Fracasa en Uruguay la embestida evang¨¦lica contra la ley trans
El prerefer¨¦ndum que deb¨ªa conducir a la derogaci¨®n de la norma no supera el 10% de los votos, 15 puntos menos de lo requerido
El prerefer¨¦ndum que deb¨ªa conducir a la derogaci¨®n de la ley de derechos trans en Uruguay se sald¨® con un rotundo fracaso. La iniciativa apenas lleg¨® al 10% del padr¨®n electoral, lejos del 25% necesario para que consulta sea aceptada. Nueve de cada diez uruguayos opt¨® por quedarse en casa, mostrando la limitada capacidad de movilizaci¨®n de las iglesias evang¨¦licas y los sectores conservadores, que han convertido este texto legal ¡ªaprobado en octubre pasado¡ª en su principal caballo de batalla.
La votaci¨®n del domingo dej¨® tambi¨¦n una lectura territorial importante: solo en el departamento de Rivera, fronterizo con Brasil, se alcanz¨® el 25% de los votos, lo que pone de relieve la creciente influencia de las iglesias pentecostales venidas del pa¨ªs vecino. En el muy conservador departamento de Salto (norte), la votaci¨®n fue tambi¨¦n superior a la media ¡ªcon un 16%¡ª seg¨²n las primeras cifras.
M¨¢s de 2,6 millones de personas estaban llamadas a las urnas en 3.676 circuitos oficiales. Pero, seg¨²n datos primarios de la Corte Electoral, ¨²nicamente vot¨® el 9,90% del padr¨®n, casi 270.000 personas.
La Iglesia cat¨®lica uruguaya, las organizaciones sociales y la mayor¨ªa de los partidos pol¨ªticos se hab¨ªan desmarcado de la propuesta de refer¨¦ndum, surgida desde las filas del Partido Nacional (PN, derecha), ya que dos de sus miembros, el diputado Alvaro Dastungue (ligado a la iglesia Misi¨®n y Vida) y el exdiputado Carlos Iafigliola eran los principales organizadores. Pero el candidato presidencial del PN, Luis Lacalle Pou, se hab¨ªa alejado de la iniciativa y el domingo ni siquiera acudi¨® a votar.
El ¨²nico pol¨ªtico destacado que s¨ª particip¨® fue el militar Guido Manini R¨ªos, excomandante en jefe del Ej¨¦rcito y hoy candidato. Manini R¨ªos expres¨® que su partido, llamado Cabildo Abierto, ¡°no est¨¢ de acuerdo con la ideolog¨ªa de g¨¦nero que a toda costa se quiere imponer a nuestra sociedad¡±.
Una minor¨ªa vulnerable
La Ley Integral para Personas Trans reconoce y atribuye beneficios a un colectivo de unas 1.000 personas en Uruguay, seg¨²n el censo oficial, que forman uno de los grupos m¨¢s vulnerables en el pa¨ªs sudamericano. Se les facilita el acceso a los servicios m¨¦dicos, se les reserva un 1% de los empleos p¨²blicos y se le atribuye una pensi¨®n mensual de unos 350 d¨®lares a un grupo de unas 60 personas que sufrieron torturas y c¨¢rcel injustificada durante la dictadura militar (1973-1985).
El cap¨ªtulo m¨¢s pol¨¦mico de la normativa, que sali¨® adelante gracias a los votos del gobernante Frente Amplio (FA, izquierda), tiene que ver con la hormonizaci¨®n de los menores de edad: la ley incluye el concepto de ¡°autonom¨ªa progresiva¡± de los adolescentes a la hora de decidir sobre su sexo, lo cual, potencialmente, podr¨ªa permitir que recibieran tratamientos hormonales previo autorizaci¨®n judicial, pero sin consentimiento de sus padres.
La Iglesia y la oposici¨®n conservadora rechazaron esa parte del texto, pero se mostraron favorables a darle protecci¨®n al colectivo. Con una esperanza de vida que ronda los 35 a?os, cuando la media nacional es de 77, los trans (travestis, transexuales y transg¨¦nero) de Uruguay registran los perores indicadores de marginalidad en t¨¦rminos de salud, educaci¨®n y empleo. La cuarta parte de ellos abandon¨® su domicilio antes de cumplir la mayor¨ªa de edad, tras haber sido rechazado por su familia. El 87% no termin¨® estudios secundarios y sufri¨® discriminaci¨®n en el ¨¢mbito educativo y el 67% tuvo que prostituirse para generar un ingreso, seg¨²n cifras de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de la Rep¨²blica.
Los organizadores del refer¨¦ndum consideran que la ley establece una ¡°visi¨®n ideol¨®gica de la sexualidad¡±, ya que en su texto afirma que ¡°se nos asigna un sexo al nacer como si fuera una cuesti¨®n convencional cuando todos sabemos que es una cuesti¨®n de biolog¨ªa de naturaleza humana¡±. Por otro lado, se critican las medidas de discriminaci¨®n positiva como injustas para el resto de las poblaciones vulnerables del pa¨ªs.
A pesar del mal resultado, Iafigliola ha asegurado que la convocatoria fue un ¨¦xito porque puso el tema en el debate p¨²blico. Sus partidarios aseguran que seguir¨¢n buscando la derogaci¨®n por v¨ªa parlamentaria.
La legislaci¨®n uruguaya habilita un mecanismo de refer¨¦ndum por el cual la ciudadan¨ªa puede expresarse sobre una ley. Este camino, exigente en t¨¦rminos de etapas y de alcance de participaci¨®n, fue clave para el retorno de la democracia en 1985 y ha marcado la agenda pol¨ªtica. As¨ª, una masiva participaci¨®n fren¨® una ley de privatizaci¨®n de empresas p¨²blicas en 1992 o concedi¨® el monopolio de la gesti¨®n del agua al Estado en 2004. Tambi¨¦n fracas¨® la derogaci¨®n de la ley de Caducidad que cubri¨® los cr¨ªmenes de la dictadura y la autorizaci¨®n del voto a los extranjeros, entre otros.
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