¢n dise?adas para ser altamente individualizadas ni para satisfacer a los estudiantes. La educaci¨®n en el hogar es, en parte, una reacci¨®n de las personas que piensan que sus hijos se est¨¢n perdiendo en el modelo de f¨¢brica, y que necesitan hacer algo diferente por ellos. Tenemos maestros y directores fabulosos que trabajan para adaptarse a las demandas de hoy, pero necesitamos redise?ar el modelo.
P: ?Qu¨¦ tipo de redise?o?
R: Por ejemplo, escuelas m¨¢s peque?as con 300 o 400 estudiantes, no 2.000. Dise?adas con un equipo docente que rodee a los estudiantes, planifiquen en funci¨®n de ellos, ofrezcan instrucci¨®n interdisciplinar y tengan tiempo para esa planificaci¨®n. Que los estudiantes participen en programas de asesoramiento durante cuatro a?os, donde tienen un profesor que se queda con ellos y se encarga del aprendizaje social y emocional, controla su desempe?o acad¨¦mico y est¨¢ en contacto con los padres. En esos entornos, los ni?os est¨¢n prosperando, mientras que en las escuelas de modelo de f¨¢brica, muchas veces no lo est¨¢n.
Insistir en volver a la ¡°normalidad¡± est¨¢ empeorando las cosas
P: En 2023 se public¨® el ¨²ltimo el informe PISA y en un gran n¨²mero de pa¨ªses la puntuaci¨®n disminuy¨® en comparaci¨®n con a?os anteriores.
R: La pandemia fue traum¨¢tica y lo fue de muchas maneras. No solo que los ni?os estuvieran fuera de la escuela f¨ªsica, sino que estaban en l¨ªnea y aprendiendo de diferentes maneras. Las familias estaban traumatizadas, los ni?os perd¨ªan a sus padres y abuelos, hubo una interrupci¨®n econ¨®mica. Estamos en un per¨ªodo de tiempo donde, nuevamente, las escuelas no pueden funcionar como sol¨ªan hacerlo. Y hay dos impulsos diferentes. Algunas han dicho: aprovechemos lo que hemos aprendido en la pandemia, las formas en que usamos las tecnolog¨ªas, en que comenzamos a cambiar el aprendizaje. Otras dicen: volvamos a la normalidad, y quieren que las escuelas vuelvan a ser exactamente como eran en 2019. Eso no va a funcionar. Insistir en volver a la ¡°normalidad¡± est¨¢ empeorando las cosas.
P: ?Estar en el top del informe PISA equivale a tener un mejor sistema educativo?
R: Dice algo [del sistema de ese pa¨ªs]. Las evaluaciones PISA son mejores que otras evaluaciones porque son un poco m¨¢s progresistas y tratan de evaluar cosas como la colaboraci¨®n, la resoluci¨®n de problemas y la aplicaci¨®n del conocimiento. Nos dicen algo sobre la calidad [educativa] dentro de un pa¨ªs, por ejemplo, c¨®mo de bien lo hacen la mayor¨ªa de los estudiantes. Tambi¨¦n hay otras cosas que est¨¢n sucediendo que no tienen que ver con el sistema educativo. Si tienes pobreza y los ni?os no tienen suficiente para comer o un lugar para vivir, el sistema educativo no puede curarlo. Y hay bajas puntuaciones en PISA asociadas con esas condiciones sociales. Eso no es culpa de las escuelas. Cuando las personas miran este tipo de calificaciones, tienen que tomarlo con precauci¨®n y decir, ¡°bien, ?qu¨¦ m¨¢s tendr¨ªamos que preguntar para entender qu¨¦ est¨¢ pasando?¡±.
P: Uno de los desaf¨ªos actuales, ha mencionado, son las nuevas tecnolog¨ªas. En Espa?a, uno de los principales debates al respecto es si el tel¨¦fono m¨®vil deber¨ªa prohibirse o no en las escuelas.
R: Parte de la presi¨®n para prohibir los tel¨¦fonos es doble: los ni?os est¨¢n en sus m¨®viles y no prestan atenci¨®n; y las redes sociales, que son tan destructivas para los estudiantes. Francamente, no creo que prohibir el tel¨¦fono reduzca la cantidad de distracci¨®n. Los ni?os necesitan que les ense?en a lidiar con estas cosas, no simplemente quitarlas. Hay cierta utilidad en establecer algunos l¨ªmites en el uso de tel¨¦fonos en algunos momentos en la escuela, pero tambi¨¦n quiz¨¢s no ignorarlos por completo y ayudar a los ni?os a aprender a usarlos. Tenemos que aprender a lidiar con eso en lugar de simplemente decir: vamos a reprimirlo.
P: ?Cu¨¢l es su visi¨®n de la educaci¨®n ideal en los pr¨®ximos 15 a?os?
R: Aquella en la que las escuelas son m¨¢s personalizadas, con apoyos integrados para los estudiantes, que se centran en el desarrollo social, emocional y acad¨¦mico, de manera que los alumnos puedan ser aprendices empoderados que utilicen y accedan al conocimiento y sepan aplicarlo en todas las situaciones desafiantes que formar¨¢n parte de su mundo.
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