La di¨®cesis de Tui-Vigo consiente homenajear a un cura acusado de pederastia

EL PA?S puso en marcha en 2018 una investigaci¨®n de la pederastia en la Iglesia espa?ola y tiene una base de datos actualizada con todos los casos conocidos. Si conoce alg¨²n caso que no haya visto la luz, nos puede escribir a: abusos@elpais.es Si es un caso en Am¨¦rica Latina, la direcci¨®n es: abusosamerica@elpais.es

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La parroquia de Santa Marta, en Pontevedra, celebr¨® el pasado 19 de diciembre una eucarist¨ªa de acci¨®n de gracias por el 65? aniversario de ordenaci¨®n sacerdotal de Manuel Rodr¨ªguez Hermelo, quien fue el primer sacerdote tras la fundaci¨®n del templo en 1994 y estuvo al frente de ella hasta agosto de 2021. La di¨®cesis de Tui-Vigo permiti¨® el homenaje y lo report¨® en su p¨¢gina web y en sus redes sociales, aunque el viernes borr¨® las publicaciones horas despu¨¦s de ser contactada por este diario. Conoc¨ªa desde el mes de mayo, a trav¨¦s de EL PA?S, que este cura est¨¢ acusado por abuso de menores por un exalumno del Seminario Menor de Tui entre 1969 y 1971, un caso que estar¨ªa prescrito para la justicia. El testimonio estaba incluido en el quinto informe que este diario entreg¨® el pasado 30 de mayo al Defensor del Pueblo, a la Conferencia Episcopal Espa?ola (CEE) y al Vaticano con 79 nuevas acusaciones de pederastia contra 87 cl¨¦rigos, una informaci¨®n que obliga a los obispos a abrir una investigaci¨®n, seg¨²n la normativa dictada por el Papa.

Uno de los acusados es Rodr¨ªguez Hermelo. La persona que lo denuncia, cuya identidad estaba protegida en el informe, al igual que la del resto de testimonios, es Gonzalo Tom¨¦ Fern¨¢ndez, de 68 a?os. Ahora desea salir a la luz para reafirmar su acusaci¨®n, que tambi¨¦n ha comunicado a la oficina de atenci¨®n a las v¨ªctimas de pederastia en la Iglesia del Defensor del Pueblo. ?l no se muestra sorprendido con el homenaje. ¡°Por desgracia, las cosas funcionan as¨ª¡±, opina.

El sacerdote, contactado por este diario el pasado martes, se mostr¨® desconcertado y muy sorprendido. En una llamada telef¨®nica, neg¨® haber cometido abusos sexuales a menores: ¡°Yo estuve en el Seminario Menor y hubo unos peque?os juegos, pero no llegaron a eso¡±. En ese momento la llamada fue interrumpida. Tampoco fue posible recuperar la conversaci¨®n al realizar un segundo intento: ¡°He cortado yo, no vuelva a llamar, por favor¡±, respondi¨® una mujer que atiende las llamadas de la residencia de Vigo donde el cura vive actualmente.

Rodr¨ªguez Hermelo, octogenario y natural de Ald¨¢n (Pontevedra), fue ordenado en 1959. A lo largo de su vida fue rector del Seminario Menor de Tui y del Seminario Mayor de Vigo, delegado diocesano de Pastoral familiar, profesor de religi¨®n en distintos institutos gallegos, p¨¢rroco de Santa Marta y presb¨ªtero del arciprestazgo Vigo-As Travesas.

El vicario de Pastoral de la di¨®cesis de Tui-Vigo, Jos¨¦ Vidal Novoa, reconoce tener constancia de las acusaciones del quinto dosier de EL PA?S con ¡°los supuestos casos de abuso sexual¡±, aunque alega que en este se conocen los nombres de los acusados, pero no los de las v¨ªctimas. Motivo por el cual, explica, el obispado no impidi¨® el homenaje a Rodr¨ªguez Hermelo, lo que supone desobedecer las normas del Papa. Precisa no haber recibido ninguna acusaci¨®n contra el cura por los canales que su entidad tiene habilitados para investigar estas denuncias. Cuenta que su di¨®cesis se comunic¨® con este diario para solicitar el contacto de los denunciantes y facilitarles los canales que su entidad tiene habilitados para recoger las acusaciones.

EL PA?S siempre informa a las personas que relatan abusos de los canales para ponerse en contacto con la Iglesia y aportar personalmente su testimonio, pero muchas prefieren no hacerlo, y la mayor¨ªa de las que lo hacen quedan decepcionadas por la atenci¨®n. Hace dos meses este diario public¨® un an¨¢lisis de 113 casos y casi todos, 108 denunciantes de abusos, acusaban a obispos y ¨®rdenes religiosas de no contestar a sus correos, alargar los procesos y obligarles a firmar cl¨¢usulas de confidencialidad, prohibidas por el Papa. Tom¨¦ comenta que prefiere no ponerse en contacto con la di¨®cesis: ¡°Me parece una burla como act¨²a la Iglesia ante estos casos, es como preguntarle a la persona que me dio un pu?etazo cu¨¢ntos m¨¢s me va a dar¡±.

Las normas aprobadas por el papa Francisco en 2019 para acabar con el encubrimiento obligan a cualquier obispo o superior religioso a abrir una investigaci¨®n interna ante cualquier informaci¨®n de un posible caso. Las reglas del Vaticano son muy claras, resumidas en el vadem¨¦cum publicado en julio de 2020. La notitia de delicto, es ¡°toda informaci¨®n sobre un posible delito que llegue de cualquier modo al Ordinario o al Jerarca¡±.

No es necesario que se trate de una denuncia formal (art¨ªculo 9). Puede llegar de cualquier modo, tambi¨¦n por los medios de comunicaci¨®n (art¨ªculo 10). Incluso, sin datos precisos debe ser estudiada y si es veros¨ªmil debe abrirse una investigaci¨®n previa (art¨ªculos 13 y 16), que luego hay que enviar a Roma, a la Congregaci¨®n para la Doctrina de la Fe (art¨ªculo 69).

¡°Sabemos esta normativa y hemos hecho la investigaci¨®n hasta donde hemos podido. Ya no voy a contestar m¨¢s preguntas¡±, responde Vidal por mensaje al consultarle si conoce estas reglas. Adem¨¢s de este caso, la di¨®cesis de Tui-Vigo cuenta con nueve acusaciones m¨¢s de abuso contra otros religiosos, seg¨²n la base de datos elaborada por este peri¨®dico. Vidal cuenta que ¡°lamentablemente¡± a lo largo del tiempo s¨ª recibieron incriminaciones contra otras personas, respecto a las que, asegura, ya han tomado medidas.

Gonzalo Tom¨¦ Fern¨¢ndez acusa a Rodr¨ªguez Hermelo de abusar de ¨¦l entre 1969 y 1971 en el internado del Seminario Menor de Tui, ubicado en Pontevedra. ¡°Aparec¨ªa en mi habitaci¨®n por la noche, me acariciaba y me masturbaba por encima de las s¨¢banas, nunca meti¨® la mano dentro. Me iba haciendo caricias, me besaba en el cuello y en la oreja. Incluso, alguna vez en la boca. Con la mano me masajeaba hasta que yo eyaculaba. Entonces, yo me hac¨ªa el dormido y ¨¦l se iba¡±, relata.

Tom¨¦, de origen gallego, pero residente fuera de esta autonom¨ªa, cuenta que Rodr¨ªguez Hermelo era el ¨²nico sacerdote del Seminario Menor de Tui que no vest¨ªa el h¨¢bito por aquel entonces. ¡°Era campechano, un poquito m¨¢s liberal que el resto de los curas, iba de paisano con un traje y un alzacuellos peque?ito. Por ello, nos ca¨ªa muy bien a todos¡±, recuerda. Sospecha que no fue el ¨²nico que vivi¨® una situaci¨®n como la que relata, aunque dice que nunca lo coment¨® con los dem¨¢s compa?eros: ¡°Hab¨ªa un respeto porque mandaba en el colegio¡±.

Antes de cumplir los 12 a?os, relata este exalumno, los menores dorm¨ªan todos juntos en una sala grande con camas bajas. Tom¨¦ dice que todav¨ªa se acuerda de los ba?os, localizados cerca de la puerta. Comenta que a partir de los 13, intentaban desplazarlos a habitaciones individuales divididas en dos plantas con unos pasillos muy largos, seg¨²n rememora: ¡°Era entonces cuando se produc¨ªan los abusos, siempre de noche y en silencio. Me met¨ªa en cama con un poco de miedo, deseaba dormirme y que no apareciese¡±. Explica que los sacerdotes tambi¨¦n ten¨ªan sus habitaciones dentro del internado.

El exseminarista asegura que Rodr¨ªguez Hermelo le dejaba marcharse del centro los fines de semana para poder trabajar, pagar el internado y ahorrar un poco. Considera que era un favor muy grande porque su familia necesitaba dinero. Sin embargo, nunca le cont¨® a sus padres nada sobre las agresiones sexuales. ¡°Para ellos ¨¦l era una persona muy respetada. Una vez al curso este sacerdote me llevaba en coche a mi casa, localizada en una peque?a aldea, y mis padres le preparaban una merienda grande, a pesar de que no ¨ªbamos sobrados¡±, recuerda.

Su testimonio fue incorporado en el quinto dosier de EL PA?S. Como ocurri¨® con los anteriores informes elaborados por este peri¨®dico, la CEE reenvi¨® los casos a los obispados y ¨®rdenes religiosas correspondientes para que, como obliga el derecho can¨®nico, abrieran una investigaci¨®n y, posteriormente, decidan sobre una posible reparaci¨®n a las v¨ªctimas. Desde 2021, este diario ha remitido a la Iglesia cat¨®lica un total de 783 testimonios con acusaciones de abusos, m¨¢s de 1.600 p¨¢ginas de relatos que a¨²n esperan una respuesta. EL PA?S tambi¨¦n lleva la ¨²nica base de datos sobre el esc¨¢ndalo, que en este momento registra 1.534 acusados con al menos 2.817 v¨ªctimas.

Cuando se produjo el homenaje a Rodr¨ªguez Hermelo, un excura contact¨® con EL PA?S indignado, pues asegura que mientras estuvo en el Seminario Menor de Tui entre 1982 y 1985, y en el Seminario Mayor de Vigo entre 1987 y 1993, las acusaciones contra Hermelo eran vox populi, aunque ¨¦l nunca padeci¨® ninguna situaci¨®n similar a la relatada por Tom¨¦ y no coincidi¨® con ¨¦l durante su etapa formativa. La eucarist¨ªa en su honor le parece ¡°una verg¨¹enza¡±.

El obispo de Tui-Vigo cuando ocurrieron los hechos era Jos¨¦ Delicado. Le sucedieron Jos¨¦ Cervi?o en 1974, Jos¨¦ Di¨¦guez y Luis Quinteiro, quien ostent¨® el cargo hasta el 20 de julio de 2024. Este ¨²ltimo fue el que recibi¨® la acusaci¨®n contra Rodr¨ªguez Hermelo. En el pasado, Quinteiro ya fue cuestionado por su gesti¨®n del esc¨¢ndalo de los Miguelianos, que termin¨® en 2018 con una condena de nueve a?os por abuso sexual al l¨ªder de esta asociaci¨®n con rasgos de secta. En el juicio, el obispo admiti¨® que no denunci¨® el caso a la justicia y se limit¨® a apartar al acusado e incoar un expediente can¨®nico. Tras su renuncia por edad, el prelado Antonio Val¨ªn le sucedi¨® en el puesto.

Un amigo de Tom¨¦ de aquel entonces le cont¨® que otro alumno, que ahora es cura en Pontevedra, se encar¨® con Rodr¨ªguez Hermelo y le acus¨® de forma p¨²blica en el Seminario Mayor de Vigo. ¡°Sucedi¨® cinco a?os despu¨¦s de que abusara de m¨ª. Delante de m¨¢s compa?eros le dijo que se dedicaba a hacer estas cosas¡±, explica. Este sacerdote asegura, en una llamada con este diario, no recordar nada sobre abusos sexuales. Dice que han pasado muchos a?os y que no desea saber m¨¢s sobre estos asuntos.