"Hoy es un gran d¨ªa para la consolidaci¨®n de la libertad religiosa"

Francisco Manzanas tiene 85 a?os y recibe la noticia feliz, pero con un deje de desencanto que no puede disimular. Muy enfermo desde hace a?os, resiste a un c¨¢ncer pele¨®n con un coraje que admira a sus muchos amigos y fieles. Prefiere dejar la responsabilidad de atender a EL PA?S a su hijo David, de 56 a?os, tambi¨¦n pastor de la Iglesia evang¨¦lica. Dice: ¡°Hoy es un d¨ªa de alegr¨ªa para mi familia, especialmente para mi padre. El Tribunal de Estrasburgo le ha dado la raz¨®n y sentencia que ha sido discriminado por el Estado espa?ol por razones de confesi¨®n religiosa", dice.

David Manzanas asegura que hoy tambi¨¦n es un d¨ªa importante para la Iglesia evang¨¦lica espa?ola. "Este agravio hist¨®rico ha sido resuelto por el TEDH ante la incapacidad de los diferentes Gobiernos del Estado espa?ol que se han sucedido desde la reinstauraci¨®n de la democracia hasta hoy. Ni los Gobiernos de la UCD ni los del PSOE ni los del PP han sido capaces de reparar esta situaci¨®n de discriminaci¨®n de los pastores protestantes frente a los sacerdotes cat¨®licos. Hoy, finalmente, es un buen d¨ªa para el mundo protestante en general, que ve c¨®mo el derecho de libertad religiosa queda consolidado. Ahora solo falta que, en medio de un mare m¨¢gnum de recortes, el Gobierno atienda las exigencias del TEDH. Esperamos que s¨ª. Es de justicia¡±.

Ning¨²n Gobierno espa?ol ha sido capaz de reparar esta situaci¨®n"

Hasta 1999 no se permiti¨® a los ministros de culto evang¨¦licos cotizar a la Seguridad Social. El clero cat¨®lico diocesano cotiza sin embargo desde 1977 y adem¨¢s puede hacerlo retroactivamente por periodos anteriores a esta fecha para as¨ª poder alcanzar el derecho a obtener pensiones u otras prestaciones. A los ministros evang¨¦licos no se les reconoce todav¨ªa ese derecho a cotizar ni computar los periodos anteriores a 1999, con lo que las pensiones de los que ejercieron su ministerio religioso en la ¨¦poca de la dictadura se ven perjudicadas. Tal es el caso del pastor Manzanas.

La explicaci¨®n que ha dado el Gobierno en el proceso de Estrasburgo apunta a que esos 22 a?os de retraso (desde 1977 hasta 1999) fueron necesarios para concluir las negociaciones con la Iglesias evang¨¦licas que no estaban arraigadas en Espa?a. En opini¨®n de Mariano Bl¨¢zquez, secretario ejecutivo de la Federaci¨®n de Entidades Religiosas Evang¨¦licas de Espa?a (FEREDE), ¡°eso es una burda excusa, o una mentira¡±. A?ade: ¡°Las negociaciones se produjeron al mismo tiempo que con el clero diocesano y lo que ocurri¨® es que Espa?a ha dilatado, sin raz¨®n, a?os y a?os este asunto (al igual que otros muchos que conllevan igualdad de trato) porque no se ha querido incorporar a este colectivo o se ha pretendido realizarlo en condiciones injustas.

Lo ideal es una soluci¨®n igual para todas las confesiones religiosas"

¡°En conversaciones privadas, diferentes ministros siempre nos han dicho palabras como: es que no nos gusta lo que se ha aprobado (o la forma en que se ha aprobado) para la Iglesia cat¨®lica (para los sacerdotes secularizados), no lo consideramos justo y por eso no queremos extenderlo a vosotros. Con ello se cometen tres injusticias y no una. La primera es no aprobar una regulaci¨®n justa. La segunda es aprobar algo que no consideran justo. Y la tercera es no aplicar en cualquiera de los casos el principio de igualdad, con lo que producen una lesi¨®n constitucional¡±, concluye Bl¨¢zquez.

El dirigente de la FEREDE, que ha llevado estas negociaciones ante diferentes Gobiernos (y de varias tendencias), tambi¨¦n est¨¢ enfadado. ¡°Es triste que el Gobierno tenga que verse obligado por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos para reconocer a una persona de cerca de 90 a?os su dignidad y su derecho en t¨¦rminos de igualdad. Espero que tras esta sentencia se pueda por fin desbloquear la situaci¨®n de los pastores evang¨¦licos y se arbitren soluciones que reconozcan que no fueron tratados dignamente. Que puedan cotizar y que se les puedan reconocer pensiones en t¨¦rminos an¨¢logos a las soluciones dadas para otros colectivos como los sacerdotes diocesanos y los secularizados. Mi petici¨®n es que la regulaci¨®n sobre estas situaciones no tenga que ver con el notorio arraigo, sino con la persona y su derecho a la igualdad de trato. Por tanto, lo ideal es una soluci¨®n igual para todas las confesiones y personal religioso que la desee¡±.