Una Europa que marca el camino en derechos de las mujeres

La devastadora situaci¨®n en Ucrania nos recuerda vivamente que no podemos dar por garantizados nuestros valores europeos. La agresi¨®n de Rusia no es solo un ataque inaceptable hacia Ucrania, sino hacia todo lo que Europa defiende: la democracia, los derechos humanos, la libertad y la paz.

El D¨ªa Internacional de la Mujer es un festivo nacional en Ucrania, en el que se celebran los logros de las mujeres. Ucrania no podr¨¢ celebrarlo este a?o, pero las ucranianas y los ucranianos no deben dudar nunca de nuestro firme apoyo. Su valiente resistencia nos recuerda de forma contundente por qu¨¦ nosotros mismos hemos luchado por nuestros derechos y valores fundamentales y por qu¨¦ debemos continuar defendi¨¦ndolos.

En todo el mundo, el D¨ªa Internacional de la Mujer es una oportunidad inmejorable para hacerlo. Hoy valoramos los avances registrados en el camino hacia la igualdad de g¨¦nero y abordamos los desaf¨ªos a los que todav¨ªa nos enfrentamos. La igualdad entre mujeres y hombres est¨¢ consagrada en los Tratados de la Uni¨®n Europea y en la Carta de Derechos Fundamentales, junto con la libertad, la democracia y el Estado de Derecho. Estos son los cimientos irrenunciables de Europa.

Europa es, sin duda, uno de los mejores lugares del mundo para las mujeres, pero los avances son desiguales y lentos. Todav¨ªa son v¨ªctimas de violencia y acoso por el mero hecho de ser mujeres. En este contexto ¡ªy a ra¨ªz de nuestro reciente encuentro en Madrid¡ª queremos subrayar la necesidad de que la Uni¨®n Europea y cada uno de sus Estados miembros defiendan los derechos de las mujeres y las ni?as. Porque no existe democracia plena si se niegan derechos fundamentales a m¨¢s de la mitad de la poblaci¨®n.

Dinamarca y Espa?a somos referentes por promover la igualdad real entre mujeres y hombres, y nuestros gobiernos est¨¢n fuertemente comprometidos con la defensa, protecci¨®n y promoci¨®n de los derechos de las mujeres y las ni?as.

Deben acelerarse los avances en Europa

En 2021, los Estados miembros obtuvieron una puntuaci¨®n media de 68 sobre 100 en el ¨ªndice anual del Instituto Europeo para la Igualdad de G¨¦nero, una cifra positiva, pero que supone solo cinco puntos m¨¢s que la de 2010. A ese ritmo, necesitar¨ªamos casi tres generaciones para lograr la paridad de g¨¦nero.

Desafortunadamente, no es suficiente con asegurar avances en Europa. Resulta muy grave el retroceso en derechos que han experimentado algunos pa¨ªses de nuestro entorno. El derecho de una mujer a decidir sobre su propio cuerpo ¡ªdecidir si y cu¨¢ndo quiere tener hijos¡ª es fundamental. Cuando hay pasos atr¨¢s en estos derechos que tanto nos ha costado conquistar, tenemos que alzar la voz y defenderlos.

La igualdad de g¨¦nero supone un motor econ¨®mico y social indiscutible que tambi¨¦n acelerar¨¢ el progreso de nuestros pa¨ªses. El Instituto Europeo para la Igualdad de G¨¦nero estima que mejorar la igualdad de g¨¦nero nos conducir¨ªa a un aumento del PIB de la Uni¨®n Europea de entre un 6,1% y un 9,6% en 2050. Esta cantidad es equivalente a 3,15 billones de euros. Es evidente que las sociedades y las econom¨ªas prosperan con m¨¢s justicia y m¨¢s eficacia si aprovechan el talento de las ni?as y las mujeres en toda su diversidad.

Las iniciativas nacionales en defensa de la igualdad de g¨¦nero son clave. En los ¨²ltimos a?os, Dinamarca ha tomado medidas como la baja de paternidad para los aut¨®nomos, ha promovido la presencia de mujeres en consejos de administraci¨®n y se ha esforzado en combatir el acoso sexual en el trabajo. Y Espa?a ha aprobado un permiso por nacimiento de 16 semanas, medidas para asegurar la plena igualdad en el puesto de trabajo o la igualdad salarial, y promover¨¢ una ley de usos del tiempo para garantizar un aut¨¦ntico equilibrio entre la vida laboral y personal sin sesgos de g¨¦nero.

La Uni¨®n Europea tambi¨¦n tiene importantes herramientas para acelerar este progreso en el conjunto de Europa. En la actualidad, se est¨¢n negociando iniciativas como la propuesta de Directiva de transparencia salarial o la propuesta de Directiva para mejorar el equilibrio de g¨¦nero en los consejos de administraci¨®n de las empresas cotizadas. Nuestros gobiernos ven potencial en estas iniciativas.

Necesitamos combatir la violencia de g¨¦nero

Compartimos una especial preocupaci¨®n por la violencia machista, una de las mayores expresiones de terror que perviven en nuestras sociedades.

Durante el confinamiento, las v¨ªctimas de violencia machista se enfrentaron a una doble amenaza: el propio virus y la convivencia con sus maltratadores.

La violencia de g¨¦nero tambi¨¦n deja miles de infancias rotas. En los ¨²ltimos a?os, varias campa?as en redes sociales han generado una necesaria atenci¨®n sobre las precauciones que las mujeres todav¨ªa tienen que tomar en ocasiones cuando vuelven caminando a su casa, sujetando las llaves entre sus dedos, llamando por tel¨¦fono, siempre mirando por el rabillo del ojo.

Dinamarca y Espa?a pueden liderar en Europa e internacionalmente esta lucha. Nuestros pa¨ªses est¨¢n comprometidos con la reforma del marco jur¨ªdico para hacer frente a esta lacra. Espa?a fue pionera con su Ley Integral contra la Violencia de G¨¦nero, que se ha convertido en un referente mundial. Dinamarca ha aprobado legislaci¨®n sobre consentimiento, nueva legislaci¨®n sobre violencia psicol¨®gica y acoso, y est¨¢ trabajando en un nuevo plan de acci¨®n nacional contra la violencia de g¨¦nero, incluyendo los feminicidios.

En la Uni¨®n Europea, existen razones para alentar a todos los Estados miembros a ratificar con urgencia el Convenio de Estambul, un tratado hist¨®rico que nos permite abordar la violencia machista en el escenario global.

La UE debe impulsar avances internacionales

Somos conscientes de que a¨²n muchas ni?as est¨¢n obligadas a casarse por la fuerza en todo el mundo; de que la situaci¨®n actual puede dejar a 20 millones de ni?as sin educaci¨®n y sin escolarizaci¨®n; y de que mujeres de decenas de pa¨ªses carecen a¨²n de servicios reproductivos y de salud sexual. La Uni¨®n Europea tiene que continuar erigi¨¦ndose en todo el mundo como el m¨¢s firme partidario de los derechos de las mujeres y las ni?as y su capacidad para tomar decisiones sobre su vida, su cuerpo y su futuro. Adem¨¢s, en crisis y cat¨¢strofes globales, las mujeres son normalmente las primeras en sufrirlas. Por eso, Dinamarca y Espa?a trabajan de la mano en la red global Call to Action, en la actualidad bajo liderazgo dan¨¦s.

Como principal donante de ayuda al desarrollo en todo el mundo, la Uni¨®n Europea puede conseguir un impacto real que favorezca el cambio. Por ello, es un importante paso adelante que el nuevo instrumento europeo para el desarrollo, Europa Global, incluya un claro enfoque de g¨¦nero. Tambi¨¦n trabajaremos para garantizar que la Uni¨®n Europea ponga los derechos y el empoderamiento de las ni?as y mujeres en el centro de nuestro compromiso global, como subraya el Plan de Acci¨®n de G¨¦nero de 2020 de la Uni¨®n Europea.

Europa es l¨ªder en pol¨ªticas p¨²blicas igualitarias, pero sin duda podemos y debemos hacer mucho m¨¢s. Los gobiernos de Dinamarca y Espa?a nos comprometemos a ello.