Los desabastecimientos de f¨¢rmacos subieron un 45% el a?o pasado
Sanidad propone pedir a los fabricantes problem¨¢ticos planes de actuaci¨®n para asegurar el suministro
La probabilidad de que un paciente vaya a una farmacia (de calle o a la hospitalaria) y no tengan el medicamento que necesita va en aumento. En concreto, las notificaciones de problemas de abastecimiento a la Agencia Espa?ola del Medicamento y Productos Sanitarios entre 2017 y 2018 subieron un 44,8%. Para intentar reducir estas situaciones, representantes de la agencia, las comunidades y las empresas implicadas se han reunido hoy para empezar a preparar un plan de actuaci¨®n. Entre las medidas propuestas est¨¢n que las empresas que tengan problemas graves por su impacto o por su frecuencia presenten planes espec¨ªficos que garanticen el suministro. Tambi¨¦n establecer una lista de medicamentos que se vigilar¨¢n especialmente, y aumentar las sanciones por incumplimiento.
Pese al aumento de las notificaciones, y dadas las cifras totales de medicamentos que se utilizan en Espa?a, el Ministerio de Sanidad, del que depende la agencia, tranquiliza: "Actualmente, de las 31.495 presentaciones de medicamentos autorizadas en Espa?a, 488 registran problemas de suministro.? Al eliminar los medicamentos presentados en varias dosis y los sartanes [como el Valsart¨¢n] retirados del mercado, la cifra de medicamentos afectados se reduce a 274" de un total de 14.182 que registra actualmente la web de la agencia. "No existe riesgo de que una enfermedad que requiera tratamiento terap¨¦utico quede sin tratar", sanciona el ministerio. Eso s¨ª, el problema va en aumento: en 2008 hubo 20 notificaciones; en 2013, 576; el a?o pasado, 1.332. El crecimiento es tan importante que la agencia empez¨® el a?o pasado a publicar informes semestrales sobre la situaci¨®n.
La situaci¨®n, como es l¨®gico en un mundo tan interconectado, es similar a la de otros pa¨ªses. "En el Reino Unido en los ¨²ltimos cinco a?os ha habido un incremento en las notificaciones del 130%, y en Francia en 2017 las notificaciones de problemas de suministro, de medicamentos considerados cr¨ªticos, se incrementaron en un 30% respecto al a?o anterior", dice el ministerio.
Ese informe da varias pistas sobre las causas del aumento. Una muy importante y espec¨ªfica del a?o pasado, los problemas que ha habido con el Valsart¨¢n, un medicamento para bajar la tensi¨®n arterial del que hubo varios anuncios de retirada de lotes porque conten¨ªan un contaminante potencialmente cancer¨ªgeno. Si se retira este producto, que representaba el 60% de las notificaciones del segundo semestre, la variaci¨®n entre 2017 y 2018 se queda en el -11%. ?
Las tres principales causas de los desabastecimientos son los problemas de fabricaci¨®n, como que se estropee una m¨¢quina o haya que pararlas por mantenimiento, el 26%; problemas de capacidad porque aumenta la demanda, el 23%;? y problemas de calidad (el 19%). Solo en un 1% se deben a que ha dejado de fabricarse el producto.
Entre los productos que faltan en estos momentos, seg¨²n Sanidad, hay presentaciones de Isopto Flucon (un colirio), Trankimazin (para la ansiedad), Betadine, Aspirina, Clexane y Gardasil, entre otros. Afectan a todo tipo de laboratorios, grandes y peque?os, innovadores y de gen¨¦ricos (Sanofi, Bayer, Mylan, Novartis, MSD...).
Farmaindustria, la patronal de los laboratorios innovadores, apunta, en una nota emitida tras la reuni¨®n, a otras causas econ¨®micas. Afirman que como los precios de los f¨¢rmacos en Espa?a es de los m¨¢s bajos de Europa y, adem¨¢s, est¨¢ muy controlado y en continua presi¨®n por la entrada de los precios de referencia, puede suceder que ante un aumento global de la demanda, el fabricante u otros intermediarios decidan enviar la producci¨®n a pa¨ªses donde lo van a vender por m¨¢s precio. O que, directamente, haya quien compre medicamentos que estaban previstos para ser vendidos en Espa?a y los destine a otros mercados en los que les va a sacar m¨¢s beneficio (lo que se denominan exportaciones paralelas).
Estas medidas son las que han conseguido, por ejemplo, que en 2008 el coste medio para las Administraciones de cada receta atendida en una farmacia fuera de 13,37 euros, y que en 2018 fuera de 11,44 euros.
Ante este conjunto de situaciones, el borrador que ha presentado hoy Sanidad a las comunidades y que est¨¢ sujeto a sugerencias y cambios, se centra en tres aspectos: la prevenci¨®n, gesti¨®n y la informaci¨®n sobre los problemas de suministro. Entre las medidas propuestas est¨¢ "requerir planes de prevenci¨®n a los titulares de la autorizaci¨®n de comercializaci¨®n (TAC) que hayan generado problemas de suministro de medicamentos cr¨ªticos (calidad) o bien a aquellos que comunican muchos problemas (cantidad)"; es decir, pedir a los agentes con antecedentes que aseguren que estos no se van a repetir y que han puesto las medidas para ello. Como se ve, el ministerio no habla de fabricantes o distribuidores, sino que usa un gen¨¦rico TAC para incluir a todos los que participan en la cadena comercial.
Adem¨¢s, prev¨¦ elaborar un listado de medicamentos prioritarios (pone como ejemplo la lista de f¨¢rmacos esenciales de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud) y elevar las posibles sanciones por el impacto en la salud de la falta de abastecimiento de leves (castigadas con 30.000 euros como m¨¢ximo) a graves (hasta los 90.000).
Una vez ocurra el fallo del suministro, se plantean, entre otras posibilidades, la "mejora de las actuaciones para conseguir las alternativas terap¨¦uticas". Es decir, ser m¨¢s eficaz y flexible para que si falta un producto se pueda disponer de otro que tenga el mismo efecto o lo m¨¢s parecido posible en el menor plazo de tiempo. Y, dentro de ello, "revisar el procedimiento de solicitud y de autorizaci¨®n de un medicamento extranjero", por si la alternativa no est¨¢ disponible de manera habitual en Espa?a y hay que importarla.
Otra de las grandes l¨ªneas de actuaci¨®n es mejorar la comunicaci¨®n de los casos y las soluciones a la Administraci¨®n por parte de quienes antes notan el desabastecimiento (distribuidores y farmac¨¦uticos, sobre todo), y desde la Administraci¨®n a los agentes sanitarios implicados y a la poblaci¨®n afectada, para que sepan lo que sucede y c¨®mo sortear el riesgo de quedarse sin su tratamiento.
Por ¨²ltimo, el ministerio avisa del riesgo de que el Brexit impacte en el suministro.
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