Guerlain renueva su alianza con las abejas un a?o m¨¢s (y ya van 171)

Las abejas bailan. O algo muy parecido: las mel¨ªferas usan una especie de coreograf¨ªa para comunicarse entre ellas e indicar d¨®nde o a qu¨¦ distancia hay polen. Los ¨²ltimos estudios incluso apuntan a que es posible que sean capaces de aprender socialmente, viendo a sus compa?eras. Este peque?o insecto es uno de los m¨¢s fascinantes, sobre todo por su organizaci¨®n en comunidades perfectamente sincr¨®nicas en las que todo encaja. Todo excepto la acci¨®n salvaje del hombre sobre sus entornos. Las abejas corren peligro, avisa la Organizaci¨®n de las Naciones Unidas para la Alimentaci¨®n y la Agricultura (FAO) y por eso Naciones Unidas design¨® el 20 de mayo como su d¨ªa internacional. Para alertar y concienciar. Porque sin ellas y sin su polinizaci¨®n buena parte de la alimentaci¨®n mundial quedar¨ªa comprometida. De hecho, muchos se?alan que, tras una hipot¨¦tica desaparici¨®n de las abejas, la tierra se quedar¨ªa en pocos a?os sin vida.

¡°Hemos venido a celebrar a la abeja, que nos inspira desde 1853¡å, dice Gabrielle Saint-Genis, presidenta y consejera delegada de Guerlain. Se encuentra resguardada baja una carpa mientras la lluvia embarra el terreno en Vallee de la Milli¨¨re, en el bosque de Rambouillet, a 25 kil¨®metros de Versalles. ¡°Es lo que tiene trabajar al aire libre¡±, reconoce. La casa de perfumer¨ªa y cosm¨¦tica es socia colaboradora de este espacio de 28 hect¨¢reas desde hace dos a?os. Un proyecto del fot¨®grafo Yann Arthus-Bertrand y de su hijo Tom para recuperar la vida silvestre de la zona. ¡°He estado obsesionado con fotografiar la belleza¡±, dice el autor de La tierra vista desde el cielo y activista medioambiental, tambi¨¦n presente en esta primera apertura de las instalaciones. El espacio abrir¨¢ sus puertas al p¨²blico en las pr¨®ximas semanas, con la intenci¨®n de realizar labores de pedagog¨ªa y sensibilizaci¨®n a los visitantes. Un recorrido que se enriquecer¨¢ m¨¢s adelante con un paseo por el jard¨ªn de Partages, concebido junto al maestro perfumista de Guerlain, Thyerry Wasser, para estimular el olfato de los visitantes.

Entre apoyos y amenazas

En el valle de la Milli¨¨re no faltan las colmenas. Varias colonias de abejas instaladas como parte del programa de conservaci¨®n Guerlain for bees. Se trata de una red de aliados dedicados a la protecci¨®n de las abejas y con varias patas en distintos rincones del mundo: desde la isla francesa de Ouessant (donde se protege a la abeja negra bretona) a China (con un acuerdo con el ministerio de educaci¨®n del pa¨ªs). En Espa?a, con la ONG El Rinc¨®n de la Abeja, en Alicante. El plan de acci¨®n, en marcha desde 2011, incluye tambi¨¦n una alianza con la Unesco y varios proyectos pedag¨®gicos. O la concienciaci¨®n a trav¨¦s de la propia marca a lo largo del a?o y en momentos puntuales como el D¨ªa de la Abeja. Para conmemorar este ¨²ltimo, Guerlain donar¨¢ el 20% de todo lo que se compre en su tienda online o en tiendas seleccionadas entre el 20 y el 22 de mayo.

El uso de pesticidas, los monocultivos, la falta de diversidad de flores o el cambio clim¨¢tico amenazan hoy al astuto insecto del que depende al menos y de manera directa el 35% de la alimentaci¨®n mundial. La miel y sus derivados son ingredientes fundamentales de varias l¨ªneas de cosm¨¦ticos de la marca francesa, pero adem¨¢s su trabajo con el n¨¦ctar de las flores es fundamental para el trabajo de Delphine Jelk, perfumista de Guerlain: ¡°Crec¨ª en Suiza, en la naturaleza, as¨ª que creo que las abejas siempre han formado parte de mi vida¡±, cuenta, aunque desde su llegada a la maison en 2014 el lazo se ha estrechado. ¡°Es interesante seguir avanzando en la relaci¨®n con este s¨ªmbolo¡±, prosigue Jelk, ¡°en mi caso s¨¦ que sin abejas no tengo flores y sin flores, perfumes. Por ejemplo, hemos instalado colmenas en los campos de cultivos de nuestro socio en Calabria, donde obtenemos la bergamota, y de ah¨ª sale una miel muy especial, con un toque c¨ªtrico¡±.

Con una destilaci¨®n especial la nariz pudo incluirla ¡°en exceso¡± en su creaci¨®n Tobacco Honey, una sacudida olfativa almibarada, c¨¢lida y aterciopelada. ¡°Es mucha miel, lo s¨¦, pero me encanta. Mi sue?o ser¨ªa tener una especie de bodega de distintas mieles para usar como esencias para las fragancias. De momento tengo esta c¨ªtrica de Italia, pero espero seguir ampliando la paleta¡±. Ya rumia qu¨¦ hacer con la miel de rosas que producir¨¢n las colmenas colocadas junto a los campos de Grasse con los que la casa acaba de firmar una colaboraci¨®n en exclusiva.

El insecto es c¨®mplice de la marca desde 1853, desde que apareci¨® tallado por primera vez en uno de sus frascos. Era el Eau de Cologne Imp¨¦riale, hoy un cl¨¢sico de la casa, con el que el fundador, Pierre-Fran?ois-Pascal Guerlain, obsequi¨® a la espa?ola Eugenia de Montijo en su enlace con Napole¨®n III. Dise?ado por el vidriero Pochet du Courval, inspirado en la columna de Napole¨®n I en la Place Vend?me y adornado con 69 abejas doradas. Un frasco que se convirti¨® en declaraci¨®n de amor y que hoy invita a la casa a seguir avanzando en su defensa de las abejas.