La Iglesia francesa vender¨¢ patrimonio para indemnizar a las v¨ªctimas de la violencia sexual
Los obispos de Francia admiten la ¡°responsabilidad institucional¡± y la ¡°dimensi¨®n sist¨¦mica¡± de los abusos tras el informe que revel¨® 330.000 menores agredidos desde 1950
La Iglesia francesa ha decidido, por fin, encarar su responsabilidad en las d¨¦cadas de abusos sexuales a menores a manos de personal religioso y laico dentro de la instituci¨®n. Tras una semana de reuniones en Lourdes, epicentro del catolicismo franc¨¦s, la Conferencia Episcopal acord¨® el lunes la venta de parte de su patrimonio para reparar e indemnizar a las v¨ªctimas, aunque los delitos hayan prescrito.
La decisi¨®n es la respuesta al informe que la propia Iglesia francesa encarg¨® a un equipo dirigido por el alto funcionario Jean-Marc Sauv¨¦ y que, despu¨¦s de dos a?os y medio de investigaciones, se public¨® a principios de octubre. Los obispos franceses reaccionan tras d¨¦cadas de cerrar los ojos ante los cr¨ªmenes, y a?os de resistirse a admitir la responsabilidad y a adoptar medidas dr¨¢sticas.
¡°Hemos entendido que hab¨ªa que llegar hasta el final en el trabajo sobre la verdad que hab¨ªamos iniciado¡±, dijo en una declaraci¨®n p¨²blica el presidente de la Conferencia Episcopal, ?ric de Moulins-Beaufort. ¡°Se cometi¨® un mal, mucho mal se cometi¨®, y debe asumirse¡±.
El informe Sauv¨¦ conclu¨ªa que, entre 1950 y 2020, un m¨ªnimo de 216.000 personas, mayoritariamente hombres, hab¨ªan sido v¨ªctimas de agresiones sexuales cometidas por curas, di¨¢conos, religiosos y religiosas mientras eran menores de edad. La cifra se elevaba a 330.000 si se cuenta al personal laico como docentes en escuelas cat¨®licas o monitores de boy scouts.
El informe citaba, entre los pa¨ªses donde en los ¨²ltimos 15 a?os la Iglesia afront¨® la violencia sexual del clero sobre menores, a Estados Unidos Chile, Australia, Irlanda, Holanda, Alemania, B¨¦lgica y Reino Unido. En Espa?a, los obispos y la mayor¨ªa de las ¨®rdenes religiosas se han resistido a investigar los abusos y han optado por la opacidad.
El informe franc¨¦s, que inclu¨ªa 45 recomendaciones, ha tenido el efecto de un electrochoque entre los cat¨®licos franceses y en la jerarqu¨ªa. La Asamblea plenaria de los obispos en Lourdes ¡ªuna peque?a ciudad en el sur de Francia a la que los creyentes atribuyen una historia de apariciones y milagros¡ª abord¨® el punto esencial y uno de los m¨¢s complejos de poner en pr¨¢ctica: las indemnizaciones de las v¨ªctimas de unos abusos masivos que, en su mayor¨ªa, han prescrito o en los que los agresores han muerto. Y, en una decisi¨®n anticipada el viernes, reconoci¨® sin matices el papel colectivo de la instituci¨®n m¨¢s all¨¢ de la culpa individual de los agresores.
¡°Se ha franqueado una etapa hist¨®rica, hay que reconocerlo¡±, dijo el viernes, en declaraciones recogidas por el diario Lib¨¦ration, Fran?ois Devaux, fundador de una de las asociaciones de v¨ªctimas que ha contribuido en los ¨²ltimos a?os a que la Iglesia asuma su responsabilidad. ¡°Es el inicio de un largo camino, pero todo no est¨¢ resuelto, sobre todo a la hora de restablecer la confianza¡±.
En las ¨²ltimas dos d¨¦cadas, dos obispos, los de Bayeux y Orleans, han sido condenados por encubrimiento. El cardenal Philippe Barbarin, antiguo arzobispo de Lyon, fue absuelto en 2020 tras ser condenado en primera instancia por no denunciar los abusos cometidos por un cura en su di¨®cesis. El caso, relatado en la pel¨ªcula Gracias a dios de Fran?ois Ozon, fue decisivo para concienciar a muchos fieles y a la sociedad en conjunto del problema e impulsar los cambios que ahora empiezan a concretarse.
Los obispos, dice el documento de Lourdes, ¡°han verificado que estaban de acuerdo en reconocer la responsabilidad institucional de la Iglesia en las violencias que tantas v¨ªctimas han sufrido¡± y ¡°en reconocer la dimensi¨®n sist¨¦mica de estas violencias¡±. En este punto, los jerarcas subrayan que las actuaciones de individuos aislados no se explican sin un contexto en el que ¡°los funcionamientos, las mentalidades y las pr¨¢cticas en la Iglesia cat¨®lica han permitido que estos actos se perpet¨²en y han impedido que sean denunciados y sancionados¡±.
Los obispos a?aden que ¡°reconocer esta responsabilidad implica un deber de justicia y de reparaci¨®n que abre la posibilidad de pedir perd¨®n de verdad¡±. Para ello, se compromete a una serie de medidas, de las que destacan dos. La primera es la creaci¨®n de una instituci¨®n independiente que, bajo la presidencia de la jurista Marie Derain de Vaucresson, atender¨¢ y estudiar¨¢ las demandas de las v¨ªctimas.
La segunda medida es el fondo para indemnizarlas. El uso de donativos de fieles queda excluido, seg¨²n el obispo Moulins-Beaufort. El dinero deber¨¢ proceder de la venta de bienes inmuebles y muebles de la Conferencia Episcopal de sus di¨®cesis, aunque estos son limitados, pues los edificios eclesi¨¢sticos anteriores a 1905 ¡ªa?o de aprobaci¨®n de la ley de separaci¨®n del Estado y las iglesias¡ª son propiedad del Estado. El comunicado menciona otra v¨ªa de financiaci¨®n: el endeudamiento.
Los obispos crearon el pasado marzo un fondo con una dotaci¨®n inicial de cinco millones de euros, insuficiente para afrontar las indemnizaciones. El informe Sauv¨¦ sugiri¨® que el dinero procediese tambi¨¦n del patrimonio de los agresores. Tambi¨¦n recomend¨® que la indemnizaci¨®n se calculase no de forma global ni con baremos para distintas categor¨ªas de v¨ªctimas ¡ªsi esto fuese posible¡ª, sino caso a caso y de manera individualizada.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.