Los j¨®venes espa?oles tienen una opini¨®n "deplorable" sobre la pol¨ªtica y la Iglesia
La mejor valoraci¨®n es para las organizaciones de voluntariado, el sistema de ense?anza, la Seguridad Social, la Polic¨ªa, la ONU y la Uni¨®n Europea
Si la pol¨ªtica no da la felicidad pero te la puede quitar, los j¨®venes espa?oles est¨¢n en apuros porque la opini¨®n que tienen de los hombres p¨²blicos es "deplorable". El calificativo es del soci¨®logo Juan M? Gonz¨¢lez-Anleo, uno de los autores del informe J¨®venes Espa?oles 2010, presentado esta ma?ana por la Fundaci¨®n Santa Mar¨ªa (Fundaci¨®n SM). Tampoco se libran de la quema los eclesi¨¢sticos cat¨®licos, que est¨¢n incluso peor valorados que los parlamentarios. Iglesia, grandes empresas, Sindicatos, Corona y Parlamento del Estado son, por este orden, las instituciones que merecen menos confianza. La mejor valoraci¨®n, en cambio, es para las organizaciones de voluntariado, el sistema de ense?anza, la Seguridad Social, la Polic¨ªa, la ONU y la Uni¨®n Europea, por este orden.
Estamos ante una generaci¨®n, quiz¨¢ la primera, que piensa que va a vivir peor que sus padres
El rosario de denuestos hacia los pol¨ªticos es demoledor. "Buscan antes su propios intereses o los de su partido que el bien de los ciudadanos (71%) y "anteponen los intereses de las multinacionales, los bancos y los grandes grupos de presi¨®n a los intereses de los ciudadanos (66,7%). Solo el 1% e los encuestados opina que los hombres p¨²blicos tienen en cuenta sus ideas e inquietudes.
Sobre la Iglesia cat¨®lica, pese a que una mayor¨ªa ha asistido a la clase de religi¨®n que imparten personas seleccionadas por los obispos, la juventud espa?ola opina que es "demasiado rica (76%), que se "mete demasiado en pol¨ªtica" (64%), que tiene "una postura anticuada sobre la vida sexual de la gente" (75%); " se mete demasiado en la vida personas de la gente dici¨¦ndole c¨®mo tiene que vivir su vida" (63%) o que "dificulta con sus directrices disfrutar de la vida" /56%). Entre los aspectos positivos destaca la opini¨®n de que las normas eclesi¨¢sticas "ayudan a vivir m¨¢s moralmente" (40%) y "ofrecen al hombre un hogar espiritual y sinceramente religioso" (45%).
El informe J¨®venes espa?oles 2010, de 391 p¨¢ginas, ha sido realizado por la Fundaci¨®n SM con cuestionarios a 3.513 chicos y chicas y 503 entrevistas a j¨®venes inmigrantes. Los soci¨®logos que lo han realizado, bajo la direcci¨®n de Leoncio Fern¨¢ndez, son Luis Ayuso, autor del cap¨ªtulo dedicado a Juventud y familia en los comienzos del siglo XX; Juan M? Gonz¨¢lez-Anleo, sobre Los valores de los j¨®venes y su integraci¨®n socio-pol¨ªtica; Gonzalo Gonz¨¢lez, autor de Aproximaci¨®n a los j¨®venes inmigrantes; Jos¨¦ Antonio L¨®pez, sobre Ocio, consumo y medios de comunicaci¨®n, y Maite Valls Iparraguirre, autora de Las creencias religiosas de los j¨®venes.
Hay otras muchas consideraciones en este imponente trabajo sociol¨®gico, el octavo que elabora la Fundaci¨®n SM (el anterior es de 2005). Por ejemplo, casi la mitad de los j¨®venes de entre 15 y 24 a?os, el 46,3%, ve su futuro con pesimismo, al margen de que se supere o no la crisis econ¨®mica. Estamos, por tanto, ante una generaci¨®n, quiz¨¢ la primera, que piensa que va a vivir peor que sus padres.
En cambio, esta generaci¨®n de j¨®venes de entre 15 y 24 a?os, "planificada, deseada y cre¨ªamos que satisfecha", se lleva "considerablemente mejor" con sus padres que otras anteriores. Es as¨ª porque el modelo democr¨¢tico de familia est¨¢ m¨¢s extendido, el autoritario se ha estancado y el permisivo ha retrocedido "levemente". Cuando discuten padres e hijos, lo hacen, sobre todo, por no preocuparse por los trabajos de la casa, por dinero, por querer levantarse "cuando apetece", por los estudios y por la hora de llegada cuando salen de noche. Alguna vez discuten tambi¨¦n de religi¨®n, por los amigos, "por pasarse con el alcohol" o por la hora en que llegan a casa (de media, hacia las cuatro de la madrugada).
El paro es para el 45% la principal amenaza de futuro, seguido por la droga (33%), la vivienda (28,7%), la inseguridad ciudadana (23,6%) y el terrorismo (20%).
Desde el informe anterior, de 2005, ha disminuido la conciencia ecol¨®gica, si bien ahora son m¨¢s (52% frente al 38%) los que consideran que la ciencia y la tecnolog¨ªa evitar¨¢n que la tierra se convierta en un planeta inhabitable. El 81,9% tiene claro que "en ning¨²n caso" est¨¢ justificada la violencia
de g¨¦nero, el 60,4% rechaza tajantemente la pena de muerte y apenas 29,3% se muestra absolutamente en contra del aborto. La eutanasia, en cambio, es vista como justificada o bastante justificada por un 62,2%, bastante por encima de la aceptaci¨®n del aborto voluntario. El divorcio, la adopci¨®n de hijos por homosexuales y lesbianas, el que una mujer tenga hijos sin relaci¨®n estable tienen una comprensi¨®n a¨²n mayor.
El informe de la Fundaci¨®n SM, tambi¨¦n se centra en la edad de emancipaci¨®n de los j¨®venes. Lo quieren pero no tienen prisa por abandonar la casa de los padres. Los 27 a?os son el momento adecuado, si previamente han encontrado un trabajo. Uno de cada cinco j¨®venes se declara decidido sobre el tipo de uni¨®n con su pareja por el que optar¨¢: un 55,4% elige el matrimonio, civil o religioso.
Sobre hijos, la opci¨®n es cada vez m¨¢s planificada. Al 38,9% le gustar¨ªa tener dos. Lo que m¨¢s valoran los j¨®venes es la fidelidad en la pareja, y cada vez son m¨¢s tolerantes con los homosexuales y creen mayoritariamente que "todas las formas familiares son v¨¢lidas si con ello se consigue la felicidad".
En cuestiones de cultura, ocio y tiempo libre, el panorama es desolador. Los j¨®venes escuchan m¨²sica, ven televisi¨®n y salen con los amigos, no menos que antes de que estallara la crisis econ¨®mica, y son un 66,6% los que practican deporte. En cambio, el 35,8% no lee nunca, el 34,6% lo hace entre una o dos horas a la semana y s¨®lo un 25% tres horas o m¨¢s. El porcentaje de los que salen todos o casi todos los fines de semana es ahora menor que en 2005, un 41,4% frente a un 50,1%. El 98% usa tel¨¦fono m¨®vil y entre los menores de 20 a?os est¨¢ m¨¢s extendido el uso de redes sociales que entre los m¨¢s mayores.
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