Radiograf¨ªa de la dependencia: es ¡°urgente¡± una revisi¨®n del sistema
El Consejo Econ¨®mico y Social plasma en un informe las debilidades del modelo, intensificadas con la pandemia, y pide mayor coordinaci¨®n sociosanitaria y mejoras en las prestaciones
Desigualdades territoriales, insuficiente desarrollo de las prestaciones y de los servicios, precariedad laboral, carencias estad¨ªsticas y en las bases de informaci¨®n, dificultades de gobernanza entre los distintos niveles de la Administraci¨®n... Estas son solo algunas de las debilidades del sistema de atenci¨®n a la dependencia que pone de manifiesto el informe que ha presentado este mi¨¦rcoles el Consejo Econ¨®mico y Social de Espa?a (CES), un ¨®rgano consultivo del Gobierno en el que est¨¢n representadas las principales organizaciones sindicales y patronales. La lista sigue: escasa financiaci¨®n y una deficiente coordinaci¨®n sociosanitaria, limitaciones en la intensidad y calidad de las prestaciones, entre otros asuntos. En el documento, el primero en el que el CES eval¨²a el sistema desde la aprobaci¨®n de la ley, en 2006, se apunta que la pandemia ha puesto de manifiesto las carencias en dependencia e insta a que las ¡°dram¨¢ticas consecuencias¡± de esta crisis sanitaria supongan un punto de inflexi¨®n.
¡°El sistema de la dependencia se enfrentaba ya a importantes desaf¨ªos con anterioridad a la pandemia que hac¨ªan urgente un replanteamiento del futuro del modelo de cuidados de larga duraci¨®n¡±, se concluye en el documento, que empez¨® a trabajarse en 2019 y se aprob¨® en diciembre de 2020, y se da a conocer solo unos d¨ªas despu¨¦s de que el Ministerio de Derechos Sociales y las autonom¨ªas aprobaran un plan de choque en dependencia con el compromiso del Gobierno de inyectar 3.600 millones de euros en tres a?os. En 2021 ya hay presupuestado un incremento de la financiaci¨®n de m¨¢s de 600 millones. El acuerdo, que fija la hoja de ruta para reflotar un sistema lastrado por los recortes, obtuvo adem¨¢s el respaldo de la mesa de di¨¢logo social, que re¨²ne a sindicatos y patronales, y va en la l¨ªnea de las propuestas del CES. El organismo considera ¡°urgente¡± la revisi¨®n del sistema y reclama a las autonom¨ªas que tambi¨¦n aumenten la financiaci¨®n.
El vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, que ha participado en el acto, ha afirmado que en los pr¨®ximos tres a?os hay previstas, con los fondos europeos del Plan de Recuperaci¨®n, inversiones que ¡°ascender¨¢n a 3.500 millones de euros¡± entre 2021 y 2023. El objetivo es poner en marcha una ¡°estrategia nacional de desinstitucionalizaci¨®n¡± y reforzar la atenci¨®n centrada en la persona en las residencias. El ministerio ha recalcado en diversas ocasiones su intenci¨®n de cambiar el modelo de cuidados de larga duraci¨®n. Algo en lo que el CES ha hecho hincapi¨¦, al abordar el proceso de envejecimiento y la necesidad de reforzar las prestaciones de car¨¢cter preventivo, ¡°ahora muy residuales¡±, y la intensidad y profesionalizaci¨®n de los apoyos que permitan permanecer en el hogar y retrasar ¡°la institucionalizaci¨®n¡±. Iglesias ha anunciado que ¡°en los pr¨®ximos d¨ªas¡± el ministerio constituir¨¢ un foro consultivo con sindicatos, empresas y organizaciones de la sociedad civil para trabajar en este ¨¢mbito.
El informe del CES constituye una radiograf¨ªa de la dependencia a lo largo de m¨¢s de 200 p¨¢ginas. M¨¢s de 1,1 millones de personas son atendidas gracias a la ley. Siete de cada 10 superan los 65 a?os, seg¨²n el documento, en el que tambi¨¦n se insta a superar la visi¨®n ¡°edadista¡± y a no obviar que hay menores en situaci¨®n de dependencia. En el texto se establece como prioridad la reducci¨®n de las listas de espera, ya que cerca de un 20% de la poblaci¨®n no es atendida pese a tener derecho a ello: a final de 2019 eran cerca de 400.000 personas quienes esperaban por alg¨²n procedimiento (incluyendo a quienes a¨²n no hab¨ªan sido siquiera valoradas).
Diferencias ¡°dif¨ªcilmente justificables¡±
El CES destaca la ¡°complejidad de la gobernanza del sistema de atenci¨®n a la dependencia¡±, que ¡°se ha manifestado en su m¨¢xima expresi¨®n¡± durante la pandemia, donde ¡°las habituales dificultades para alcanzar consensos sobre criterios comunes de gestio?n han entorpecido la inmediatez en la toma de decisiones requerida¡±. En dependencia, las comunidades ostentan las competencias, pero en el funcionamiento del sistema intervienen tambi¨¦n la Administraci¨®n General del Estado y, en menor medida, los Ayuntamientos, estos ¨²ltimos con la prestaci¨®n de ciertos servicios. Hay distintos desarrollos normativos y ¡°unas diferencias territoriales inexplicables o dif¨ªcilmente justificables¡±, en palabras del ponente del informe, Jorge Arag¨®n, que ha destacado que estas inequidades no solo se dan entre autonom¨ªas, ¡°sino entre el ¨¢mbito rural y el urbano¡±.
La coordinaci¨®n sociosanitaria es una de las grandes debilidades: durante la pandemia no ha sido posible suplir ¡°la ausencia de unas estructuras previas¡±, seg¨²n el informe. Y esta falta de coordinaci¨®n intersectorial es uno de los factores que explican ¡°la magnitud de esta crisis¡±.
Respecto a las residencias, uno de los grandes focos de contagio, el CES pide no caer en estigmatizaciones y se?ala que ¡°la gravedad de lo sucedido en su conjunto requerir¨¢ una evaluaci¨®n en profundidad¡±. Apunta, no obstante, que en los primeros diagn¨®sticos confluyen diversos factores, como el desconocimiento inicial sobre el virus, facilidad de contagio en estos establecimientos, elevada vulnerabilidad y, particularmente ¡°la falta de coordinaci¨®n a todos los niveles¡±, especialmente en el sociosanitario, ¡°que contribuy¨® al retraso en la adopci¨®n de las medidas y la indefensi¨®n de los usuarios, que en demasiados casos no pudieron tener una atenci¨®n sanitaria adecuada ni a una muerte digna¡±.
El CES, que apunta ¡°serias dificultades¡± para conocer el gasto real en dependencia en Espa?a, propone un sistema com¨²n de informaci¨®n y llama a mejorar las bases de datos y a articular mecanismos permanentes de evaluaci¨®n de la calidad, eficiencia y equidad. El organismo reclama que se tenga en cuenta la perspectiva de g¨¦nero, dado que el 65% de los beneficiarios de la ley son mujeres y m¨¢s del 85% de los ocupados en el sector tambi¨¦n lo son. E insiste en que ¡°la calidad de las prestaciones del sistema es inseparable de la calidad del empleo¡± y en que esta ¡°deja mucho que desear¡±. Uno de los puntos del plan de choque es precisamente la mejora de las condiciones en el sector.
En el documento se pide adem¨¢s que se analice ¡°el importante impacto en la salud y el deterioro de la autonom¨ªa personal¡± de la soledad no deseada en las personas que permanecen en sus hogares y han dejado de percibir servicios, como por ejemplo, tras el cierre de los centros de d¨ªa. Se solicita que se revisen las incompatibilidades entre prestaciones, un mayor desarrollo de la ayuda a domicilio y la teleasistencia avanzada, y se insiste en que deben primarse los servicios frente a las prestaciones econ¨®micas, que pese a que la ley contemplaba como excepcionales no lo son.
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