Espa?a carece de un inventario de suelos contaminados por radiactividad
Una norma de 2008 obliga al Consejo de Seguridad Nuclear a elaborar el cat¨¢logo
Un traj¨ªn de agricultores y tractores envolv¨ªa este mi¨¦rcoles los m¨¢rgenes de la Real Acequia del Jarama a la altura de San Mart¨ªn de la Vega (Madrid). Ninguno de los agricultores sab¨ªa nada del vertido radiactivo de 1970 que la dictadura ocult¨® ni de las ocho zanjas en los m¨¢rgenes a lo largo del canal de riego en las que se enterraron los lodos contaminados por aquel accidente.
Una de esas zanjas, seg¨²n la documentaci¨®n a la que ha accedido EL PA?S, se excav¨® junto a la conocida entonces como ermita de San Blas, en el t¨¦rmino municipal de San Mart¨ªn de la Vega, cerca de donde el mi¨¦rcoles trabajaban esos agricultores que dec¨ªan que eran demasiado j¨®venes para acordarse de aquello o que no ten¨ªan tiempo para pararse a hablar.
Ese cementerio o banqueta, como se denomina en los expedientes del caso a las zonas en las que se escondieron las tierras contaminadas con cesio?137 y estroncio?90, no est¨¢ hoy se?alizado ni delimitado de ninguna forma. Tampoco figura esa banqueta, ni las otras siete en las que se escondieron residuos, en ning¨²n inventario oficial. Simplemente, porque en Espa?a no existe todav¨ªa un cat¨¢logo de tierras afectadas por contaminaci¨®n radiactiva, y ello a pesar de que la normativa vigente lo exige desde hace una d¨¦cada.
En enero de 2008 se aprob¨® el Real Decreto 35/2008 a trav¨¦s del que se modific¨® el reglamento sobre instalaciones nucleares y radiactivas. En el pre¨¢mbulo se destacaba, ¡°como aspecto novedoso¡±, que con esa modificaci¨®n se regulaba ¡°el control de ¨¢reas contaminadas¡± para dar ¡°soluci¨®n al control de terrenos o recursos hidrol¨®gicos que, no perteneciendo a instalaciones reguladas por el Reglamento sobre Instalaciones Nucleares y Radiactivas, se hayan visto afectados por contaminaci¨®n radiol¨®gica¡±.
Petici¨®n de explicaciones
La Consejer¨ªa de Medio Ambiente de Castilla-La Mancha se enter¨® este domingo, por lo que public¨® EL PA?S, de la existencia de ocho zanjas en las que en los a?os setenta se enterraron lodos contaminados por radiactividad. As¨ª lo ha admitido su titular, Francisco Mart¨ªnez Arroyo, quien este lunes tiene intenci¨®n de ponerse en contacto con el CSN para "pedir informaci¨®n". Sorprende que el Gobierno de Castilla-La Mancha desconozca los enterramientos porque parte de esas zanjas est¨¢n en su comunidad. "El CSN debe informar y garantizar que no hay riesgo para la salud", apunta el consejero.
Unidos Podemos presentar¨¢ este lunes peticiones de informaci¨®n en el Congreso, la Asamblea de Madrid y el CSN. Juan L¨®pez de Uralde, de Equo (formaci¨®n integrada en el grupo de Unidos Podemos), reclama "transparencia". L¨®pez de Uralde, quien tampoco conoc¨ªa los enterramientos clandestinos, pide que se siga "controlando la zona y descontaminando si es preciso".
Ese fue precisamente el caso de los m¨¢rgenes del canal de riego del Jarama en los que el franquismo enterr¨® de forma clandestina los lodos contaminados por el vertido de la extinta Junta de Energ¨ªa Nuclear (JEN). El vertido se inici¨® en el Centro Nacional de Energ¨ªa Nuclear Juan Vig¨®n, ubicado en la Ciudad Universitaria de Madrid y que hoy es la sede del Ciemat. Estas instalaciones s¨ª estaban consideradas como nucleares (hab¨ªa incluso un reactor experimental, origen del vertido). Pero las aguas t¨®xicas se colaron por las alcantarillas y salieron del recinto hasta el Manzanares, el Jarama y el Tajo. El rastro de contaminaci¨®n se acumul¨® en los fondos del canal de riego y de ah¨ª los t¨¦cnicos sacaron la tierra y la enterraron en las zanjas.
El art¨ªculo 81 del real decreto de 2008 se?ala: ¡°El Consejo de Seguridad Nuclear [CSN] elaborar¨¢ un inventario de los terrenos o recursos hidrol¨®gicos de los que tenga conocimiento que se hayan visto afectados por contaminaci¨®n radiol¨®gica, informando de ello a las autoridades competentes a los efectos oportunos¡±. El CSN ¡ªheredero junto al Ciemat de la extinta Junta de Energ¨ªa Nuclear (JEN)¡ª conoce perfectamente que se produjo el vertido y el enterramiento de los lodos radiactivos a lo largo del canal. De hecho, en 2012 el ¨¢rea de Protecci¨®n Radiol¨®gica Ambiental del CSN elabor¨® un informe relacionado con el futuro inventario de suelos contaminados que concluy¨® que se debe ¡°realizar una caracterizaci¨®n m¨¢s completa del alcance de la contaminaci¨®n¡± en los enterramientos del Jarama. Pero la aprobaci¨®n del inventario est¨¢ paralizada.
En abril de 2010 se constituy¨® un grupo de trabajo entre el CSN, el entonces Ministerio de Energ¨ªa y Enresa, la empresa p¨²blica encargada de gestionar los residuos radiactivos. En el transcurso de aquel proceso se elabor¨® el informe sobre el Jarama. El CSN lleg¨® a redactar un borrador para un segundo real decreto en el que se establec¨ªan los criterios para declarar los suelos contaminados y poder hacer el inventario. Pero, una d¨¦cada despu¨¦s, el real decreto que permitir¨¢ tener ese cat¨¢logo a¨²n no se ha aprobado.
Un portavoz del CSN se?ala que el borrador del real decreto que se redact¨® "asignaba al ministerio la responsabilidad de la declaraci¨®n de un suelo como contaminado o como un suelo con restricciones de uso por razones radiol¨®gicas y, con ello, un inventario de esos suelos". "Pero, finalmente, no se aprob¨® este proyecto de real decreto que implicaba modificar previamente la Ley sobre Energ¨ªa Nuclear 15/1964", a?ade.
La Operaci¨®n Tajo
El 7 de noviembre de 1970 se produjo un vertido radiactivo desde la Ciudad Universitaria de Madrid.
El vertido lleg¨® al Manzanares, al Jarama y al Tajo. La dictadura ocult¨® sus consecuencias. Y, de forma clandestina, puso en marcha la llamada Operaci¨®n Tajo.
En abril de 1971, el r¨¦gimen enterr¨® lodos radiactivos en ocho zanjas a lo largo del canal del Jarama. Y durante casi medio siglo, los enterramientos no han salido a la luz.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
M¨¢s informaci¨®n
Archivado En
- R¨ªo Jarama
- CSN
- Ciemat
- Residuos nucleares
- Organismos p¨²blicos investigaci¨®n
- Residuos
- R¨ªos
- Pol¨ªtica cient¨ªfica
- Saneamiento
- Espacios naturales
- Investigaci¨®n cient¨ªfica
- Problemas ambientales
- Salud p¨²blica
- Equipamiento urbano
- Agua
- Pol¨ªtica sanitaria
- Administraci¨®n Estado
- Urbanismo
- Sanidad
- Salud
- Medio ambiente
- Administraci¨®n p¨²blica
- Ciencia