Viaje a los Balcanes, uno de los lugares m¨¢s contaminados de Europa
La ONU ha estudiado 18 ciudades de la zona y todas menos una superan los l¨ªmites de la OMS en part¨ªculas en suspensi¨®n, las m¨¢s peligrosas para la salud
Los Balcanes occidentales (Bosnia Herzegovina, Albania, Macedonia del Norte, Montenegro, Serbia y Kosovo) respiran uno de los aires m¨¢s contaminados de Europa. La ONU ha estudiado la contaminaci¨®n del aire en 18 ciudades distribuidas por estas regiones y ha concluido en un estudio presentado este lunes que todas, menos Vl?re, en Albania, exceden los l¨ªmites en las part¨ªculas en suspensi¨®n (holl¨ªn, polvo, ceniza y sustancias similares) marcados por la OMS y aproximadamente el 75% incumple tambi¨¦n la normativa europea, m¨¢s permisiva. Estas part¨ªculas (PM) "afectan a la salud m¨¢s que cualquier otro contaminante del aire", sostiene el informe. Las diminutas fracciones son capaces de penetrar en los pulmones e incluso llegar al torrente sangu¨ªneo y est¨¢n detr¨¢s de numerosas enfermedades respiratorias, problemas cardiovasculares, y c¨¢nceres de pulm¨®n.
Son pa¨ªses v¨ªctima de la "pobreza energ¨¦tica", que producen la energ¨ªa en 15 centrales t¨¦rmicas obsoletas que queman lignito, el tipo de carb¨®n m¨¢s sucio, de baja capacidad calor¨ªfica y muy contaminante por sus emisiones de CO2. La segunda fuente de poluci¨®n son los hogares, ¡°m¨¢s del 60% de la poblaci¨®n¡±?utiliza combustibles f¨®siles (carb¨®n y le?a) en las calefacciones dom¨¦sticas y algunos tambi¨¦n para cocinar, seg¨²n refleja el informe de la ONU. El transporte, la agricultura o la quema irregular de basura completan la lista de emisores. La organizaci¨®n concluye que la poluci¨®n provoca entre un 15% y un 19% de las muertes prematuras en las 18 ciudades investigadas, alrededor de 5.000 personas al a?o. Adem¨¢s, reduce la esperanza de vida entre 1,1 y 1,3 a?os.
Sarajevo, la capital de Bosnia Herzegovina, es una de las ciudades de la regi¨®n con el aire m¨¢s contaminado. Durante los meses de invierno, una espesa niebla se engancha como si fuera una garrapata a sus edificios y calles. El fen¨®meno puede llegar a durar entre 15 y 20 d¨ªas. El blanco manto, aunque de aspecto inofensivo, contiene sobre todo part¨ªculas PM que proceden en esta ciudad de las calefacciones y cocinas alimentadas con carb¨®n y le?a de hogares y edificios p¨²blicos, adem¨¢s del parque de veh¨ªculos, en su mayor parte di¨¦sel.
Los ni?os del colegio de Primaria Isak Samokovlijad, en Sarajevo, un centro que imparte una actividad extraescolar sobre el medioambiente, explicaron el viernes c¨®mo viven en la ciudad en invierno. ¡°Yo odio cuando est¨¢ tan sucio y no se puede jugar fuera", afirm¨® Sarah, una resuelta ni?a de ocho a?os. Desde su asiento del sal¨®n de actos levanta impaciente la mano: ¡°No creo que los mayores piensen en c¨®mo arreglarlo, pero los ni?os pueden cambiar el mundo, pueden hacerlo¡±, recalc¨®.
La ubicaci¨®n geogr¨¢fica de Sarajevo, en un valle, rodeada de verdes colinas, contribuye a que los contaminantes no se dispersen. La urbe, de 400.000 habitantes, entra as¨ª en invierno en un c¨ªrculo contaminante que machaca, a?o tras a?o, los l¨ªmites de sustancias nocivas marcados por la OMS y por la Uni¨®n Europea. En 2018, Sarajevo super¨® durante 146 d¨ªas el tope diario de PM marcado por Europa, que solo permite sobrepasarlo 35 d¨ªas. Bosnia-Herzegovina ha traspuesto la directiva comunitaria sobre contaminaci¨®n del aire, pero al no formar parte de la Uni¨®n Europea, no es de obligado cumplimiento.
Emina es compa?era de Sarah, tiene 10 a?os y relata c¨®mo afrontan esos d¨ªas ¡°en casa, sin salir a la calle a jugar¡±. Con alta contaminaci¨®n, los telediarios se llenan de advertencias. ¡°Dicen que usemos mascarillas o pa?uelos para taparnos la boca, pero no lo hacemos mucho¡±, se r¨ªen Esma y Asja, otras dos estudiantes del colegio. Las tres viven en el centro de la ciudad. En sus casas se utilizan estufas de le?a como calefacci¨®n. Las cocinas, en cambio, son el¨¦ctricas. Con picos altos de contaminaci¨®n, las clases se han llegado a suspender. ¡°Este invierno nos hemos librado¡±, apunt¨® la profesora.
Anes Podic, presidente de la organizaci¨®n Eco Action, culpa a la legislaci¨®n del pa¨ªs y a los pol¨ªticos de la situaci¨®n medioambiental. ¡°Tanto las estufas de las casas como las instalaciones de biomasa est¨¢n obsoletas y se quema madera que no est¨¢ seca y que duplica las emisiones de part¨ªculas¡±, explic¨® en una entrevista en su oficina de Sarajevo. Se comercializa as¨ª porque no existe ninguna normativa para evitarlo y la poblaci¨®n no cuenta con un lugar de almacenamiento en pisos peque?os. ¡°Las personas empiezan a estar m¨¢s concienciadas desde que se miden los niveles y hay alertas, pero si los gobernantes no hacen nada, la contaminaci¨®n continuar¨¢ imparable¡±, a?adi¨®. Los datos de la ONU corroboran que los equipos de biomasa son ineficientes por estar obsoletos y usar madera mojada.
La falta de doctores especialistas en las enfermedades propias de la contaminaci¨®n y la escasez de investigaci¨®n en el ¨¢rea complican la situaci¨®n. El ministro del cant¨®n de Sarajevo para el Medio Ambiente, D¨¢mir Filipovic reconoci¨® el viernes pasado a EL PA?S que, de momento, no existen estudios de c¨®mo est¨¢ afectando la contaminaci¨®n a la salud de la poblaci¨®n, aunque los est¨¢n elaborando. ¡°Estamos en ello, los estamos elaborando¡±, asegur¨® Filipovic.
El informe de la ONU reconoce que la transici¨®n a sistemas de calefacci¨®n m¨¢s sostenibles ¡°lleva tiempo¡±. M¨¢s en pa¨ªses como los que conforman el ¨¢rea estudiada donde aproximadamente el 88% de los 7,3 millones de edificios usan sistemas de calefacci¨®n descentralizados como estufas y calderas propias. Solo el 12% est¨¢n conectados a sistemas generales de calefacci¨®n como el gas. Los autores del estudio consideran que se puede conseguir disminuir la poluci¨®n promoviendo las fuentes de energ¨ªa renovables. Pero, para ello los Gobiernos necesitan ayuda, porque deben monitorizar mejor su aire, introducir veh¨ªculos el¨¦ctricos e implementar prohibiciones para los m¨¢s contaminantes.? Las empresas tambi¨¦n tienen que apoyar esta lucha con innovaciones tecnol¨®gicas y reduciendo sus propias emisiones.
¡°Es una cuesti¨®n econ¨®mica, se necesita una gran inversi¨®n¡±, se?al¨® el ministro del cant¨®n de Sarajevo. Este a?o tienen previsto cambiar el sistema de calefacci¨®n en 40 edificios p¨²blicos y en 100 privados, y dentro de sus prioridades se encuentra reemplazar el actual transporte p¨²blico por uno m¨¢s eficiente. Mientras llegan esos momentos, en el colegio de Primaria Isak Samokovlijad contin¨²an su lucha personal contra las part¨ªculas, que incluye cambiar, cuando se pueda, su caldera alimentada con combustible contaminante. De momento, el buen tiempo da un respiro. Con las calefacciones apagadas, las vistas a las verdes colinas que rodean la ciudad salpicadas de peque?as casas se han despejado.
El camino menos t¨®xico en una app
"Ya podemos respirar", bromea Andrew Grieve, miembro del equipo de An¨¢lisis de la Calidad del Aire de la universidad King's College de Londres, que ha desarrollado una app para localizar el camino menos contaminado en Sarajevo. Grieve muestra la pantalla de su m¨®vil, en la que aparece el mapa de la ciudad con una ruta hacia el centro de la ciudad marcada en verde, la de menor poluci¨®n.? Tambi¨¦n se observa el camino m¨¢s contaminado, este en rojo.? "No se trata de realizar el trayecto en m¨¢s? tiempo, sino de localizar recorridos similares pero m¨¢s saludables en el momento en el que se consulta la app", explica.
La aplicaci¨®n, que tambi¨¦n est¨¢ en marcha en Londres, utiliza los datos de las estaciones de medici¨®n de la ciudad y los superpone hasta dar con la mejor opci¨®n. "La informaci¨®n que se recoge en los puntos son la realidad de lo que est¨¢ pasando en el aire en cada momento", explic¨® Grieve en la presentaci¨®n de la app en Sarajevo el pasado viernes.
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