Luc¨ªa Mart¨ªnez: ¡°?En serio no puedes dedicar 10 minutos m¨¢s a pensar el men¨² cuando nos estamos cargando el planeta y los animales?¡±
La dietista-nutricionista especializada en alimentaci¨®n vegetariana ha publicado varios libros sobre las posibilidades que ofrece el veganismo
Para la dietista-nutricionista Luc¨ªa Mart¨ªnez hay muchos paralelismos entre la lucha vegana y la de la igualdad de las mujeres, ¡°como los se?oros que se siguen metiendo con el feminismo con los mismos argumentos que hace 30 a?os¡±. Nacida en Mieres hace 41 a?os, pero criada en Mallorca, su trabajo de divulgaci¨®n sobre esta opci¨®n vital ha ayudado a que caigan muchos prejuicios en su contra: no son ¡°cuatro jipis que han visto pelis de Disney¡± ni gente triste que ¡°come lechuga sin ali?ar¡±. Aunque, sobre todo, su pelea es desde el punto de vista nutricional, como muestra en su ¨²ltimo libro: Vegetarianos con m¨¢s ciencia (Paid¨®s).
Pregunta. Los asuntos de alimentaci¨®n hacen que mucha gente sienta su identidad puesta en tela de juicio.
Respuesta. Claro. La alimentaci¨®n, la gastronom¨ªa, tiene una vertiente cultural y social. No es solo un tema de salud, pero ni remotamente. Lo que comemos forma parte de nuestra identidad como seres humanos y de nuestra cultura y de c¨®mo nos han educado, incluso, lo que comiste en tu casa de peque?o. Cuando entras en el tema de los ni?os, los padres y las madres pueden sentirse atacados: a ver si me vienes a decir t¨² que no alimento bien a mi hijo. Y lo de ¡°pues yo de peque?o desayunaba cada d¨ªa colacao con galletas y aqu¨ª estoy¡±. El mensaje choca contra todo eso. Es muy complicado. Y con la carne, chocamos adem¨¢s contra los intereses econ¨®micos de un lobby muy poderoso y al que en los ¨²ltimos a?os se le est¨¢n moviendo un poco los cimientos, cosa que nunca hab¨ªa pasado, siempre hab¨ªan sido los putos amos de ¡®aqu¨ª estoy yo con mi puro¡¯. Eso genera una respuesta muchas veces visceral. Y visceral, pero calculada, por parte de quienes tienen poder: ah¨ª tienes a Pedro S¨¢nchez dici¨¦ndote que un buen chulet¨®n al punto...
P. ?Los veganos generan incomodidad?
R. Escribi¨® Carol Adams que cuando una persona vegetariana entra en la habitaci¨®n, el resto pasan de ser personas que comen a personas que comen carne. El veganismo, simplemente por el hecho de existir, ya genera una disonancia. Y siempre est¨¢ la queja de que los veganos se sienten superiores moralmente. Obviamente, habr¨¢ veganos gilipollas, por supuesto, llam¨¢ndote asesino y tal. Pero en general ese dilema moral a las personas les llega solo. No nos hace falta a nosotros transmitirlo directamente, no vamos por ah¨ª diciendo eso.
P. Ahora ya no es ¨²nicamente por los animales.
R. El argumento de la sostenibilidad ha sido clave en que el veganismo empezara a tener un poco m¨¢s de aceptaci¨®n. Como una opci¨®n viable y no solamente como la de cuatro jipis que han visto muchas pel¨ªculas de Disney y se creen que los animales hablan. Mucha gente ha reducido el consumo de carne y ese ha sido un argumento que nos ha ayudado mucho. Ha ayudado que desde los estamentos cient¨ªficos de alto nivel se empezara a decir: a ver, humanos, esto del calentamiento global no es co?a y una de las cosas que contamina bastante es la ganader¨ªa. Ahora bien, el veganismo es un movimiento pol¨ªtico y el sujeto del mismo son los animales. El veganismo lucha por el fin, o la disminuci¨®n, de la explotaci¨®n animal porque piensa que tal y como estamos tratando a los animales ahora mismo no es aceptable. Y tenemos que cambiar cosas para que eso no suceda. Que luego haya otros argumentos que ayuden y refuercen esto, nos parece fant¨¢stico. Pero no son el sujeto pol¨ªtico.
El veganismo es un movimiento pol¨ªtico y el sujeto del mismo son los animales
P. Pero pasarse al veganismo obliga a pensar mucho nuevos men¨²s.
R. El cambio de dieta, de costumbres va a costar. Gran parte de la poblaci¨®n tiene que hacer un cambio en su dieta por salud, tiene que comer m¨¢s fruta y verdura, tiene que bajar el consumo de carne aunque no sean vegetarianos, tiene que reducir el consumo de alcohol, etc¨¦tera. Todo eso es complicado, cuesta. Si a esa situaci¨®n le introduj¨¦ramos la opci¨®n vegana, no creo que cueste mucho m¨¢s. Desde la divulgaci¨®n intentamos dar recursos a punta pala para ayudar a la gente, publicamos men¨²s, recetarios, ideas para la cocina... intentamos siempre, aparte de dar la chapa te¨®rica, dar la ayuda pr¨¢ctica. Hasta aqu¨ª mi respuesta pol¨ªticamente correcta. Pero tambi¨¦n te dir¨ªa, vamos a ver, ?en serio me vas a poner de excusa que no puedes dedicar 10 minutos m¨¢s a pensar el men¨² cuando estamos hablando de que nos estamos cargando el planeta, de que estamos haciendo una atrocidad con los animales? ?En serio, la excusa de personas del primer mundo, con acceso a todo tipo de alimentos en el s¨²per, es que me cuesta 10 minutos m¨¢s pensar el men¨²? Te va a costar un poco m¨¢s las dos primeras semanas. Creo que quejarse de ese esfuercito es ser quejica y conformista. Vamos a poner un poco m¨¢s de nuestra parte.
P. Pero es que es una comida muy triste¡
P. No hay que confundir ser vegano con alimentarse de lechugas sin ali?ar. Pod¨ªa ser triste en los 80 o en los 90, te ten¨ªas que conformar con comer legumbres. Ahora mismo no creo que se pueda decir que la comida vegana es poco apetecible. Lo podr¨¢ ser, igual que puedes hacer comida tradicional poco apetecible: un arroz blanco muy apetecible no es, pero si te haces un arroz al horno es otra cosa. Ah¨ª ya depende un poco de tus habilidades. Creo que es un argumento que hay que empezar a reciclar. Para ser hater del veganismo tenemos que empezar a innovar los argumentos. Estamos siendo haters con el veganismo con los mismos argumentos que en los 90. Y claro, el mundo ha cambiado, se?ores. Como los se?oros que se siguen metiendo con el feminismo con los mismos argumentos que hace 30 a?os. Hay que salir de ah¨ª, esto ya lo hemos superado. Para meterse con los veganos tambi¨¦n hay que empezar a innovar, que seguimos con lo del desnutrido que come lechuga.
Garz¨®n est¨¢ teniendo la pelea como pol¨ªtico que tuvimos los divulgadores hace diez a?os. Quiero darle un abrazo porque... pobre.
P. ?Y el ruido del debate pol¨ªtico?
R. Es un avance que haya salido un ministro [Alberto Garz¨®n] a decir que hay que comer menos carne. Eso es un hito. Nunca se hab¨ªa dicho desde estamentos gubernamentales tal cosa, ni por el medio ambiente, ni por salud siquiera. De hecho, lo normal es lo contrario. Garz¨®n est¨¢ teniendo la pelea como pol¨ªtico que tuvimos los divulgadores de la alimentaci¨®n hace 10 a?os. Y ¨¦l lo tiene que luchar ahora con los pol¨ªticos. De hecho, manda un mensaje supermoderado, de la explotaci¨®n animal ni habla, y un poco m¨¢s y lo cuelgan de la torre en la iglesia, no le dan respaldo ni sus propios compa?eros de Gobierno. Que t¨² digas eso y salga tu jefe [Pedro S¨¢nchez] a hacer un comentario [como el del chulet¨®n] tiene que ser muy desmoralizante. Yo quiero abrazar a Garz¨®n porque... pobre. Poco a poco la opini¨®n p¨²blica va a considerar esas actitudes poco adecuadas: lo de burlarse y lo de mira mi chulet¨®n. Cada vez ser¨¢n menos y cada vez m¨¢s la opini¨®n p¨²blica les llamar¨¢ la atenci¨®n. Igual esto es demasiado optimista por mi parte, pero quiero pensar que todos estos van a tener que empezar a callarse o a dar un mensaje que d¨¦ menos verg¨¹enza ajena. Incluido Pedro S¨¢nchez.
P. Fue sorprendente.
R. Fue supercu?ado, porque ni siquiera dio un argumento, como si Garz¨®n hubiera dicho una chorradita cualquiera. Ah, bueno, es que un chulet¨®n al punto es imbatible, ?no? O sea, se supone que esta gente las cosas las tiene planeadas. ?En serio a sus asesores les pareci¨® eso buena idea? ?Tan alejados est¨¢n de la realidad? Eso es lo que a m¨ª me parece preocupante.
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