La accesibilidad web: una asignatura pendiente

La accesibilidad web est¨¢ de moda, y bienvenida sea una moda que tiene como objetivo facilitar el acceso a Internet a todos los ciudadanos, especialmente de aquellos que tienen alg¨²n tipo de discapacidad. En enero del presente a?o entr¨® en vigor la Ley de Accesibilidad para las Administraciones P¨²blicas y si algo se puede asegurar es que era una Ley anunciada con suficiente antelaci¨®n ya que estaba prevista desde 2002, tras la publicaci¨®n de la LSSI (Ley de Sociedad de la Informaci¨®n).

Desde la Fundaci¨®n CTIC, y como resultado de nuestra especializaci¨®n en estandarizaci¨®n web y espec¨ªficamente en el ¨¢mbito de la accesibilidad, hemos observado en los ¨²ltimos a?os un acercamiento general hacia la Ley, sobre todo en los meses anteriores a su entrada en vigor, siendo la palabra intranquilidad la que quiz¨¢s mejor define la situaci¨®n actual. Algo es algo.

?Pero cual es el grado de cumplimiento? ?Cu¨¢les son los problemas para su aplicaci¨®n? ?Cu¨¢l es la sensibilidad pol¨ªtica al cumplimiento de la misma? ?Qu¨¦ responsabilidad tienen las empresas tecnol¨®gicas que prestan servicios a las Administraciones P¨²blicas en servicios electr¨®nicos? ?Cuales son la medidas legales para garantizar la aplicaci¨®n de la Ley? Intentar¨¦ aportar algunas luces que nos ayuden a interpretar la situaci¨®n creada desde la entrada en vigor de la Ley.

El grado de cumplimiento de la Ley de Accesibilidad por parte de la administraciones publicas es en general deficiente. Una simple aplicaci¨®n de la herramienta de evaluaci¨®n de errores autom¨¢ticos TAW, desarrollada por la Unidad de Accesibilidad de CTIC y en la que se basan la mayor parte de los informes publicados de situaci¨®n, nos proporcionar¨¢ pruebas evidentes. Sin embargo, y curiosamente, la causa no es la falta de sensibilidad pol¨ªtica de quienes gobiernan las Administraciones p¨²blicas, ni son ellos los que mayor responsabilidad tienen en la situaci¨®n (que la tienen). Las Administraciones sienten la presi¨®n de la Ley, aunque son conocedoras de que ¨¦sta no prev¨¦, al menos de momento, sanciones por incumplimiento. Y quiz¨¢s no se necesiten medidas sancionadoras, aunque algunos pa¨ªses ya las han puesto en marcha, sino que la verdadera presi¨®n empezar¨¢ a llegar de la propia opini¨®n p¨²blica y de la mayor sensibilidad de los medios de comunicaci¨®n hacia estas cuestiones. Pero una cosa es sentir la presi¨®n de la Ley y otra interiorizar la necesidad de construir servicios p¨²blicos electr¨®nicos accesibles. Si la necesidad estuviera interiorizada, las p¨¢ginas web de los principales partidos pol¨ªticos, por ejemplo, ser¨ªan accesibles y no lo son.

En buena medida la pelota est¨¢ en el alero de las empresas tecnol¨®gicas. Las herramientas de generaci¨®n de portales y de gesti¨®n de contenidos actuales, salvo raras y honrosas excepciones, no generan arquitecturas accesibles. Las Administraciones demandan a las empresas proveedoras de servicios tecnol¨®gicos sitios web accesibles, pero ¨¦stas con excesiva frecuencia desconocen las pautas de estandarizaci¨®n necesarias para ello. Se trata de las "Pautas de accesibilidad para contenido Web " creadas por la iniciativa WAI del W3C, que es el consorcio reconocido internacionalmente como generador de la tecnolog¨ªa de soporte para que la Web sea universal y alcance su m¨¢ximo potencial. En otros casos, simplemente no se pueden aplicar las pautas WAI a las herramientas de generaci¨®n de portales y contenidos porque t¨¦cnicamente es imposible.

El problema de fondo es que las empresas tecnol¨®gicas siguen entendiendo la construcci¨®n del software como cajas negras (se presenta el producto pero no se dice cu¨¢les son sus ingredientes) y el conocimiento para la construcci¨®n de arquitecturas estandarizadas deja mucho que desear. En algunos casos, la situaci¨®n se agrava. Se est¨¢n ofreciendo a peque?os ayuntamientos servicios basados en productos comerciales de conocidas multinacionales como la soluci¨®n a sus portales del ciudadano a sabiendas del incumplimiento de las pautas de accesibilidad.

Curiosamente, y aunque la Ley obliga s¨®lo a las Administraciones P¨²blicas al cumplimiento de la accesibilidad web, algunos sectores de actividad como la banca se est¨¢n mostrando muy sensibles al problema. Y es l¨®gico. La banca electr¨®nica presta servicios al ciudadano y los discapacitados son tambi¨¦n sus clientes.

Pero a pesar de lo dicho, todo apunta a que se est¨¢ produciendo un cambio de direcci¨®n, en el sentido correcto. Y esto es lo importante. Las Administraciones son las que presionan al sector tecnol¨®gico para que les d¨¦ respuesta, aunque realmente debiera ser el sector quien se adelantara aportando soluciones. Y el sector tecnol¨®gico, presionado, est¨¢ buscando soluciones en organismos especializados, en la formaci¨®n de sus desarrolladores y en la aceleraci¨®n de la amortizaci¨®n de sus herramientas actuales para iniciar la construcci¨®n o reconstrucci¨®n de otras que s¨ª generen contenidos accesibles.

Todo indica que el concepto acu?ado por el creador del Web y director general del Consorcio W3C, Tim Berners-Lee, en el sentido de construir una web de acceso universal, debiera ser un camino irreversible. La cuesti¨®n es la velocidad. Aceleremos entre todos.

Pablo Priesca Balb¨ªn es director de la Fundaci¨®n CTIC (www.fundacionctic.org)