Bruselas descarta una cuarta dosis hasta que no haya ¡°evidencias cient¨ªficas¡±

La discusi¨®n sobre una posible cuarta dosis ha aterrizado en la Uni¨®n Europea, cuando ni siquiera la mitad de su poblaci¨®n adulta ha recibido a¨²n la de refuerzo. La Comisi¨®n Europea ha defendido este viernes, durante una reuni¨®n informal y virtual de los ministros de Sanidad de los Veintisiete, que el bloque comunitario deber¨¢ estar ¡°preparado¡± para administrar ese pinchazo adicional en la poblaci¨®n general en el momento en que existan evidencias cient¨ªficas y ¡°datos concluyentes¡± sobre su pertinencia, algo que de momento ha descartado la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en ingl¨¦s). Bruselas tambi¨¦n ha reclamado centrar los esfuerzos en que los pinchazos lleguen a los millones de europeos a¨²n no vacunados.

¡°El asesoramiento cient¨ªfico y un enfoque basado en la evidencia deber¨ªan ser nuestro punto de partida¡±, ha expresado Stella Kyriakides, comisaria europea de Salud, ante los 27 ministros de la UE. ¡°Si vemos datos concluyentes sobre la necesidad de una cuarta dosis, tenemos que estar preparados para actuar¡±, ha incidido durante su intervenci¨®n, enfatizando que tanto la EMA como el Centro Europeo para el Control y Prevenci¨®n de Enfermedades (ECDC por sus siglas en ingl¨¦s) ¡°han sido muy claros¡± en cuanto a que una dosis de refuerzo (la segunda o tercera dosis, seg¨²n el tipo de vacuna) es crucial para proporcionar una protecci¨®n adecuada para evitar hospitalizaciones y las formas m¨¢s graves de la covid.

Pero estos organismos a¨²n no se han pronunciado sobre una hipot¨¦tica cuarta dosis de forma generalizada para los europeos. ¡°Lo que ahora no debemos olvidar, y requiere que actuemos con urgencia, es que hay millones de europeos que a¨²n no est¨¢n vacunados. Y es precisamente ah¨ª donde debemos centrar nuestra energ¨ªa ahora¡±, ha zanjado Kyriakides. Esta misma semana, la EMA calific¨® como ¡°razonable¡± administrar esa cuarta dosis en personas con un sistema inmunitario deprimido, pero advirtiendo de que a¨²n no hay datos sobre su necesidad en la poblaci¨®n general sana.

La postura de Bruselas es clara: no descarta que vayan a prescribirse m¨¢s pinchazos, aunque esto ha de combinarse con otras prioridades, tal y como adelantaba la comisaria europea de Salud tambi¨¦n esta semana en una entrevista concedida a EL PA?S y a un reducido grupo de medios europeos. ¡°La discusi¨®n de la cuarta dosis est¨¢ en marcha¡±, respondi¨®, ¡°pero no voy a renunciar a los millones de europeos que no est¨¢n protegidos¡±.

Los ministros de Sanidad se han enfrentado al debate existencial del cuarto pinchazo en un contexto de elevada transmisibilidad de la variante ¨®micron, con pr¨¢cticamente toda Europa en rojo oscuro (el peor escenario) en el mapa de riesgos que elabora semanalmente el ECDC. La nueva variante del virus ya ha sido identificado en todos los pa¨ªses de la UE y del Espacio Econ¨®mico Europeo (Noruega, Islandia y Liechtenstein), seg¨²n el ¨²ltimo informe del citado organismo, y ya desde la primera semana de enero 21 pa¨ªses europeos hab¨ªan informado de una prevalencia de la ¨®micron del 46,4%, duplicando los datos de la semana anterior.

Pero a este escenario de alt¨ªsimos n¨²meros de contagios se llega tambi¨¦n con millones de europeos inmunizados: casi el 70% de la poblaci¨®n de la UE est¨¢ completamente vacunada y un 40% han recibido el pinchazo de refuerzo (un 46% entre los adultos). La cifra baja entre los menores, donde solo un 18,5% han recibido la pauta completa, seg¨²n el ECDC.

Algunos pa¨ªses de la UE, como Espa?a y Dinamarca, ya han optado por inocular una cuarta dosis de la vacuna, pero solo para determinados colectivos inmunodeprimidos, mientras que Hungr¨ªa le da la opci¨®n a toda la poblaci¨®n, con el ¨²nico requisito de que consulten con un m¨¦dico. Esta dosis suplementaria ya se pincha en Israel desde principios de enero, pero un estudio publicado esta semana en ese pa¨ªs alertaba de que esta es insuficiente para evitar el contagio de ¨®micron.

La presidencia francesa de la UE, que lleva la batuta de las discusiones europeas este semestre, ha decidido colocar el asunto de la cuarta dosis en lo m¨¢s alto de la agenda del consejo informal de este viernes, convocado de forma extraordinaria, con el objetivo de incrementar la ¡°coordinaci¨®n¡± entre los Estados miembro y de compartir estrategias sanitarias nacionales, ¡°en particular las de vacunaci¨®n¡±, seg¨²n la comunicaci¨®n previa a la cita. ¡°No hay de momento una propuesta cient¨ªfica o pol¨ªtica sobre la cuarta dosis¡±, aporta una fuente diplom¨¢tica. ¡°De ah¨ª la idea de Francia sobre la necesidad de reflexionar y la iniciativa de poner en com¨²n entre los ministros de Sanidad¡±.

En el encuentro virtual se ha discutido tambi¨¦n sobre la fabricaci¨®n y suministro de vacunas adaptadas a las nuevas variantes, como la ¨®micron, otra de las grandes preocupaciones de las capitales europeas. ¡°Afortunadamente, las vacunas de que disponemos siguen siendo eficaces contra la enfermedad grave y la muerte, especialmente cuando se refuerzan¡±, ha subrayado Kyriakides, lo cual, ha a?adido, permite afrontar la situaci¨®n actual ¡°mientras los fabricantes siguen trabajando en la adaptaci¨®n de las vacunas existentes¡±.

La comisaria ha recalcado que los contratos ya firmados ¡°permiten garantizar el suministro de vacunas de pr¨®xima generaci¨®n¡±, y ha reclamado a los Estados miembro que est¨¦n preparados para tomar decisiones ¡°r¨¢pidas¡± y hacer pedidos en cuanto las empresas notifiquen ¡°que tienen una vacuna adaptada¡±. La EMA, ha subrayado, estar¨ªa ¡°dispuesta a evaluar todos los nuevos datos para que la eventual autorizaci¨®n llegue r¨¢pidamente¡±. La comisaria tambi¨¦n ha conminado a mirar m¨¢s all¨¢ en el horizonte, para dar prioridad a una ¡°nueva generaci¨®n de vacunas¡± que sean ¡°eficaces contra varias variantes y que, idealmente, protejan contra la infecci¨®n¡±.

Hasta la fecha, la Comisi¨®n Europea se ha asegurado el suministro de 4.200 millones de dosis contra la covid mediante acuerdos de compra centralizada, de los cuales ya se han distribuido 1.200 millones (cifra que incluye los viales donados a mecanismos solidarios con pa¨ªses de renta baja, como COVAX). En total, algo m¨¢s de 1.000 millones de pinchazos han acabado en brazos de ciudadanos europeos.