El sarampi¨®n, el otro virus que enciende las alarmas en M¨¦xico
La aparici¨®n de 127 casos alerta a las autoridades sanitarias y a los especialistas, que vaticinan un escenario desastroso en medio de la crisis por el coronavirus
El coronavirus es por estos d¨ªas el protagonista de casi cualquier conversaci¨®n en cualquier lugar. Y M¨¦xico no es la excepci¨®n. Pero mientras el Covid-19 ocupa de lleno el primer plano de las preocupaciones, en el trasfondo se expande silencioso otro virus, el sarampi¨®n, que ha prendido las alertas de las autoridades sanitarias mexicanas. En las ¨²ltimas cinco semanas, el Gobierno ha registrado 127 casos de esta enfermedad que ya estaba casi erradicada en el pa¨ªs. Primero, el brote se concentr¨® en Ciudad de M¨¦xico, despu¨¦s se expandi¨® al Estado de M¨¦xico, la entidad que rodea a la capital. En los ¨²ltimos d¨ªas el recuento incluy¨® un caso en el sure?o Estado de Campeche. La Secretar¨ªa de Salud corre ahora una carrera contra el tiempo con la vacunaci¨®n como ¨²nica arma para evitar que este brote se cruce con la curva del coronavirus, algo que los especialistas vaticinan como desastroso.
La pesadilla sanitaria de Ciudad de M¨¦xico comenz¨® el pasado 28 de febrero. La Secretar¨ªa de Salud federal inform¨® ese d¨ªa que el Covid-19 hab¨ªa llegado al pa¨ªs, de la mano de un residente de la capital que hab¨ªa viajado a Italia. Ese mismo d¨ªa, y sin tanto eco, el personal sanitario de la ciudad anunci¨® que hab¨ªa diagnosticado a una ni?a de ocho a?os de sarampi¨®n. Lo preocupante era que no se trataba de un caso importado, como los pocos registrados en M¨¦xico en los ¨²ltimos 20 a?os, sino que el contagio se hab¨ªa dado de manera local.
Una semana antes, en el reclusorio norte de la capital, uno de los penales m¨¢s importantes de la ciudad con m¨¢s de 5.000 reclusos, entre ellos el abogado del expresidente Enrique Pe?a Nieto, viv¨ªa una jornada de visita. Entre los visitantes ingres¨® un ni?o que acababa de volver al pa¨ªs y que tra¨ªa consigo el sarampi¨®n. Una vez el virus ingres¨® por las puertas de la prisi¨®n, no tard¨® en propagarse. ¡°El reclusorio es un terreno super f¨¦rtil. La trasmisi¨®n en las poblaciones cautivas es muy f¨¢cil porque los espacios son estrechos¡±, explica el infect¨®logo Sarbelio Moreno Espinosa al relatar el episodio que dio origen al brote. ¡°Esto inici¨® con adultos que no estaban vacunados. Mucha de esa gente ha tenido una vida s¨²per dura y puede que nunca haya sido vacunada", agrega.
Los d¨ªas de visita en cualquier penal de M¨¦xico incluyen no solo decenas de familiares haciendo cola durante horas para poder ingresar, sino un despliegue de personal de seguridad y decenas de puestos callejeros que se disponen a vender todo tipo de chucher¨ªas. ¡°Esa es la manera f¨¢cil de contagio¡±, dice Moreno Espinosa, ¡°intercambios entre mucha gente junta¡±. Prueba de eso son los datos, que se?alan que de los primeros 60 casos reportados, 46 se localizaron en la alcald¨ªa Gustavo A. Madero, donde se ubica el reclusorio norte.
La velocidad a la que se propaga esta enfermedad, que es mucho m¨¢s alta que otras, como la Covid-19, fue uno de los problemas que ayud¨® agravar la situaci¨®n, alerta el infect¨®logo Alejandro Mac¨ªas. ¡°Mientras una persona que tiene Covid-19 contagia en promedio a dos o tres personas, una infectada con sarampi¨®n contagia al menos a 10, por eso la tasa de vacunaci¨®n tiene que ser muy alta, para que el sarampi¨®n est¨¦ bajo control", dice quien fue responsable del comisionado nacional para el brote de influenza H1N1, que castig¨® a M¨¦xico en 2009.
La reaparici¨®n del sarampi¨®n ahora, algo que hac¨ªa m¨¢s de dos d¨¦cadas que los trabajadores sanitarios no ve¨ªan en el pa¨ªs, ¡°se?ala que solo el 90% de la poblaci¨®n, o menos, est¨¢ vacunado¡±, alerta Mac¨ªas. Un porcentaje que baj¨® en los ¨²ltimos dos a?os de forma brusca por el desabasto de vacunas originado en el sexenio de Pe?a Nieto. Las cifras que da el infect¨®logo implican que al menos unos 13 millones de personas, un 10% del total de la poblaci¨®n del pa¨ªs, no han recibido la dosis o la han recibido de forma incompleta. ¡°El sarampi¨®n no perdona, cuando caen las tasas de vacunaci¨®n, la presencia de brotes se da inevitablemente¡±.
El recuento de los casos que lleva la Secretar¨ªa de Salud federal muestra que a partir del n¨²mero 60, la propagaci¨®n del virus se aleja del barrio que acoge al penal. Se dispersa por los puntos cardinales de la capital hasta traspasar las fronteras de la ciudad y escampar hasta el Estado de M¨¦xico primero y, por alg¨²n viajero que a¨²n no ha sido rastreado, hasta Campeche despu¨¦s. Algo que pone en jaque a la pol¨ªtica sanitaria hasta ahora planteada por las autoridades mexicanas, que hab¨ªan intentado acotar la responsabilidad a la Secretar¨ªa de Salud de la capital.
Ante la aparici¨®n del brote, las autoridades sanitarias de Ciudad de M¨¦xico se vieron forzadas a armar cercos sanitarios alrededor de la prisi¨®n y de los casos reportados, y lanzar un programa de vacunaci¨®n, la ¨²nica forma de atajar el problema, seg¨²n los especialistas. Vacunaron a los reos y a los custodios y montaron puestos en unos pocos barrios donde se hab¨ªan registrado la mayor¨ªa de los infectados. Unas 26.000 dosis fueron dadas y otras 168.000 fueron repartidas en los centros de salud hasta el 31 de marzo, asegura a este diario un portavoz de la Secretar¨ªa de Salud capitalina. Pero los propios datos oficiales, que se?alan c¨®mo el virus ya se desparram¨® geogr¨¢ficamente, dejan en evidencia que la estrategia de contenci¨®n fue rebasada.
¡°Se est¨¢ vacunando de manera muy precisa a quienes forman parte del grupo de riesgo¡±, defiende Gabriel Soto, infect¨®logo del Instituto Nacional de Cardiolog¨ªa. Para ¨¦l es la ¨²nica forma de contener el virus en un contexto de pandemia mundial. ¡°En este momento no puede vacunar masivamente ni hacer campa?as, porque no puedes sacar la gente a la calle ni enviar gente a vacunar casa por casa, porque los expones a todos al Covid-19¡±.
Moreno Espinosa, quien trabaja adem¨¢s en el Hospital Infantil de M¨¦xico, donde se atendieron tres casos de sarampi¨®n en las ¨²ltimas semanas, asegura que la situaci¨®n ¡°puede ser un desastre¡± si la estrategia de vacunaci¨®n oficial no est¨¢ bien planteada. ¡°Es una carrera contra el tiempo que se entorpece con la contingencia, por un lado estamos diciendo que la gente se quede en casa, y por otro lado, que se vaya a vacunar. Es contradictorio¡±, agrega. El doctor Mac¨ªas va un paso m¨¢s all¨¢ y advierte: ¡°si llegamos a tener al mismo tiempo un brote de sarampi¨®n y de Covid-19 va a ser catastr¨®fico, porque vamos a ver como se saturan los hospitales¡±.
El ¡°coronampi¨®n¡±, jadea Moreno Espinosa, que relata que cuando recibieron el primer caso en el Hospital Infantil de M¨¦xico, tuvieron que juntar a todos los trabajadores y formarlos en sarampi¨®n, para que no lo confundieran con el coronavirus, ya que presentan s¨ªntomas parecidos (fiebre, tos seca, dolor de garganta). ¡°Tuvimos que dar un repaso general porque es todo un acontecimiento que vuelva a haber sarampi¨®n¡±.
Esa informaci¨®n no lleg¨®, sin embargo, al resto de los hospitales de la ciudad. ¡°?Sarampi¨®n?¡±, se burla un trabajador con una precaria mascarilla de pl¨¢stico mientras echa alcohol en gel en las manos de quien se dispone a entrar al Hospital General de M¨¦xico, uno de los centros m¨¦dicos m¨¢s importantes de la ciudad. ¡°Eso no tenemos ac¨¢. Suficiente tenemos con el coronavirus¡±, sentencia.
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