Aprobado el suicidio asistido en Vermont
Tras la firma del Gobernador, este Estado se unir¨¢ a Washington, Oreg¨®n y Montana en legalizar la pr¨¢ctica
El derecho a morir sin dolor ser¨¢ muy pronto una realidad en Vermont (Estados Unidos). Con la victoria de la ley, denominada End of Life Choice Bill, en el Senado (17/13) y en la C¨¢mara de Representantes con 75 votos a favor y 65 en contra, solo queda la firma del Gobernador, Peter Shumlin, un gran defensor de esta medida, para que entre en vigor. La aprobaci¨®n definitiva est¨¢ prevista para dentro de cinco d¨ªas.
"La decisi¨®n tomada en Vermont va a influir en el debate nacional a este respecto, pero hay que entender que el reconocimiento del suicidio asistido por parte de este Estado llega despu¨¦s de un debate interno acalorado y meditado. Hemos mantenido un di¨¢logo muy respetuoso sobre un tema tan dif¨ªcil como es la muerte digna, que cuenta con argumentos muy poderosos entre los que est¨¢n en contra y entre los que la respaldan", explic¨® el Gobernador.
Tras la aprobaci¨®n definitiva, Vermont se convertir¨¢ en el cuarto Estado junto a Oreg¨®n, Washington y Montana en contar con esta legislaci¨®n, y en el primero de la costa Este en permitir que los m¨¦dicos administren drogas letales a los enfermos terminales. Es la primera vez que un Estado ha concedido la aprobaci¨®n legislativa a una regulaci¨®n de este tipo. Oreg¨®n y Washington consiguieron legalizar la muerte digna por refer¨¦ndum y una sentencia judicial lo hizo en Montana. En otros Estados no ha salido adelante. Massachussets llev¨® la iniciativa a refer¨¦ndum el a?o pasado, pero la medida fue derrotada, en gran parte, por la fuerte campa?a que llevaron a cabo grupos contrarios como cat¨®licos y antiabortistas.
La ley de Muerte Digna aprobada en Vermont es bastante similar a la planteada en Oreg¨®n en 1997. Esta regulaci¨®n fue la primera en EE UU en permitir a los m¨¦dicos recetar f¨¢rmacos para acelerar el fallecimiento de los enfermos con un pron¨®stico de vida m¨¢ximo de seis meses. Adem¨¢s, la regulaci¨®n requiere que el paciente terminal sea capaz de ingerir los medicamentos sin ayuda externa y que este haya solicitado el tratamiento al menos tres veces, una por lo menos por escrito, en las que especifica que desea morir.
Algunos cr¨ªticos a la ley contin¨²an alzando la voz en el Estado. "Esta norma es potencialmente peligrosa en cu¨¢nto al abuso de su utilizaci¨®n en personas discapacitadas, como los ancianos", dijo la republicana Carolyn Branagan a la agencia a AP. "No se trata de cuidado m¨¦dico. Es justo lo opuesto", a?adi¨®.
Mientras que entre aquellos que apoyan la medida el sentimiento es muy diferente. "Esta regulaci¨®n no juzga el valor de la vida humana, sino que habla del valor de la libertad personal y del derecho a que cada uno pueda hacer su propias elecciones", asegur¨® el dem¨®crata Richard McCormack a la agencia AP. "Es un paso importante para los enfermos terminales de Vermont y un gran paso para toda la regi¨®n y para el pa¨ªs", agreg¨® un portavoz de Patients Choice.
S¨ª finalmente Shumlin firma la ley, Vermont pasar¨¢ a un modelo m¨¢s permisivo a los tres a?os (1 de julio de 2016) que implicar¨¢ una evaluaci¨®n menos estricta por parte del Gobierno. Aunque este punto de la ley es el m¨¢s criticado y posiblemente desaparezca antes de esta fecha y se mantenga el modelo similar al de Oreg¨®n.
El suicidio asistido por un m¨¦dico no es algo com¨²n en los Estados que lo permiten. En Oreg¨®n, desde 1998 hasta 2011 se han otorgado 935 licencias para administrar este tipo de f¨¢rmacos, de las que unas 596 se han usado realmente. En Washington, Estado que implant¨® la ley en 2009, 103 pacientes terminales han solicitado el tratamiento y de ellos 70 lo han llevado a cabo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.