Rosario Valpuesta, feminista y defensora de los vulnerables

Rosario Valpuesta Fern¨¢ndez, nacida hace 60 a?os en Sevilla, fue pionera en muchas asignaturas. La m¨¢s conocida es que fue de las primeras mujeres rectoras en Espa?a al hacerse cargo en 1997 de la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla, una instituci¨®n que naci¨® de su mano y a la que ha estado vinculada hasta sus ¨²ltimos d¨ªas, ya que recientemente ofreci¨® la lecci¨®n inaugural a los alumnos de posgrado. Esta catedr¨¢tica de Derecho Civil falleci¨® el martes por un c¨¢ncer contra el que ha luchado durante m¨¢s de una d¨¦cada y que todos estaban convencidos de que vencer¨ªa, seg¨²n record¨® su sucesor en el Rectorado, Vicente Guzm¨¢n Fluja.

Separada y con dos hijos, a Valpuesta le gustaba la literatura latinoamericana, el cineasta alem¨¢n Wim Wenders, el investigador colombiano Elkin Patarroyo y la Biblia. Tambi¨¦n fue pionera en el feminismo activo y critic¨® firmemente la doble jornada de las mujeres, los sueldos m¨¢s bajos para igual tarea y la menor presencia de estas en cargos directivos porque, dec¨ªa, todas estas circunstancias impiden el ¡°ejercicio de plena ciudadan¨ªa¡±. En este sentido, reclam¨® la ¡°feminizaci¨®n del poder¡± para facilitar el acceso de la mujer a los puestos donde se toman las decisiones.

¡°En Espa?a, la jornada de un pol¨ªtico se extiende hasta las diez de la noche, con 13 inauguraciones y 13 actos. Esto es incompatible con un proyecto de vida personal, salvo en el caso de las mujeres que asumen los valores masculinos¡±, afirm¨® durante unas jornadas.

Tambi¨¦n promovi¨® la creaci¨®n de una red feminista desde la Universidad, que consideraba muy masculinizada, aunque no machista. Se lamentaba de esta circunstancia cuando m¨¢s de la mitad del alumnado est¨¢ compuesto por mujeres. ¡°Pero, cuando se va ascendiendo en la c¨²pula acad¨¦mica, el n¨²mero se reduce, sobre todo entre los catedr¨¢ticos, que es de donde se elige al rector o rectora¡±, explicaba.

Particip¨® directamente en numerosos programas para ayudar a las mujeres rurales y de Am¨¦rica Latina a luchar contra la discriminaci¨®n.

¡°No se puede entender la Universidad Pablo de Olavide sin la figura de Rosario Valpuesta¡±, advirti¨® el rector, muy afectado por la muerte de su compa?era, de quien destac¨® especialmente su fortaleza, entereza y compromiso con las personas m¨¢s vulnerables.

Uno de sus proyectos m¨¢s significativos y que definen su personalidad fue la creaci¨®n de la residencia universitaria Flora Trist¨¢n y de un Vicerrectorado de Cultura, Participaci¨®n y Compromiso Social. Esta residencia est¨¢ ubicada en el barrio de Las Letan¨ªas de Sevilla, uno de los m¨¢s desfavorecidos, para promover la integraci¨®n y la recuperaci¨®n de la zona con la presencia de los universitarios. Acciones como esta son ¡°el alma y el coraz¨®n¡± de la Universidad, algo que Guzm¨¢n atribuye exclusivamente a su amiga, por cuya muerte se han establecido siete d¨ªas de luto oficial en la instituci¨®n acad¨¦mica y uno sin clase, ma?ana, para facilitar a los alumnos que acudan al funeral en el tanatorio de la SE-30.

Uno de los incidentes a los que tuvo que enfrentarse fue el encierro en 2002 de hasta medio millar de inmigrantes que reclamaban su regularizaci¨®n. Finalmente, pese a todos los intentos de resoluci¨®n del conflicto, se vio obligada a ordenar el desalojo de la Universidad despu¨¦s de que produjeran altercados con trabajadores y se amenazara con la ocupaci¨®n de m¨¢s pabellones.

Valpuesta fue una alumna destacada en la Facultad de Derecho de la Universidad de Sevilla, donde public¨® una tesis sobre los pactos de separaci¨®n de hecho. Accedi¨® a la c¨¢tedra de Derecho Civil en 1989 y fue la primera vicerrectora de alumnos de la ¨²nica universidad de Sevilla hasta que ella cre¨® la Pablo de Olavide.