Los forenses del juicio contra Dani Alves concluyen que la v¨ªctima sufre estr¨¦s postraum¨¢tico

La tercera jornada del juicio contra Dani Alves, acusado de violar a una joven de 23 a?os en la discoteca Sutton de Barcelona ha provocado un encendido debate entre los expertos que exploraron a la v¨ªctima. Los forenses, que intervinieron por orden judicial, han concluido que la chica sufre un cuadro de estr¨¦s postraum¨¢tico, una enfermedad severa; mientras, los peritos de la defensa han puesto en duda esas secuelas y han cuestionado, incluso, que fuera violada, con el argumento de que no presentaba lesiones vaginales, aunque han tenido que reconocer que no tiene por qu¨¦ haberlas. En la sesi¨®n de hoy han declarado tambi¨¦n dos expertas para acreditar que Alves bebi¨® esa noche una gran cantidad de bebidas alcoh¨®licas. A preguntas de la abogada de la v¨ªctima, sin embargo, han tenido que admitir que sus capacidades estaban solo ¡°levemente afectadas¡± y que, en cualquier caso, ¡°sab¨ªa lo que estaba sucediendo¡±.

Las lesiones f¨ªsicas y las secuelas psicol¨®gicas han sido objeto de debate en un tenso di¨¢logo en la Audiencia de Barcelona. Cinco peritos (tres forenses designados por el juzgado de instrucci¨®n y dos peritos contratados por la defensa de Alves) han discrepado sobre el origen y alcance de esos da?os. La v¨ªctima, que ten¨ªa 23 a?os, presentaba hematomas en ambas rodillas como consecuencia, presuntamente, de la violencia ejercida por el exfutbolista en el interior del cuarto de ba?o. La exploraci¨®n revel¨® que no sufr¨ªa, sin embargo, lesiones vaginales fruto de la penetraci¨®n sin consentimiento.

¡°?Es imprescindible que haya lesiones vaginales para que haya violaci¨®n?¡±, ha preguntado la fiscal. El perito de la defensa ha afirmado que la ausencia de esas lesiones es m¨¢s propio de ¡°relaciones consentidas¡±, aunque ha tenido que admitir que ¡°todo puede suceder¡±. El forense ha sido m¨¢s claro: ¡°Es verdad que las lesiones son m¨¢s frecuentes en relaciones no consentidas, pero no se puede establecer un nexo casual¡±. Id¨¦ntica discusi¨®n se ha dado con las heridas en las rodillas: el perito de la defensa ha admitido que ¡°nadie puede decir al 100%¡± c¨®mo se produjeron y ha puesto en duda la violaci¨®n por el hecho de que no se encontraron otras heridas. ¡°Es muy raro que no apreciemos nada (...) Me hace pensar que el coito no fue tan traum¨¢tico¡±.

Cuando la discoteca activ¨® el protocolo contra agresiones sexuales, la v¨ªctima fue trasladada al Hospital Cl¨ªnic, donde fue explorada. ¡°Estaba con tensi¨®n, pero se ve¨ªa una chica coherente, que explicaba las cosas tal como las hab¨ªa vivido¡±, ha relatado el forense que la atendi¨® esa noche. La chica no le dijo que el agresor ¡°era una persona famosa¡±. S¨ª le cont¨® que ¡°hubo besos en el cuello, pero despu¨¦s quiso salir [del ba?o] y ya no pudo¡±. El forense ha a?adido que tuvo lagunas de memoria (¡±no recordaba si lleg¨® a hacerle una felaci¨®n o no¡±), aunque s¨ª ten¨ªa claro que hab¨ªa sido penetrada vaginalmente contra su voluntad. El hombre ha insistido en que su reacci¨®n en el ba?o, donde se qued¨® paralizada, es perfectamente normal (¡±es un mecanismo de defensa del cuerpo, no se puede controlar¡±), lo mismo que los sentimientos de verg¨¹enza y culpabilidad que mostr¨®. Ese sentimiento ¡°suele estar asociado a la condici¨®n de v¨ªctima¡±, ha dicho otro de los forenses.

La Fiscal¨ªa pide 150.000 euros de indemnizaci¨®n para ella por los da?os morales y las secuelas sufridas. En abril de 2023, durante la instrucci¨®n del caso, volvi¨® a ser explorada y mostr¨® ¡°cierta ansiedad¡± y ¡°fragilidad emocional¡±. Fue entrevistada, adem¨¢s, por una psic¨®loga forense y por una psic¨®loga contratada por Alves, que este mi¨¦rcoles se ha quejado de que solo le dejaron formular una pregunta. ¡°Discutimos, me dijo que no pod¨ªa preguntar nada del caso ni cuestiones ¨ªntimas¡±. La perito ha cuestionado las conclusiones de los forenses sobre el estr¨¦s postraum¨¢tico. ¡°Es algo muy severo, no se puede pasar con los 0,25 de Trankimazin [ansiol¨ªtico] que tomaba y la m¨¦dico de cabecera ni le dio un diagn¨®stico ni la deriv¨® a salud mental¡±.

Otras dos psic¨®logas contratadas por Alves han intentado avalar el relato de que esa noche hab¨ªa bebido y no era consciente de lo que hac¨ªa. La defensa del futbolista brasile?o defiende su inocencia pero plantea que, en el caso de que el tribunal le condene, se le apliquen dos atenuantes: reparaci¨®n del da?o (por haber abonado los 150.000 euros de indemnizaci¨®n, aunque lo hizo como fianza y por orden judicial) y estado de embriaguez. Los amigos que salieron a Sutton con ¨¦l dijeron que hab¨ªa bebido mucho y su mujer, Joana Sanz, declar¨® el martes que ¡°ol¨ªa a alcohol¡± cuando lleg¨® a casa.

Las dos expertas han intentado dar hoy rigor cient¨ªfico a esas impresiones. Analizaron la ingesta de bebidas (vino, whisky, gin-tonics) a trav¨¦s de las im¨¢genes, donde se ve ¡°una descoordinaci¨®n motora; parece que se caiga¡±. Alves ¡°no est¨¢ acostumbrado a la ingesta de alcohol¡± y por eso concluyen que esa noche sus capacidades ¡°volitivas y cognitivas estaban afectadas¡±. A preguntas de la acusaci¨®n, sin embargo, han tenido que admitir que sus capacidades solo estaban ¡°levemente afectadas¡± y que sab¨ªa lo que pasaba.

El juicio a Alves no se est¨¢ pudiendo seguir con normalidad. La declaraci¨®n de la v¨ªctima fue a puerta cerrada (por orden del tribunal) y tampoco se han podido ver las im¨¢genes de Sutton (para proteger a la v¨ªctima) que se han exhibido en la sala y solo para las partes del proceso. Tan solo han trascendido unos minutos de la conversaci¨®n, grabada accidentalmente por el mosso que acudi¨® a la discoteca a atender a la v¨ªctima. La mujer expresa, entre llantos, su deseo inicial de ¡°no denunciar¡± por miedo a ser reconocida. ¡°No quiero que salga en ninguna parte mi nombre¡±, insisti¨®. Cuando la chica explic¨® que entr¨® voluntariamente al ba?o y tem¨ªa que no la creyeran, el polic¨ªa trat¨® de tranquilizarla: ¡°Tu nombre no va a salir fuera del ¨¢mbito judicial. T¨² puedes entrar de forma voluntaria y decir que no¡±.

Alves se sienta desde el lunes en el banquillo de los acusados por la violaci¨®n de la joven, de 23 a?os, en los lavabos de la zona VIP de Sutton. Los hechos ocurrieron la noche del 31 de diciembre de 2022. Por indicaci¨®n de Alves y del amigo que le acompa?aba, un camarero invit¨® a tres j¨®venes ¡ªla v¨ªctima, una amiga y su prima¡ª a tomar una copa en la zona VIP. All¨ª, en la mesa 6, bailaron con Alves y el amigo hasta que el exfutbolista se acerc¨® con intenciones sexuales a la v¨ªctima hasta que le invit¨® a cruzar el umbral de una puerta y entrar en la suite. Al lado de la mesa hab¨ªa un lavabo. La chica entr¨® y, seg¨²n su testimonio, cuando quiso salir, Alves se lo impidi¨®. Siempre seg¨²n la versi¨®n de la v¨ªctima, el futbolista intent¨® que le practicara una felaci¨®n, la abofete¨®, le insult¨® y finalmente la penetr¨® con mucha fuerza contra su consentimiento, hasta que eyacul¨®.