China da un paso clave en su proyecto de construir una estaci¨®n espacial

China ha dado un paso clave hacia su ansiado objetivo de construir una estaci¨®n espacial para el a?o 2020. El pa¨ªs asi¨¢tico ha lanzado hoy con ¨¦xito un cohete Larga Marcha, que ha colocado en una ¨®rbita inicial de 200 kil¨®metros la nave Shenzhou 8, no tripulada. En dos d¨ªas, esta deber¨¢ acoplarse, a unos 340 kil¨®metros de la Tierra, con el m¨®dulo Tiangong 1 (Palacio Celestial 1), que fue enviado a finales de septiembre.

Shenzhou 8 parti¨® a las 5.58 de la ma?ana (siete horas menos en la Espa?a peninsular) de la estaci¨®n de lanzamiento de Jiuquan, situada en el desierto de Gobi, seg¨²n ha informado la agencia oficial Xinhua. Su conexi¨®n con el m¨®dulo experimental Tiangong 1 -la primera operaci¨®n de este tipo que realiza el pa¨ªs asi¨¢tico- supondr¨¢ un avance crucial para el ambicioso programa espacial chino, dentro del cual se enmarca el plan de construir un laboratorio orbital en el que los astronautas puedan vivir durante varios meses, como hacen en la Estaci¨®n Espacial Internacional (ISS, en sus siglas inglesas).

"Dominar la tecnolog¨ªa del encuentro y el acoplamiento pondr¨¢ unos cimientos s¨®lidos al proyecto de estaci¨®n espacial chino", ha dicho Zhou Jianping, jefe de dise?o del programa tripulado, seg¨²n la agencia. "Una vez dominada, poseeremos el conocimiento y la capacidad para construir la estaci¨®n espacial, y esto abrir¨¢ la posibilidad a mayores actividades en el espacio". Esta tecnolog¨ªa es dif¨ªcil de controlar, porque las dos naves, situadas a la misma distancia de la Tierra y viajando a 28.000 kil¨®metros por hora, deben acercarse progresivamente para evitar destruirse mutuamente.

Tiangong 1 fue lanzado el pasado 29 de septiembre, un par de d¨ªas antes de la fiesta nacional china, el 1 de octubre, aniversario de la fundaci¨®n de la Rep¨²blica Popular China. Pek¨ªn considera su programa espacial un s¨ªmbolo del progreso econ¨®mico y tecnol¨®gico, y del creciente poder del pa¨ªs. Adem¨¢s, lo utiliza como herramienta de propaganda nacionalista y de los logros alcanzados por el Partido Comunista Chino (PCCh).

Los responsables chinos prev¨¦n llevar a cabo dos operaciones de acoplamiento, tras lo cual Shenzhou 8 regresar¨¢ a la Tierra. Si el plan tiene ¨¦xito, el a?o que viene, tendr¨¢n lugar otras dos misiones similares; una de las cuales al menos ser¨¢ tripulada. Entre los astronautas que se est¨¢n preparando figuran dos mujeres. De ser elegida alguna de ellas, ser¨ªa la primera vez que China env¨ªa una mujer al espacio, un potente s¨ªmbolo en este pa¨ªs donde el sexo femenino -del que el l¨ªder chino Mao Zedong dijo una vez que "sosten¨ªa la mitad del cielo"- sufre grandes discriminaciones laborales.

Pek¨ªn puso en marcha su programa espacial tripulado en 1990, despu¨¦s de adquirir tecnolog¨ªa rusa. En 2003, se convirti¨® en el tercer pa¨ªs del mundo en enviar un ser humano al espacio, tras la antigua Uni¨®n Sovi¨¦tica y Estados Unidos. El astronauta Ying Liwei dio 14 vueltas a la Tierra. En 2008, la nave Shenzhou 7, con tres tripulantes, llev¨® a cabo el primer paseo chino en el espacio. Pek¨ªn prev¨¦ realizar una misi¨®n de aterrizaje lunar no tripulada el a?o que viene, y los cient¨ªficos han mencionado la posibilidad de situar a un ser humano en el sat¨¦lite terrestre despu¨¦s de 2020.

A pesar de los progresos experimentados por el pa¨ªs asi¨¢tico en los ¨²ltimos a?os, a¨²n est¨¢ lejos de lo alcanzado por Occidente. El Tiangong 1 es un m¨®dulo experimental, no uno destinado a formar parte de la futura estaci¨®n espacial. Tanto los estadounidenses como los rusos realizaron acoplamientos de naves en ¨®rbita en la d¨¦cada de 1960. La ISS -en la que participan Estados Unidos, Rusia, Jap¨®n, Canad¨¢ y Europa- puso en ¨®rbita su primer elemento en 1998. Dos a?os despu¨¦s, lleg¨® la primera tripulaci¨®n completa. China fue dejada fuera del proyecto por las objeciones estadounidenses. Washington recela de la conexi¨®n del programa espacial chino con el Ej¨¦rcito y no quiere compartir su tecnolog¨ªa con su principal competidor econ¨®mico y pol¨ªtico.

La futura estaci¨®n espacial china incluir¨¢ el m¨®dulo, dos laboratorios, una nave de carga y un cohete tripulado, con un peso total de 60 toneladas, frente a las 137 toneladas de la estaci¨®n rusa Mir y las m¨¢s de 400 toneladas de la ISS.

Estados Unidos ha asegurado que no ensayar¨¢ un nuevo cohete para llevar gente al espacio hasta 2017, y Rusia ha dicho que las misiones espaciales tripuladas ya no son una prioridad. La agencia espacial estadounidense (NASA), sin embargo, ha desvelado los planes de un cohete de largo alcance para enviar astronautas a la Luna y Marte, y el presidente estadounidense, Barack Obama, ha pedido que se lleve a cabo una misi¨®n tripulada al sat¨¦lite lo m¨¢s tarde en 2025, y a Marte en la d¨¦cada de 2030.

Los expertos aseguran que China no tiene prisa, que su prioridad es la seguridad y el ¨¦xito, y que sus planes podr¨ªan retrasarse. Pero la intenci¨®n de Pek¨ªn de participar en la carrera del espacio es clara. El diario Global Times, ligado al Diario del Pueblo -¨®rgano oficial del PCCh-, afirma que a¨²n no est¨¢n claros los beneficios que aportar¨¢ la inversi¨®n en tecnolog¨ªa espacial, pero que el pa¨ªs "no tiene otra opci¨®n" que continuar el programa de exploraci¨®n. "Mientras sigamos determinados a subir como naci¨®n en el mundo y a continuar con el proceso de rejuvenecimiento, necesitamos correr riesgos. De lo contrario, China ser¨¢ una naci¨®n pr¨®spera, pero subordinada a las grandes potencias".

Sin embargo, los cr¨ªticos se preguntan si no ser¨ªa mejor destinar este dinero a elevar el nivel de vida de la poblaci¨®n, cuando en el pa¨ªs asi¨¢tico existen 150 millones de personas, que, seg¨²n el Banco Mundial, viven con menos de 1,25 d¨®lares al d¨ªa.