Espa?a bate su r¨¦cord de trasplantes de c¨¦lulas madre sangu¨ªneas

Espa?a es l¨ªder mundial en trasplante de ¨®rganos, pero est¨¢ muy lejos de serlo en el de c¨¦lulas progenitoras hematopoy¨¦ticas. Este complejo nombre indica que es material que sirve para regenerar los gl¨®bulos sangu¨ªneos; es decir, que son c¨¦lulas madre de hemoglobina y leucocitos. Pero la cifra, despu¨¦s de unos a?os de descenso, va en aumento, y en 2010 se ha batido el r¨¦cord con 2.546 trasplantes, seg¨²n los datos que ha hecho p¨²blicos la Organizaci¨®n Nacional de Trasplantes (ONT).

Igual que cuando se habla de ¨®rganos s¨®lidos (h¨ªgados, ri?ones), hay varias fuentes de este material: la propia sangre del paciente (lo que se conoce como trasplante aut¨®logo) o de otra persona (alog¨¦nico), que a su vez puede ser familiar o desconocido. Y la fuente para reconstruir el sistema sangu¨ªneo puede ser sangre perif¨¦rica, la m¨¦dula ¨®sea o el cord¨®n umbilical.

Pero, a diferencia de en los ¨®rganos, en este tipo de trasplante la limitaci¨®n no son las donaciones, explica el responsable de la ONT, Rafael Matesanz. La restricci¨®n est¨¢ en el diagn¨®stico y en los centros que est¨¢n preparados para este tipo de intervenciones, sobre todo las alog¨¦nicas, que son mucho m¨¢s complicadas y peligrosas.

El efecto del primero de los factores, las indicaciones, se ve claramente en la evoluci¨®n de las intervenciones. Los 2.546 trasplantes de 2010 son poco m¨¢s el nivel de 1997 y 1998. En medio, el n¨²mero de trasplantes baj¨® hasta 2005, para luego empezar a subir. Ello se debe a que hubo un cambio en el tratamiento del c¨¢ncer de mama, que es uno de los m¨¢s numerosos. Hasta finales de los noventa, se segu¨ªa un tratamiento muy agresivo, que implicaba que luego hab¨ªa que realizar un autotrasplante para recuperar las c¨¦lulas hematopoy¨¦ticas, explica Matesanz. Pero luego se vio que esto no hac¨ªa falta. A partir de 2005, sin embargo, se volvi¨® a recurrir a este tipo de tratamientos pero para tratar, sobre todo, tumores linf¨¢ticos.

Eso explica no solo el aumento de trasplantes, sino que, adem¨¢s, este se deba sobre todo a los trasplantes alog¨¦nicos (de un familiar o desconocido). Y la expectativa es que crezca. Por ejemplo, Alemania tiene una tasa de trasplantes de este origen de 20 por mill¨®n de habitantes, y Espa?a est¨¢ en cinco, dice Matesanz.

Con otros pa¨ªses no solo hay una diferencia en el n¨²mero de intervenciones. Tambi¨¦n en su origen. Espa?a es el segundo pa¨ªs del mundo en unidades de cord¨®n umbilical guardados en bancos p¨²blicos (47.000), solo por detr¨¢s de Estados Unidos, afirma Matesanz. En cambio, est¨¢ muy lejos de los primeros en donantes de m¨¦dula (menos de 100.000 por los dos millones de Alemania).