La Audiencia de Lleida condena por abusos y no por agresi¨®n a dos hombres que violaron a una joven
El tribunal alega que aunque la v¨ªctima llor¨® y pidi¨® que parasen, los agresores no usaron violencia o intimidaci¨®n
La Audiencia de Lleida ha condenado a cuatro a?os y seis meses de prisi¨®n a dos hombres que violaron en agosto del a?o pasado a una joven en Vielha (Lleida). El tribunal considera que no hubo agresi¨®n sexual, como ped¨ªa la fiscal¨ªa, que solicitaba 15 a?os de c¨¢rcel, porque a pesar de que ella se neg¨® y pidi¨® a los agresores que parasen, no grit¨® ni se resisti¨®.
La Audiencia da total veracidad al relato de la v¨ªctima y considera probado que la joven acab¨® siendo violada en la parte trasera de una discoteca, por dos hombres, Marco Antonio Z., de 28 a?os, y Jhonny R., de 23, t¨ªo y sobrino. La joven conoc¨ªa al m¨¢s joven de los dos de vista y hab¨ªa hablado con ¨¦l en un par de ocasiones.
Tras encontr¨¢rselos en un bar, sigui¨® con ellos la noche, fueron a una discoteca, continuaron bebiendo y la v¨ªctima sali¨® a la parte trasera con Marco Antonio Z. All¨ª el hombre la bes¨®, seg¨²n la sentencia, ella le correspondi¨® y le ¡°rode¨® con las piernas¡± y se dirigieron a una rampa a la izquierda de la discoteca, descendiendo hasta el final. Una vez all¨ª, Marco Antonio Z. ¡°la puso cara a la pared¡±, le baj¨® los pantalones y la ropa interior y la penetr¨® ¡°pese a que la joven le dijo repetidamente y llorando 'no' y 'por favor, para¡±.
Cuando Marco Antonio Z. acab¨®, se dirigi¨® a su sobrino, que hab¨ªa acudido posteriormente al lugar, y le dijo "ahora te toca a ti", se?ala el fallo. El hombre la viol¨® y la oblig¨® a hacerle una felaci¨®n hasta que la v¨ªctima, que repet¨ªa "no m¨¢s por favor", vomit¨®. Al acabar, Marco Antonio Z. se ofreci¨® a llevarla a casa y la acab¨® acompa?ando a un puente delante del hospital, donde la joven se qued¨® llorando hasta que acudi¨® al centro sanitario y explic¨® lo sucedido.
El tribunal sostiene que la declaraci¨®n de la v¨ªctima fue "totalmente cre¨ªble" y considera que las dudas o inconcreciones de la mujer en "momentos puntuales" de su relato son "perfectamente compatibles" con la mezcla de "la ingesta alcoh¨®lica y ansiol¨ªticos". Su testimonio, subraya, "denota una inquebrantable persistencia y ausencia de contradicciones tanto en cuanto a su negativa a mantener relaciones sexuales con los acusados, como en la imputaci¨®n de los hechos".
A pesar de eso, la Audiencia de Lleida considera que las violaciones no se cometieron "mediante una actuaci¨®n violenta o intimidativa" que permitan calificar lo sucedido como una "agresi¨®n sexual". El ataque, sostiene, se llev¨® a cabo "en todo caso aprovech¨¢ndose los autores de su car¨¢cter vulnerable lo que unido a la previa ingesta de bebidas alcoh¨®licas y ansiol¨ªticos, posiblemente pudo debilitar su capacidad de defensa, haciendo ya por ello innecesario acudir a actuaciones violentas o intimidativas".
Especialmente intimidante
"La v¨ªctima reconoci¨® que no la amenazaron con causarle mal alguno, ni describi¨® cual fue la intimidaci¨®n que ejercieron los acusados a fin de doblegar su voluntad", insiste la sentencia, que considera que "por si solo, la mera presencia en el lugar de los dos procesados sin m¨¢s datos, m¨¢xime teniendo en cuenta que Johnny ni tan siquiera estaba presente cuando se inici¨® el contacto sexual por parte de Marco Antonio, percat¨¢ndose posteriormente la v¨ªctima de la presencia de aquel en el lugar, y tampoco el contexto", dice la sala, "era especialmente intimidante".?
"En definitiva, la v¨ªctima se encontr¨® sin recursos para reaccionar de otro modo, quedando pr¨¢cticamente paralizada, sin gritar ni resistirse, m¨¢s all¨¢, eso s¨ª, de seguir manifestando su negativa a lo que estaba siendo objeto, lo que hizo innecesario, repetimos, el empleo de la violencia o intimidaci¨®n para doblegar su voluntad¡±, concluye el tribunal, que tampoco aplica un delito continuado, sino que considera que cada violaci¨®n se cometi¨® por separado.
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