Primer ERE en una universidad privada en Espa?a y primeras evidencias de mayores suspensos en alumnos de 14 a?os
Los efectos econ¨®micos y acad¨¦micos de la pandemia comienzan a causar estragos
El covid empieza a calar en la base de los sistemas educativos, tanto en lo que afecta a los alumnos m¨¢s adolescentes como a los cimientos de algunas universidades. Esta semana hemos conocido que los estudiantes madrile?os de tercero de la ESO sujetos a la semipresencialidad han obtenido peores notas que en a?os prepand¨¦micos, con un 20% m¨¢s de suspensos. Por otro lado, la Universidad Europea (UEM), que apenas investiga, negocia con su comit¨¦ de empresa un Expediente de Regulaci¨®n de Empleo (ERE) a 275 trabajadores (la mayor¨ªa profesores), el primero al colectivo docente (la Polit¨¦cnica de Madrid hizo uno a su personal de servicios en 2013).
La pandemia ha pillado a los alumnos de Secundaria en plena adolescencia, una etapa en la que los factores socio-emocionales, afectivos y de referencia cobran una importancia primordial y median en todos los procesos cognitivos, explica Marta Delgado, orientadora educativa en el instituto Juana de Castilla. ¡°El problema que nos encontramos ahora es la desmotivaci¨®n, que se descuelguen, es complicado¡±, a?ade Esteban ?lvarez, presidente de la asociaci¨®n de directores de centros de secundaria de la regi¨®n madrile?a.
Volviendo a la educaci¨®n superior, otro de los grandes temas de la semana ha sido el publicado por la secci¨®n de Ciencia de EL PA?S en el que se plantea si las universidades son focos de supercontagio. Mientras los representantes de los estudiantes abogan por mantener de forma telem¨¢tica la actividad ante el aumento de contagios y la falta de ¡°adaptaci¨®n¡±, en su opini¨®n, de las instalaciones, los responsables de las instituciones acad¨¦micas defienden que ¡°son espacios seguros¡±. Por otra parte, dos estudios han abordado la situaci¨®n: en uno, investigadores de Stanford admiten el riesgo de que las facultades sean focos de supercontagio; pero estos cient¨ªficos y otros de la Universidad de Harvard concluyen que se puede y se consigue conjurar esta amenaza.
El protagonismo en cuanto a actualidad sigue en el terreno universitario. Los erasmus del Reino Unido eligen Espa?a como primer destino y los espa?oles las islas brit¨¢nicas como segundo (tras Italia y por delante de Alemania). Pero el curso 2021-2022 ser¨¢ el ¨²ltimo (salvo en Irlanda del Norte) en el que se intercambien alumnos bajo este formato que ha permitido a 100.000 brit¨¢nicos estudiar en una universidad de la Uni¨®n Europea entre 2014 y 2020. ?Y ahora qu¨¦? Desde que el Brexit se vot¨® en 2016, las universidades del Reino Unido han tejido un plan b a trav¨¦s de redes de colaboraci¨®n con hom¨®logas europeas para salvar el Erasmus+ si los pol¨ªticos no se entienden (y de momento, no lo han hecho).
En palabras del redactor jefe de Opini¨®n de EL PA?S, Andrea Rizzi, ¡°la renuncia brit¨¢nica a permanecer en el programa educativo revela el escaso valor que otorga a la presencia de estudiantes extranjeros y un optimismo que roza la fe sobre las ventajas de ir solos".
Si te interesan estos temas y algunos m¨¢s, como el que abordamos esta semana sobre c¨®mo los jesuitas indemnizar¨¢n a las v¨ªctimas de abusos cometidos por miembros de su orden en Espa?a puedes acceder al portal de Educaci¨®n de EL PA?S y consultar las ¨²ltimas noticias.
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