Las cuatro denuncias de otras chicas que no frenaron al presunto asesino de Erika: acoso y amenazas en la parada del autob¨²s
La jueza ordena el ingreso en prisi¨®n del acusado del crimen de la ni?a de 14 a?os, que en 2019 ya fue inculpado por varias j¨®venes a las que abord¨®
Igor Postolache, de 32 a?os, el hombre acusado de asesinar a Erika Yunga, de 14 a?os, el pasado martes, en su portal en Oviedo hab¨ªa sido denunciado a?os atr¨¢s por al menos cuatro j¨®venes. Una de ellas explic¨® a la polic¨ªa que en agosto de 2019, en el autob¨²s urbano que iba de Oviedo a Soto de Trubia, Postolache se le acerc¨® y comenz¨® a hablarle. La chica no respondi¨® al principio porque no le oy¨® debido a que llevaba puestos los auriculares con m¨²sica. Ante la insistencia del hombre, se quit¨® los cascos pero no entendi¨® mucho de lo que dec¨ªa ya que, seg¨²n la chica, el hombre hablaba ¡°de forma poco clara¡±, seg¨²n la sentencia. Despu¨¦s, Postolache trat¨® de coger la mano de la chica, cosa que esta evit¨®.
Tiempo despu¨¦s, ya en septiembre, en el centro de Oviedo, en la parada del autob¨²s de la calle de Ur¨ªa, Postolache vio de nuevo a esta chica, se acerc¨® a ella y directamente le pidi¨® el n¨²mero de tel¨¦fono. La chica reconoci¨® en ese hombre al que ya la hab¨ªa abordado d¨ªas atr¨¢s y abandon¨® la marquesina. Se acerc¨® a un grupo de chicos j¨®venes que estaban cerca y, tras contarles lo que les pasaba, les pidi¨® ayuda. Postolache huy¨®. El juez le atribuy¨® un delito de coacciones leves y le impuso una multa de 480 euros. Este fallo fue recurrido y la cuant¨ªa de la sanci¨®n se redujo a la mitad.
Otras tres j¨®venes denunciaron juntas a Postolache, aunque refiriendo episodios distintos, por la misma fecha. Y por la misma raz¨®n. Y en el mismo sitio. La primera de las denuncias refiere que el 1 de mayo, en la parada del autob¨²s de la calle de Ur¨ªa, el hombre ahora acusado de asesinato, se acerc¨® a una chica y le dijo: ¡°Eres muy guapa, me gustas mucho, ?quieres venirte conmigo?¡±. La joven se fue de all¨ª. Otra chica denunci¨® a la polic¨ªa que el 20 de agosto, a las 21.00, en la misma parada de autob¨²s, el mismo hombre se acerc¨® a ella y le pregunt¨®: ¡°?Crees en el destino? ?Te han decepcionado los hombres en alg¨²n momento?¡±. Tras acariciarle la cara, a?adi¨®: ¡°Eres fant¨¢stica¡±. Tambi¨¦n en este caso, la joven huy¨®. Diez d¨ªas despu¨¦s, tambi¨¦n en el mismo lugar de la calle de Ur¨ªa, otra chica, seg¨²n consta en la denuncia, vio aproximarse a Postolache. ?ste le pidi¨® permiso para hacerle una pregunta. Cuando la chica se lo concedi¨®, el hombre asegur¨®: ¡°Me turbas la raz¨®n¡±. Luego a?adi¨® que se ¡°estaba poniendo muy nervioso¡± y que le gustar¨ªa ponerle a la chica ¡°una bolsa en la cabeza¡±. Postolache neg¨® esto ¨²ltimo en el juicio. En este caso, la jueza absolvi¨® al hombre de delito leve de amenaza al considerar que las denunciantes no aportaban datos suficientes como para sustentar la acusaci¨®n.
El martes 5 de abril, Igor Postolache asesin¨® a cuchilladas a Erika Yunga. Lo hizo en el rellano de la escalera del primer piso, donde ¨¦l viv¨ªa, tres pisos por debajo de donde resid¨ªa la ni?a con su familia. Erika volv¨ªa del instituto y sub¨ªa a casa a comer con su padre y su hermano. Al ver que, tras llamar a por el telefonillo del portal, ella no sub¨ªa a casa, el hermano baj¨® por las escaleras y se encontr¨®, en el primer piso, la cazadora de ella en el suelo manchada de sangre. Otras manchas de sangre conduc¨ªan a la puerta cerrada de la casa de Igor. Cuando lleg¨® la polic¨ªa, la ni?a ya hab¨ªa muerto y el hombre acusado de su asesinato se hab¨ªa apu?alado a s¨ª mismo en el cuarto de ba?o con tal sa?a que se encontraba inconsciente. Fue conducido al hospital. Su vida no corre peligro.
La jueza que instruye el caso visit¨® este jueves a Postolache para tomarle declaraci¨®n. ?ste se acogi¨® a su derecho de no decir nada. Con todo, la jueza le atribuye un delito de asesinato y otro de agresi¨®n sexual en grado de tentativa y ha ordenado que, cuando sea dado de alta, vaya a la c¨¢rcel.
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