Europa escapa del confinamiento a varias velocidades
Alemania, Austria y Dinamarca lideran la salida de la cuarentena tras m¨¢s de un mes de restricciones
Los analistas llevan a?os explicando las brechas dentro de la Uni¨®n Europea a trav¨¦s de una l¨®gica geogr¨¢fica. Norte-Sur en econom¨ªa. Este-Oeste en inmigraci¨®n. El mapa incorpora estos d¨ªas una nueva divisi¨®n en el sempiterno relato de la Europa a varias velocidades: pa¨ªses confinados y pa¨ªses que empiezan a atisbar algo parecido a la libertad. Austria, Dinamarca, Alemania o Rep¨²blica Checa conforman la avanzadilla de los que suben la persiana para asomarse a la vida p¨²blica. Italia y Espa?a est¨¢n entre los que tendr¨¢n que esperar.
La Gran Recesi¨®n dej¨® una estela de desahucios y miles de familias en la calle. La pandemia alimenta las desigualdades recluyendo al continente entre cuatro paredes. En ese contexto, reanudar la actividad exterior se ha convertido en s¨ªmbolo de victoria frente al virus. Pero el temor a desandar el camino recorrido por un regreso precipitado a lo que se ha dado en llamar como la nueva normalidad hace extremar la cautela. Y las capitales est¨¢n listas para apretar el bot¨®n de rebobinar si la amenaza resurge.
La Comisi¨®n Europea quiere evitar que se repita la ca¨®tica respuesta europea del inicio la crisis, cuando Alemania y Francia impusieron restricciones a las exportaciones de mascarillas, se cerraron fronteras y el equipamiento sanitario circul¨® con dificultad. Bruselas ha dise?ado una hoja de ruta con tres requisitos para iniciar la reapertura: un gran descenso de contagios, recursos sanitarios suficientes y capacidad de vigilar la epidemia con tests y aplicaciones m¨®viles. El enunciado no fija ninguna cifra ni porcentaje como umbral a partir del cual dar el paso, por lo que su redacci¨®n es lo suficientemente ambigua como para que cada pa¨ªs decida por s¨ª mismo cu¨¢ndo est¨¢ preparado para ir a la siguiente fase.
Los ejemplos de los que emprenden el camino a la vida previa a la pandemia crecen cada d¨ªa. Alemania quit¨® el candado este lunes a los negocios de menos de 800 metros cuadrados. En la vecina Austria el calendario es ambicioso. Han reabierto miles de comercios de menos de 400 metros cuadrados, las peluquer¨ªas y centros comerciales lo har¨¢n el 1 de mayo, y caf¨¦s, restaurantes e iglesias, el 15. M¨¢s al norte, en Dinamarca, escuelas y guarder¨ªas volvieron a la actividad hace una semana. Un paso que contrasta con la prudencia de Espa?a, uno de los grandes focos globales de la infecci¨®n, donde el regreso a las aulas podr¨ªa retrasarse hasta septiembre.
El pa¨ªs n¨®rdico no es una excepci¨®n. Holanda y Francia se preparan para un lento reinicio del curso desde el 11 de mayo. Luxemburgo permitir¨¢ a los estudiantes de bachillerato retomarlo el 4 de mayo, una semana despu¨¦s a los de secundaria, y el 25 de mayo, a los de primaria. Las autoridades creen en el retorno progresivo de mayor a menor edad porque son ¡°m¨¢s maduros¡± y respetar¨¢n las normas de separaci¨®n. Para facilitarla, tanto en Luxemburgo como en Holanda cada clase se dividir¨¢ en dos grupos que ir¨¢n altern¨¢ndose. Una semana utilizar¨¢n unos las instalaciones y a la siguiente el resto. Al que no le toque, realizar¨¢ actividades de repaso desde casa. En el Gran Ducado ser¨¢ obligatorio que lleven mascarilla en el transporte p¨²blico, y opcional en clase.
A simple vista, todos estos pa¨ªses cumplen con los requisitos de la Comisi¨®n Europea. El contagio se ha ralentizado, disponen de camas de hospital libres y tienen capacidad para hacer pruebas. Desde la llegada de la epidemia a Europa, la baja letalidad del virus en Alemania ha sido una de las grandes inc¨®gnitas. Y uno de los factores que la explican es su pol¨ªtica de pruebas masivas. Dinamarca quiere imitarla: Copenhague se ha propuesto efectuarlas a todo ciudadano que presente s¨ªntomas. ¡°Es la forma m¨¢s efectiva de detener la propagaci¨®n de la infecci¨®n¡±, estima el ministro de Salud, Magnus Heunicke.
Mientras, la Europa confinada observa atenta los movimientos de sus vecinos. Saben que, si dan resultado, podr¨¢n seguir sus pasos cuando las circunstancias se lo permitan. Las autoridades europeas han insistido en que la coordinaci¨®n no es sin¨®nimo de un abandono sim¨¦trico del encierro, impensable con el virus golpeando de forma heterog¨¦nea, sino m¨¢s bien un espacio de experiencias compartidas a trav¨¦s de las m¨²ltiples reuniones de ministros. Ahora, con el levantamiento gradual de las restricciones, llega otro momento de prueba y error. Y Bruselas no solo teme repuntes de la enfermedad. Tambi¨¦n el modo en que se reabrir¨¢n las fronteras.
Con la temporada de verano a la vuelta de la esquina, los Gobiernos europeos quieren minimizar el brutal impacto de la pandemia en la industria tur¨ªstica, pero preocupa que eso suponga importar del exterior nuevos casos de coronavirus. La f¨®rmula que contempla Austria es dejar entrar solo a viajeros procedentes de lugares donde la covid-19 est¨¦ m¨¢s o menos controlada, como Alemania. Pero los permisos a la carta, con pasaportes de primera y de segunda en un espacio como Schengen, concebido para la libre circulaci¨®n, no gustan en Bruselas. ¡°Los Estados miembros no pueden discriminar por nacionalidad a los ciudadanos europeos¡±, advirti¨® una portavoz este martes.
Decidir qu¨¦ hacer con los cientos de miles de marroqu¨ªes residentes en la UE deseosos de regresar a casa en vacaciones, muchos de ellos atravesando Espa?a en sus veh¨ªculos. O con los millones de europeos expatriados que buscan volver a su pa¨ªs de origen coincidiendo con el descanso estival, puede ser la pr¨®xima patata caliente para los Veintisiete.
Informaci¨®n sobre el coronavirus
- Aqu¨ª puede seguir la ¨²ltima hora sobre la evoluci¨®n de la pandemia
- As¨ª evoluciona la curva del coronavirus en Espa?a y en cada autonom¨ªa
- Preguntas y respuestas sobre el coronavirus
- Gu¨ªa de actuaci¨®n ante la enfermedad
- En caso de tener s¨ªntomas, estos son los tel¨¦fonos que se han habilitado en cada comunidad
- Pinche aqu¨ª para suscribirse a la newsletter diaria sobre la pandemia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.