Vitoria, capital de letras
El Consejo de Cooperaci¨®n Bibliotecaria se re¨²ne en el Archivo Hist¨®rico alav¨¦s - La entidad debate el pr¨¦stamo de libros digitales
Si alguien pregunta qu¨¦ papel desempe?ar¨¢n las bibliotecas del siglo XXI en plena revoluci¨®n digital, el director general del Libro, Rogelio Blanco, tiene un argumento a prueba de esc¨¦pticos. "Los museos en Espa?a suman 53 millones de visitas al a?o, mientras que las bibliotecas, sumando las p¨²blicas y las universitarias, llegan a unos 200 millones de visitas", sentencia. El ¨¢rbol sigue teniendo ra¨ªces fuertes, porque la Red no puede sustituir a la biblioteca como "espacio ciudadano en que suceden cosas".
El Archivo Hist¨®rico Provincial de ?lava, con sede en Vitoria, ejerci¨® entre el mi¨¦rcoles y ayer como anfitri¨®n de la cuarta reuni¨®n anual del Consejo de Cooperaci¨®n Bibliotecaria. Este organismo, que celebr¨® su primera reuni¨®n en 2008 en Jaca (Huesca), re¨²ne a todas las administraciones espa?olas con competencias en biblioteca. Adem¨¢s del Gobierno central y los auton¨®micos —la reuni¨®n cont¨® ayer con la presencia de la consejera de Cultura, Blanca Urgell— tambi¨¦n est¨¢ presente la Federaci¨®n Espa?ola de Municipios y Provincias. Blanco recuerda su importancia: el 95% de las bibliotecas en Espa?a son gestionadas por los Ayuntamientos.
Las bibliotecas espa?olas cuadruplican a los museos en visitas anuales
El director del Libro cree que son insustituibles como "espacio ciudadano"
El mismo edificio vitoriano que guarda decenas de miles de documentos que se remontan hasta el a?o 1500, con joyas como el testamento del general ?lava o el documento que acredita la compra del Palacio Montehermoso por Jos¨¦ Bonaparte, sirvi¨® como escenario para un debate sobre el futuro del libro.
La cuesti¨®n del pr¨¦stamo digital se hallaba sobre la mesa. El Ministerio de Cultura ha impulsado un programa de pr¨¦stamo electr¨®nico en algunas bibliotecas nacionales y espera ampliarlo a las 54 de la red antes de fin de a?o. Cultura explica que sigue buscando los "modelos adecuados" para compaginar los intereses de la industria editorial, por un lado, y el papel de las bibliotecas en la difusi¨®n del conocimiento.
Mientras la reuni¨®n se celebraba a puerta cerrada, el director del archivo provincial, Jos¨¦ Antonio Sainz, recuerda que all¨ª se almacena tambi¨¦n toda la informaci¨®n elaborada por los notarios y la Administraci¨®n del Estado en la provincia. En parte, reconoce, son el primer filtro de la historia.
A lo largo de la ma?ana, cuatro investigadores que trabajan en el archivo van encontrando entre documentos antiguos alg¨²n pincelada oculta de siglos pasados. Eugenio Murgia, de 81 a?os, peina sin prisas los testamentos de los habitantes del valle de Zuya mientras Jos¨¦ Antonio Gonz¨¢lez, de 70 a?os, uno de los mayores expertos de Euskadi en toponimia, sigue atando cabos para explicar el porqu¨¦ de los nombres de algunos de los rincones de la provincia. De no ser por ellos, m¨¢s de un detalle habr¨ªa ca¨ªdo en el olvido de forma quiz¨¢ irremediable.
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