Un documento interno del PSOE propone penalizar a las agencias de vientres de alquiler
Un grupo de expertos reclama vetar el registro de beb¨¦s nacidos en otros pa¨ªses y compara la pr¨¢ctica con la venta de ¨®rganos
Recurrir a un vientre de alquiler est¨¢ prohibido en Espa?a, pero ocurre porque hay familias que se desplazan a pa¨ªses como Ucrania, Estados Unidos, Canad¨¢ o Rusia ¡ªprevio pago de decenas de miles de euros y con la ayuda de agencias intermediarias¡ª donde s¨ª es legal acceder a la tambi¨¦n llamada gestaci¨®n subrogada o por sustituci¨®n por la que una mujer gesta un hijo y cede su maternidad y paternidad a otras personas. Son cerca de un millar de familias espa?olas las que acuden cada a?o a esta pr¨¢ctica. Despu¨¦s inscriben a los beb¨¦s en los consulados y embajadas en virtud de una instrucci¨®n de 2010 para no dejar desamparados a los menores y que se ha convertido en la puerta de acceso. Un documento interno del PSOE ofrece f¨®rmulas para intentar atajar esta pr¨¢ctica en Espa?a con castigos a los intermediarios y con restricciones a ese registro de los beb¨¦s. El Gobierno espa?ol, contrario a los vientres de alquiler, no tiene la regulaci¨®n entre sus planes a corto plazo, seg¨²n una portavoz de Vicepresidencia.
Espa?a forma parte del grupo de pa¨ªses m¨¢s restrictivos con esta pr¨¢ctica junto con Alemania, Francia, Austria o Italia, entre otros. Junto a ellos hay otros en los que se permite y en los que se practica con demandantes internacionales. La dificultad es poner l¨ªmites a una pr¨¢ctica para la que no existe un marco legal com¨²n internacional y que, a diferencia de otras, termina con un menor a las puertas de un consulado por el que hay que velar. Esa es la v¨ªa de entrada en Espa?a, donde se permite inscribir a los beb¨¦s que sean hijos biol¨®gicos de alguno de los progenitores espa?oles tras la aprobaci¨®n de una resoluci¨®n de la Direcci¨®n General del Registro y del Notariado en 2009.
El informe sobre los dilemas ¨¦ticos y jur¨ªdicos de la gestaci¨®n por sustituci¨®n, elaborado a petici¨®n del Consejo Asesor de Pol¨ªticas de Igualdad del PSOE, propone dejar sin efecto la citada resoluci¨®n, tras un periodo transitorio de adaptaci¨®n cuya duraci¨®n no fija. El documento, de 16 p¨¢ginas y presentado en el organismo asesor del PSOE a mediados de noviembre, contempla sancionar a las agencias espa?olas que ponen en contacto a las familias con las madres gestantes. Compara los vientres de alquiler con la venta de ¨®rganos o la trata de personas. Y prev¨¦ penalizar a quienes acuden a estas pr¨¢cticas ¡°que podr¨ªan incurrir en un delito similar al de tr¨¢fico de menores¡±.
Ciudadanos. A favor. Presentaron en 2017 una propuesta de ley para legalizar los vientres de alquiler como pr¨¢ctica "altruista".
PSOE. En contra. Fijaron postura en 2017 tras un pulso entre feministas contra sectores de Juventudes Socialistas y LGTBIQ.
Podemos. En contra. Aplicarlo "introducir¨ªa un elemento m¨¢s de opresi¨®n sobre las mujeres", dijeron en febrero, tras meses de debate interno.
PP. En contra. Rechazan "la mercantilizaci¨®n de la maternidad", dijeron cuando Ciudadanos hizo su propuesta.
Ni el Gobierno ni el PSOE aclaran cu¨¢l ser¨¢ el destino de este informe. ¡°Los vientres de alquiler son la utilizaci¨®n del cuerpo de las mujeres m¨¢s pobres¡±, asegur¨® nada m¨¢s llegar al Gobierno en junio Carmen Calvo, vicepresidenta y ministra de Igualdad. En noviembre, Calvo recibi¨® el trabajo del grupo de expertos en Ferraz, donde tambi¨¦n ejerce como secretaria de Igualdad del PSOE. El documento est¨¢ firmado, entre otros, por el jurista especializado en Igualdad, Octavio Salazar, la experta universitaria en violencia de g¨¦nero ?ngela Escribano, la abogada feminista Altamira Gonzalo (que preside el consejo asesor de Igualdad del PSOE) o la fiscala especializada en violencia de g¨¦nero Susana Gisbert. Carmen Calvo ha declinado pronunciarse sobre el contenido de ese trabajo ni como integrante del Gobierno ni tampoco desde su puesto como principal responsable de igualdad de su partido.
La mayor¨ªa de las personas que hacen uso en Espa?a de los vientres de alquiler acuden a Ucrania, donde ronda los 40.000 euros, o a Estados Unidos, con tarifas que superan los 100.000. La propuesta del documento interno del PSOE subraya la necesidad de una regulaci¨®n internacional o, al menos, un pronunciamiento ¡°urgente¡± en el seno de la UE en el que ya han reparado otros expertos.
La brecha internacional
Los postulados del trabajo se asemejan a las recomendaciones que hizo en 2017 el Comit¨¦ de Bio¨¦tica de Espa?a. Seg¨²n su presidente, Federico de Montalvo, ¡°o se trabaja a nivel internacional o ser¨¢ muy dif¨ªcil abordar este asunto¡±. De Montalvo forma parte tambi¨¦n del grupo de expertos de m¨¢s de treintena de pa¨ªses que integran el International Bioethics Committee de la UNESCO, ¨²nico Comit¨¦ de Bio¨¦tica a nivel global y que est¨¢ elaborando un informe, previsto para julio, sobre el impacto de la reproducci¨®n humana asistida en la maternidad y paternidad y en el que se espera poder alcanzar un posicionamiento com¨²n sobre los vientres de alquiler. No ser¨¢ vinculante, pero s¨ª una gu¨ªa para la actuaci¨®n internacional. Sin ese marco, a?ade el tambi¨¦n profesor de Derecho de ICADE, ¡°el conflicto seguir¨¢ existiendo¡±.
¡°No se va a poder solucionar desde la perspectiva de un solo pa¨ªs¡±, ahonda Cristina Gonz¨¢lez Beilfuss, integrante del grupo de expertos que, desde 2015, debate en la Conferencia de la Haya para elaborar tambi¨¦n un posible tratado internacional sobre gestaci¨®n subrogada. ¡°Aunque lo intentes frenar en Espa?a, habr¨¢ gente que consiga abogados o agencias por Internet. El problema es que una vez que el ni?o ha nacido, hay que hacer algo con ¨¦l y no se le puede discriminar por su origen. Pero si la situaci¨®n queda como est¨¢ hasta ahora, se deja la posibilidad de caer en manos de intermediarios sin escr¨²pulos¡±.
Vicente Bellver, catedr¨¢tico de Filosof¨ªa del Derecho y vocal del Comit¨¦ de Bio¨¦tica de Espa?a, es el m¨¢s optimista de los expertos consultados con la propuesta del PSOE: ¡°Aplaudo la iniciativa por completo¡±. Propone aplicar ¡°con vigor¡± la normativa actual. ¡°Si adem¨¢s se deroga la instrucci¨®n y lanzamos a las agencias mediadoras el mensaje claro de que esa actividad no es conforme a derecho, las posibilidades de que esos contratos se sigan llevando a cabo se reducir¨¢n exponencialmente¡±, considera Bellver. ¡°Esas agencias son despachos de abogados que buscan actividades lucrativas dentro de la ley. Van a ser los primeros que no se arriesguen a un contrato si no hay una instrucci¨®n que vaya a ampararles¡±.
Favorecer un acceso ¡°menos complejo¡± a la adopci¨®n
El informe del consejo Asesor de Pol¨ªticas de Igualdad del PSOE incluye entre las propuestas para frenar la proliferaci¨®n de los beb¨¦s gestados por vientres de alquiler en Espa?a que se facilite la adopci¨®n ¡°generosa y altruista¡±. Para ello, reclaman simplificar los requisitos que afrontan los aspirantes, acortar los procedimientos y favorecer convenios bilaterales con Estados que permitan un acceso ¡°menos complejo¡± para quienes no pueden ser madres o padres de forma natural.
"Es importante analizar con cautela el impacto que ha tenido la gestaci¨®n subrogada en la adopci¨®n", se?ala el presidente del Comit¨¦ de Bio¨¦tica de Espa?a, Federico de Montalvo, que asegura que ha habido una reducci¨®n muy significativa de ni?os adoptados en la ¨²ltima d¨¦cada, y aunque ello no es atribuible exclusivamente a la proliferaci¨®n de esta t¨¦cnica, tampoco debe descartarse que no haya tenido un impacto directo, como sugieren ya algunos autores internacionales.
El documento interno del PSOE tambi¨¦n analiza los vientres de alquiler desde una perspectiva feminista. Alude a un manifiesto firmado por el colectivo No somos vasijas que contempla que el deseo de ser padres o madres ¡°no implica ning¨²n derecho a tener hijos¡±. Y propone una adenda al Convenio del Consejo de Europa sobre prevenci¨®n y lucha contra la violencia contra las mujeres y la violencia dom¨¦stica (el llamado Convenio de Estambul, ratificado por Espa?a en 2014) para que se incluyan los vientres de alquiler como una forma m¨¢s de violencia contra las mujeres.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.