¡°Contra la violencia machista no hace falta un C¨®digo Penal m¨¢s duro, sino una sociedad que les pone freno¡±

Irene Montero entra en su despacho del Ministerio de Igualdad a paso ligero. Viene desde el Congreso, con su hija peque?a, a la que suele llevar al trabajo, en los brazos y el m¨®vil en la oreja. A los 32 a?os es la ministra m¨¢s joven del Gobierno. Durante la entrevista, este jueves, habla con seguridad y pasi¨®n de lo relacionado con el departamento que dirige, de su vida pol¨ªtica. Y evita responder directamente a preguntas concretas si son sobre un tema del que no quiere avanzar detalles o que no le resulta c¨®modo. Afronta la semana del 8-M con la presentaci¨®n de su principal compromiso desde que lleg¨® al Ejecutivo: la ley de libertades sexuales ir¨¢ previsiblemente el martes al Consejo de Ministros. En la jornada previa han sido asesinadas tres mujeres, dos por sus parejas. El tercer caso est¨¢ en investigaci¨®n.

Pregunta. Tres asesinadas en 24 horas, 1.046 desde que hay datos. ?C¨®mo se acaba con esto?

Respuesta. Debemos actuar con determinaci¨®n en el seguimiento y la detecci¨®n. No puede pasar que todav¨ªa no seamos capaces de evitar esos asesinatos. Ese es el objetivo que tiene que tener un Gobierno feminista.

P. Hay medidas del Pacto de Estado contra la Violencia de G¨¦nero para combatir la alt¨ªsima falta de denuncias. Se aprob¨® hace tres a?os, pero no se aplican.

R. Los plazos para desarrollar el pacto son lo m¨¢s urgentes posibles. De hecho la ley de libertades sexuales viene derivada del convenio de Estambul [pacto europeo sobre la violencia hacia las mujeres] y del pacto de Estado. Para poder hacer frente no solo a la violencia que se da en el ¨¢mbito de la pareja o la expareja, sino a todas las violencias sexuales que a diario sufrimos las mujeres por el hecho de serlo. Antes se dec¨ªa: ¡°Mi marido me pega lo normal¡±. Ahora se dice: ¡°En la calle, yo acoso lo normal¡±.

P. En la oposici¨®n no respaldaron el pacto aduciendo falta de fondos. Ahora son Gobierno, ?cu¨¢nto y cu¨¢ndo los ampliar¨¢n?

R. Fue una abstenci¨®n para decir: queremos m¨¢s. Por supuesto que este Gobierno va a cumplir a rajatabla con ese pacto. A nuestro juicio deber¨ªamos haber llegado m¨¢s lejos. Tenemos que ayudar a que el consenso se mantenga a nivel parlamentario. Ahora mismo est¨¢ puesto en riesgo por un PP que, con la extrema derecha, est¨¢ rompiendo el pacto.

P. No le pregunto por el consenso, sino por los fondos.

R. Es un debate de Presupuestos Generales del Estado, nosotras vamos a trabajar para que tenga recursos suficientes.

P. La ley de libertades sexuales prev¨¦ una revisi¨®n del C¨®digo Penal que rebaja algunas penas.

R. Es importante ver la foto entera de c¨®mo quedan las reformas que proponemos para el C¨®digo Penal. El movimiento feminista siempre ha dicho que no tiene una reivindicaci¨®n punitivista, que la soluci¨®n es la educaci¨®n. Las medidas fundamentales son de reflexi¨®n social, formaci¨®n, prevenci¨®n, sensibilizaci¨®n. Para erradicar las violencias machistas lo fundamental no es un C¨®digo Penal m¨¢s duro, sino una sociedad que pone freno.

P. Hay una parte del feminismo que apoya la teor¨ªa queer que defiende que no se nace mujer, que no es un hecho biol¨®gico sino un constructo. Y otro sector alerta de que el hecho de ser mujer es la base de la desigualdad estructural.

R. El movimiento feminista ha hecho suyas muchas luchas de personas y sectores en una posici¨®n de desigualdad y ha puesto encima de la mesa que sus propuestas pol¨ªticas para transformar la sociedad benefician a todos y a todas. Creo que una mujer trans forma parte del movimiento feminista y que el colectivo LGTBI o las mujeres racializadas luchen por sus derechos no va en contra de la lucha de las mujeres.

P. Quieren revisar el uso del tiempo. ?Cu¨¢les son los horarios de la ministra? ?Concilia?

R. Lo intento. Ser una ministra con dos hijos y una hija debe significar, porque lo personal es pol¨ªtico, que de alguna manera yo ayude a dar ese debate. Hay muchas mujeres que est¨¢n en posiciones de mayor vulnerabilidad y que a lo mejor no tienen esa posibilidad. Es dif¨ªcil, pero tengo mucho apoyo de mi equipo.

P. Acude con su hija menor a actos y la trae al ministerio. ?Qu¨¦ mensaje quiere mandar?

R. He elegido ese modelo de crianza y soy consciente de que es porque he podido. Tambi¨¦n hay mujeres que quisieran hacer eso y no pueden. He hablado de la crianza con much¨ªsimas. Viven ese proceso con mucha culpa, en much¨ªsima soledad y sintiendo que est¨¢n haciendo algo mal. Es algo de lo que este Gobierno se debe ocupar.

P. ?Qu¨¦ medidas puede tomar Igualdad para que otras personas, si quieren, lleven a sus hijos al trabajo?

R. Hay muchas. Subir el salario m¨ªnimo o desmontar la reforma laboral pueden parecer medidas neutras, pero las mujeres nos vamos a beneficiar especialmente de ellas. Este Gobierno tiene que seguir fortaleciendo los permisos iguales de maternidad. Y una opini¨®n personal que no est¨¢ en el acuerdo de Gobierno. Debemos intentar acercarnos a los criterios de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud, ampliando un poco los permisos de lactancia. Recomienda seis meses de lactancia exclusiva. Respeto a cualquier madre, si decide dar pecho o no. Pero tiene que poder decidir.

P. "A esta ministra le gustar¨ªa abolir la prostituci¨®n¡±, ha dicho. ?Por qu¨¦ no lo hace?

R. Hasta ahora, todos los Gobiernos de Espa?a no solamente no han podido dar muchos pasos encaminados a la abolici¨®n de la prostituci¨®n, sino que, a veces, han hecho lo contrario. La tercera locativa, que penalizaba a los proxenetas y a la industria, fue retirada por el PSOE. Lo que quiero decir es que no parece nada sencillo. Para m¨ª es muy importante no ser una ministra que diga muchas veces soy abolicionista, sino respetar a las compa?eras que no lo son y que considero compa?eras feministas con las que puedo caminar. Reforzar todo aquello que nos permita construir una alianza feminista poderosa frente a la extrema derecha y, en concreto, en la cuesti¨®n de la prostituci¨®n. En este pa¨ªs, que es el tercer consumidor mundial de prostituci¨®n, creo que todos los avances que podamos hacer tienen que ir encaminados a la lucha contra la trata con fines de explotaci¨®n sexual. Y luego poner encima de la mesa algo que es lo que casi nunca sale: la industria, que tiene unos v¨ªnculos econ¨®micos muy poderosos y que casi nunca est¨¢ en el centro de los debates.

P. Actuaremos frente a las agencias que ofrecen vientres de alquiler a sabiendas de que est¨¢ prohibido en nuestro pa¨ªs, dice el Acuerdo de Gobierno. ?Qu¨¦ van a hacer?

R. Vamos a actuar pronto porque para nosotros es una prioridad. Igual que no se puede publicitar la venta de ¨®rganos, es evidente que la mercantilizaci¨®n del cuerpo de la mujer es una cosa sobre la que no se puede hacer negocio ni publicidad. Es una actividad que no es legal.

P. Hace un a?o dijo: ¡°La pr¨®xima persona que ocupe la secretar¨ªa general de Podemos ser¨¢ una mujer y ser¨¢ pronto¡±. ?Vistalegre III no era un buen momento?

R. Este es un congreso en el que el debate central que tenemos es c¨®mo Podemos se reorganiza para hacer lo que es ya, una fuerza de Gobierno. Pero no me cabe ninguna duda de que esa frase sigue siendo cierta. La pr¨®xima secretaria general, despu¨¦s del que ahora hay, ser¨¢ una mujer.

P. ?Valor¨® quedarse al frente del grupo parlamentario en lugar de ser ministra?

R. Siempre he estado a lo que ha dicho ya no solo mi formaci¨®n, sino el espacio del cambio [Unidas Podemos]. Es importante respetar esos debates. Yo estoy muy orgullosa de las decisiones que hemos tomado.

P. ?No pierde fuerza el partido como contrapeso al PSOE con todos sus l¨ªderes en el Gobierno?

R. Creo que Unidas Podemos ha sido capaz de ser el espacio pol¨ªtico que m¨¢s caras visibles tiene, hemos sido capaces de conjurar ese riesgo.

P. Coaliciones de izquierdas en otros pa¨ªses europeos acabaron pasando factura electoral al partido en minor¨ªa ?C¨®mo frenar¨¢n esa inercia?

R. Somos muy conscientes de que gobernar tiene riesgos. Es un proceso no exento de contradicciones y m¨¢s cuando gobernamos en minor¨ªa. La base es ser capaz de llegar a acuerdos y ser muy honestas: estos son los acuerdos a los que hemos llegado, estas son las diferencias que siguen existiendo, esto es hasta d¨®nde creemos que podemos llegar.

P. Acaba de comenzar la mesa de di¨¢logo en Catalu?a. ?Qu¨¦ final le gustar¨ªa?

R. Ahora es m¨¢s importante centrarse en el camino. Llevamos diciendo mucho tiempo que este era un conflicto pol¨ªtico que necesitaba de herramientas pol¨ªticas para resolverse. Y estoy muy orgullosa de que este Gobierno haga esto. El final me gustar¨ªa que fuese encontrar un acuerdo, una soluci¨®n.

P. ?Un acuerdo que acaben votando los catalanes?

R. Lo importante es que al final haya un acuerdo.

P. ?Siguen defendiendo que la libertad de los pol¨ªticos presos contribuir¨ªa a rebajar la tensi¨®n en Catalu?a?

R. Creo que en una cosa el Gobierno ha sido un¨¢nime: es importante sentarse a dialogar, todas las cosas se pueden expresar en esa mesa. Como ministra, me debo a lo que este Gobierno vaya comunicando de esa mesa.

P. ?Los gestos en la mesa de di¨¢logo buscan tambi¨¦n allanar el camino de los Presupuestos?

R. Son dos negociaciones y dos procesos diferentes. Hay que ser responsables para entender que son objetivos de suficiente entidad para este pa¨ªs como para que les demos su entidad a cada uno.

P. ?Se est¨¢ hablando de la libertad de los pol¨ªticos presos?

R. En la mesa de di¨¢logo en Catalu?a se est¨¢ hablando de lo que tiene que ver con el di¨¢logo en Catalu?a.

P. Ustedes defend¨ªan esa posici¨®n hace unos meses. ?Lo siguen haciendo?

R. La posici¨®n de Catalu?a la fijamos como Gobierno y la hacemos p¨²blica con total transparencia. No tengo m¨¢s que a?adir.

P. ?Han renunciado a defender el derecho de autodeterminaci¨®n [en el programa del 10-N Podemos defiende un refer¨¦ndum pactado] para consensuar esa posici¨®n com¨²n?

R. No renunciamos a nuestro programa, pero somos capaces de llegar a acuerdos. Uno no renuncia a sus ideas cuando entra en un Gobierno, lo que s¨ª hace es llegar a compromisos y defenderlos. Luego la ciudadan¨ªa juzgar¨¢ si eso que hemos hecho est¨¢ bien.