Cegatos, pero no sorderas

Ya se dice que el Se?or reparte las desgracias. Oigan o vean, si no. Estamos en un pa¨ªs de cegatos (un 59% usa gafas o lentillas), pero o¨ªamos de maravilla (solo el 2,2% lleva aud¨ªfonos), y aquellas comunidades que ven bien, no oyen, y las que oyen, no ven. Es lo que se?alan las encuestas del Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE), que no entra a averiguar qui¨¦nes oyen, pero no escuchan, y quienes ven, pero no miran.Los murcianos son los m¨¢s sordos del pa¨ªs, un 3,78% de su poblaci¨®n usa aud¨ªfono, sin embargo, son los que mejor ven pues solo el 52,8% de la poblaci¨®n mayor de 16 a?os necesita gafas o lentillas, 10 puntos de diferencia respecto a los riojanos, los m¨¢s cegatos del pa¨ªs.

La diversidad y riqueza multicultural (v¨¦ase, crisol de culturas) de nuestras autonom¨ªas no es solo cuesti¨®n de sus paisajes, ni de sus gentes, ni de sus econom¨ªas. Ni siquiera que a la misma lluvia unos la llamen calabobos y otros orbayu y otros chirimiri. La diversidad tambi¨¦n es f¨ªsica. Por ejemplo, los extreme?os (apunte Duran Lleida) ven mejor que los catalanes, al menos sin gafas. El 58% de los hombres de Catalu?a tienen que llevar lentillas o antiparras, un engorro, adem¨¢s de un gasto, que solo necesitan acometer el 48% de los hombres extreme?os, 10 puntos menos, diferencia suficiente como para que a Extremadura se le quiten competencias y recursos en el campo visual y se los queden los hombres catalanes.

Pero, ojo, que no es lo mismo un hombre catal¨¢n que una mujer catalana. En general, la mujer del Estado espa?ol ve peor o usa m¨¢s gafas (53,7% contra 64,8%), que es de lo que se ocupa de saber el INE, pero de entre todas ellas destaca la aragonesa, pues el 71% va con gafas o lentillas, una diferencia sustancial respecto a la mujer murciana (56% usa gafas), que es la que peor oye del pa¨ªs. En general, se podr¨ªa concluir que los del Sur ven mejor que los del Norte, ah¨ª queda abierta una l¨ªnea de investigaci¨®n. El pack completo ser¨ªa juntar a la murciana, que ve bien, pero que no oye, con la mujer canaria, que oye de maravilla (?ser¨¢ por el silbo?), pues solo necesitan aud¨ªfono el 0,99% de las mujeres de esta comunidad. Tambi¨¦n falla la mujer murciana en movilidad, la que m¨¢s del Estado, un 15,45% declaran que tienen problemas, casi cuatro veces menos que las mujeres de las islas Baleares (4,53%), las mejores andarinas.

En general, pecamos de buena salud. Mayormente morimos en la cama (si est¨¢ en habitaci¨®n o en pasillo es cuesti¨®n que no viene al caso). Nuestro ¨ªndice de muertos violentamente (37 por cada 100.000) hace empalidecer a Finlandia (99 sobre 100.000), ese pa¨ªs casi perfecto que se pone farruco para que la UE nos preste ayuda. Solo Estonia, Letonia y Lituania tienen m¨¢s muertes violentas que Finlandia. En este gran pa¨ªs hay un ¨ªndice de trastornos mentales por alcohol del 4,3 (Espa?a, 0,9). Algo extra?o pasa por arriba, pues la humanidad prefiere morirse de hambre antes que subirse all¨ª a trabajar (solo el 3,4% de sus 5,5 millones de habitantes son inmigrantes). El pasado a?o les fue fatal. Aument¨® su poblaci¨®n en 21.000 personas, algo que no ocurr¨ªa desde 1991, y, claro, creci¨® la xenofobia. Y ?quieren saber d¨®nde se suicidan menos? En los pa¨ªses intervenidos (o en trance de) como Grecia, Chipre o Espa?a, seg¨²n el ¨²ltimo estudio del INE, en 2009. Ciegos, sordos o cojos, gozamos de una mala salud de hierro.