La Unesco advierte de que el cierre de escuelas por coronavirus puede aumentar las desigualdades sociales

Aunque no siempre funcione bien y a menudo se atasque, la educaci¨®n sigue siendo el principal ascensor social. Pero ha surgido una nueva traba: el coronavirus. Casi 300 millones de estudiantes se han visto ya afectados en 22 pa¨ªses de tres continentes por los cierres de escuelas a causa de la expansi¨®n de la Covid-19. En 13 pa¨ªses, entre ellos China, Corea del Sur o Italia, el cierre es a nivel nacional, lo que implica que actualmente 290,5 millones de escolares se tienen que quedar en casa, seg¨²n la Unesco, que ha realizado el primer recuento global de la situaci¨®n. Otros 180 millones m¨¢s podr¨ªan verse afectados en breve si los nueve pa¨ªses que por ahora solo han decretado el cierre de escuelas en zonas de brotes ampl¨ªan la medida a todo su territorio, aunque pa¨ªses como Francia lo descartan por el momento. En cualquier caso, se trata de una situaci¨®n ¡°sin precedentes¡± por su amplitud, advierte la Organizaci¨®n de la ONU para la Educaci¨®n, la Ciencia y la Cultura (Unesco). Y ello requiere de esfuerzos concertados de todos los Gobiernos para garantizar que el coronavirus no aumente a¨²n m¨¢s la brecha social. El organismo ha puesto a disposici¨®n de los pa¨ªses un listado de plataformas y mecanismos de aprendizaje a distancia para compensar la p¨¦rdida de horario lectivo.

La clave, como todo en esta enfermedad de la que a¨²n se desconocen tantas cosas, es el tiempo en que deber¨¢n permanecer cerradas las escuelas. Unas pocas semanas, como est¨¢ previsto por el momento en la mayor¨ªa de los pa¨ªses salvo China, donde los ni?os llevan ya m¨¢s de un mes sin clase, no tendr¨¢ necesariamente un efecto duradero. Pero ¡°si se alargaran los tiempos, y crucemos los dedos para que no sea as¨ª, habr¨¢ un impacto seguro en el derecho a una educaci¨®n igual e incluyente para todos¡±, dijo este jueves a EL PA?S la directora general adjunta para la Educaci¨®n de la Unesco, la italiana Stefania Giannini.

Los motivos son variados, incluso si el cierre de los colegios es solo ¡°temporal¡±, subraya la Unesco. Para empezar, la reducci¨®n del tiempo de ense?anza influye en el rendimiento escolar. Y, m¨¢s all¨¢ del impacto econ¨®mico en las familias que se ven obligadas a ajustarse a la presencia de los hijos en casa, el cierre de las escuelas lleva tambi¨¦n ¡°desigualdades educacionales¡±, ya que familias con m¨¢s holgura econ¨®mica ¡°tienden a tener niveles m¨¢s altos de educaci¨®n y m¨¢s recursos para compensar¡± la p¨¦rdida de clases, as¨ª como para proporcionar actividades que compensen la falta del colegio.

En cualquier caso, y al igual que en la carrera para contener la pandemia y lograr una cura o vacuna, la rapidez es esencial. ¡°Cuanto m¨¢s r¨¢pido logremos implementar una respuesta adaptada mediante la tecnolog¨ªa y los sistemas de aprendizaje a distancia, mejor ser¨¢n las perspectivas incluso si la situaci¨®n se prolonga¡±, asevera Giannini.

Por ello, la Unesco ha anunciado una reuni¨®n de urgencia ¡ªaunque virtual, en vista de la situaci¨®n¡ª de los ministros de Educaci¨®n el pr¨®ximo 10 de marzo, para ¡°compartir respuestas y estrategias de continuaci¨®n del aprendizaje¡± que ¡°garanticen la inclusi¨®n y la equidad¡±, subraya el organismo con sede en Par¨ªs. Pero ya ha empezado a actuar, proponiendo en su web una lista de herramientas de educaci¨®n a distancia en diversas plataformas e idiomas ¡ªpor ahora aquellos de los pa¨ªses afectados¡ª para ¡°compensar¡± el cierre de clases y, subraya Giannini, no ¡°obligar a contraponer el derecho a la salud con el derecho a la educaci¨®n¡±.