"Escuchamos rugidos bajo el mar"
Los submarinistas de El Hierro son testigos de la escalada de se¨ªsmos. El Ej¨¦rcito desembarca en la isla para prepararse ante una posible erupci¨®n
Los submarinistas de La Restinga, al sur de El Hierro, saben que pasa algo anormal. "Hace unos d¨ªas est¨¢bamos a unos 30 metros cuando escuchamos un ruido extra?o. Trrrrrrrrrrr. As¨ª durante unos segundos. Como si se rompiera la roca. Se escuchan rugidos bajo el mar. Es muy raro", explica Beatriz Delgado C¨¢novas, una ge¨®grafa madrile?a que hace tres a?os vino a la isla a quedarse. Son los crecientes temblores de El Hierro, bastantes m¨¢s de 8.000 que han crecido en intensidad desde el pasado viernes. Animados por los cient¨ªficos que analizan la crisis s¨ªsmico-volc¨¢nica, los buzos buscan ahora rastros de salida de gases y miden la temperatura del agua. Hasta ahora, sin indicios anormales.
Joseba, un bilba¨ªno que lleva dos a?os como monitor de buceo en la isla, cuenta que durante el d¨ªa en unos 45 minutos de inmersi¨®n han escuchado siete veces el rugido. "Suena como si un barco estuviera realizando una maniobra extra?a justo encima de ti. Lo que tranquiliza es que los peces est¨¢n muy tranquilos. En una de esas veces est¨¢bamos fotografiando un mero y ni se inmut¨®. Fue impresionante", explica. Joseba cuenta que hoy la temperatura en el Mar de las Calmas es de 24 grados, "lo normal en esta ¨¦poca".
El testimonio de los submarinistas -una de las actividades de creciente inter¨¦s tur¨ªstico en la isla- son una prueba ¨²nica de c¨®mo El Hierro nota d¨ªa a d¨ªa la escalada de temblores. No solo aumenta el n¨²mero de se¨ªsmos y su intensidad, sino que la isla se ha expandido en algunas zonas unos cuatro cent¨ªmetros y el flujo de di¨®xido de carbono (CO2) del subsuelo se ha triplicado en dos meses, aunque a¨²n sigue lejos de niveles de erupci¨®n (el CO2 se escapa del magma y medir cu¨¢nto sale del subsuelo es una forma indirecta de medir la fiebre del subsuelo).
Los siente Tom¨¢s Gonz¨¢lez, el guarda de la Ermita de Nuestra Se?ora de los Reyes, "morada de la virgen desde 1577", una construcci¨®n encalada y sencilla en un rinc¨®n de la isla, en medio de un pinar. Tom¨¢s ha colocado jarrones de cristal pegados sobre una endeble estanter¨ªa. ?l demuestra la efectividad de este sism¨®metro de bajo coste: con un simple roce, los jarrones tintinean. Esta ma?ana, los jarrones han cantado a las 10.38, 10.39 y 11.11. Tres temblores sentidos en solo 20 minutos.
Los testimonios de la gente coinciden con las gr¨¢ficas de energ¨ªa liberada que muestra el Instituto Geogr¨¢fico Nacional (IGN) y que sufri¨® un aumento espectacular el pasado viernes, casi coincidiendo con la decisi¨®n del Gobierno canario de poner el sem¨¢foro volc¨¢nico en ¨¢mbar, en situaci¨®n de preemergencia.
Crece el nerviosismo entre los vecinos
La gente en la isla sigue tranquila pero crece el nerviosismo. Cuatro peregrinos que pasaban unos d¨ªas en la ermita han sido desalojados. Mima y do?a Jovita, del pueblo de Frontera, han dejado el lugar al que hab¨ªan ido a rezar unos d¨ªas a toda prisa, sin llevarse siquiera la fruta.
Edgar, un venezolano que atiende la gasolinera de Valverde, explic¨® la noche del viernes que las colas para repostar combustible hab¨ªan crecido. "El temor es que nos obliguen a cerrar", explicaba.
Sin embargo, muy poca gente abandona la isla. En el puerto de La Estaca, en la taquilla de la naviera Armas solo han acudido unas 15 personas para sacar un billete para el ferry del d¨ªa siguiente. All¨ª explican que es m¨¢s de lo normal, porque lo m¨¢s frecuente es sacar el billete el mismo d¨ªa.
En El Hierro, una isla de 10.000 habitantes con solo dos sem¨¢foros y ni un ascensor, todo el mundo se conoce. El cierre del principal t¨²nel que cruza la isla es un engorro considerable, ya que ahora hay que usar una carretera de monta?a. Pero las molestias del d¨ªa anterior, cuando de noche ordenaron evacuar a unas 50 personas por miedo a posibles desprendimientos, se han visto amortiguadas.
En la residencia de estudiantes habilitada para los desplazados de esta tarde solo quedaba una familia de origen saharaui. Corretean por los pasillos los ni?os y una de las hijas. Salma Mint, explica que hab¨ªan ido all¨ª porque con el cierre del t¨²nel tem¨ªan que se hiciera muy dif¨ªcil pasar de un lado a otro de la isla.
"Tratamos de no dejar nada al azar"
Las autoridades mantienen la llamada a la calma. El presidente canario, Paulino Rivero, ha destacado que las evacuaciones "no tienen otro fin que prevenir desprendimientos en zonas escarpadas". Rivero ha insistido: "Tenemos los medios necesarios para ponernos en la peor de las situaciones", pero ahora "la situaci¨®n es de normalidad". "No vamos a leer el futuro. No estamos en 1971, cuando todo era intuici¨®n", en alusi¨®n a la ¨²ltima erupci¨®n en Canarias, la del Tenegu¨ªa en 1971. "No tenemos previsto tomar m¨¢s decisiones", ha conclu¨ªdo.
A su lado, la ministra de Defensa, Carme Chac¨®n, asiente. Chac¨®n ha acudido para supervisar el desembarco de los primeros miembros de la Unidad Militar de Emergencias (UME). Sobre las 16.00 sus camiones han desembarcado del fast ferry Bonanza Express en el Puerto de la Estaca. La UME ha anunciado en un comunicado que desplaz¨® a la isla a 31 militares, camiones y que tiene preparada la instalaci¨®n de un campamento para 2.000 personas. Chac¨®n ha anunciado que la UME permanecer¨¢ el tiempo que haga falta: "Tratamos de no dejar nada al azar".
El m¨¢s gr¨¢fico ha sido el presidente del cabildo de El Hierro, Alpido Armas, en el cargo desde el 30 de agosto por una moci¨®n de censura, y que se ha topado de bruces con la crisis: "No va a pasar que tengamos que evacuar a 4.000 personas. En caso de que se produzca una erupci¨®n, ser¨¢ una erupci¨®n nada violenta y lo m¨¢ximo que puede pasar es que surja una monta?a de 200 metros".
En el mismo barco, la Cruz Roja ha descargado el material para levantar un albergue para 500 personas y un equipo m¨¦dico para atender a 50 heridos. Acabe o no en erupci¨®n la crisis s¨ªsmica de El Hierro, pocas veces se ha visto una preparaci¨®n similar en Espa?a.
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