¡°As¨ª me ¡®hackeo¡¯ el m¨®vil para que no me rastreen¡± (y es una locura)
El esfuerzo para usar el tel¨¦fono sin ninguna de las 'apps' que guardan nuestros datos es inabarcable
Adolfo tiene un m¨®vil Xiaomi. Su aspecto externo es como el de otros m¨®viles, pero todo el software es distinto. Adolfo no quiere que los gigantes tecnol¨®gicos sepan qu¨¦ escribe, qu¨¦ busca o d¨®nde est¨¢. Por el mismo motivo no ha querido aparecer en este art¨ªculo con su apellido o mostrar su rostro en la fotograf¨ªa.
Para Adolfo, el cambio empez¨® con las revelaciones de Edward Snowden, el consultor tecnol¨®gico y antiguo empleado de la CIA que hizo p¨²blicos programas de vigilancia masiva de EE UU. Antes apenas le preocupaba la privacidad. Hoy s¨ª, y lo explica as¨ª: "Aprecio mi vida privada y no quiero que todo est¨¦ en manos de las empresas, del Gobierno y de otra gente". Aunque tambi¨¦n bromea. Llama "gorritos de aluminio" a quienes son m¨¢s obsesivos que ¨¦l.
Adolfo sostiene que no es necesario saber inform¨¢tica para hacerlo
Su explicaci¨®n t¨¦cnica de c¨®mo ha tenido que hackearse el m¨®vil para que no le rastreen es una locura para los no iniciados. Adolfo sostiene que no es necesario saber inform¨¢tica para hacerlo. Pero ¨¦l, graduado en Ingenier¨ªa Inform¨¢tica, ha dedicado horas desde hace a?os para encontrar soluciones. Es claramente un camino para pocos: "Conozco a una persona igual que yo y otra que est¨¢ empezando a plantearse dejar plataformas", explica.
La lista de los cambios que ha hecho en su m¨®vil no pretende demostrar su habilidad, sino mostrar la inabarcable batalla para lograr ser invisible con un tel¨¦fono en el bolsillo. El ¨²nico modo de evitar que grandes empresas y Gobiernos recojan nuestra informaci¨®n cotidiana es no tener m¨®vil.
La dificultad t¨¦cnica no es el ¨²nico escollo. Hay otro: el tel¨¦fono de Adolfo es menos pr¨¢ctico. El GPS es lento, no puede tener redes y el navegador es menos ¨¢gil. A veces, incluso, Adolfo claudica y acepta algo de intrusi¨®n a cambio de cierta comodidad. Su sistema tampoco es perfecto.
El GPS es lento, no puede tener redes y el navegador es menos ¨¢gil
Hay marcas de m¨®viles con todo esto m¨¢s o menos de serie. Adolfo quiere comprarse alg¨²n d¨ªa, por ejemplo, un Purism. Pero por ahora es muy caro (600 euros). "No s¨¦ a¨²n si su ¨¦xito va a ser grande o peque?o, aunque seguramente m¨¢s bajo de lo que espero", dice. De momento, su Xiaomi ser¨¢ para unos a?os.
El sistema operativo. El d¨ªa en que Adolfo compr¨® su Xiaomi Redmi Note 4 no empez¨® a usarlo. Primero, solicit¨® a la compa?¨ªa que le mandaran un c¨®digo para desactivar el bootloader, que gestiona el arranque del tel¨¦fono. Eso le permite formatearlo. Entonces cambi¨® el sistema operativo por LineageOS, basado en el c¨®digo Android de Google pero con variaciones. Google deja as¨ª de controlar todo lo que pasa por el tel¨¦fono.
Pero las apps m¨¢s normales no funcionan bien sin su sistema operativo. Se cuelgan a menudo. Para evitarlo, instal¨® una implementaci¨®n libre de los servicios de Google, llamada MicroG. Es como a?adir un coj¨ªn extra para que las apps del entorno est¨¦n a gusto y no se quejen de la ausencia de su base normal.
Las aplicaciones. Si no hay servicios de Google, tampoco hay Google Play, el lugar para descargar aplicaciones. ?C¨®mo descargarlas entonces? Adolfo usa la Yalp Store: "Yalp provee de emails an¨®nimos para que descargues las apps de la Play Store y evites tener que loguearte con tu cuenta", subraya. "Es el Google Play de los?gorritos de aluminio", bromea sobre Yalp.
Adem¨¢s de las apps de la Play Store, hay montones de aplicaciones libres. Esas se descargan desde F-Droid, que es un repositorio de aplicaciones solo de c¨®digo abierto. "Ah¨ª no entra nada de Google", dice Adolfo. Muchas de hecho sirven para sustituir el ecosistema de Google.
En el mundo paralelo de los preocupados por la privacidad siempre hay otra 'app' que hace lo mismo que la oficial
En el mundo paralelo de los preocupados por la privacidad siempre hay otra app que hace lo mismo que la oficial. El resultado de este esfuerzo es que la pantalla principal del Xiaomi de Adolfo es distinta. "Las aplicaciones que uso a diario son K-9 Mail (para el correo electr¨®nico, junto a OpenKeychain para cifrarlo), Slide (para Reddit, una web de foros), un Telegram de c¨®digo abierto, Tusky (para Mastodon, que es un Twitter abierto) y Nextcloud", que se vincula con su nube privada, cuyos servidores est¨¢n en casa de un amigo. Adolfo no tiene por supuesto nada en nubes p¨²blicas.
El correo electr¨®nico. La cuenta de correo principal de Adolfo es de Gmail y no Protonmail, el mail preferido por interesados en privacidad. ?Por qu¨¦ prefiere Gmail? Uno, porque ofrece gratis 15 gigas en la bandeja de entrada y Prontonmail solo 500 megas. Dos, porque Protonmail "es un producto comercial y no tenemos por qu¨¦ fiarnos al 100%, su infraestructura es decente pero tiene agujeritos", advierte Adolfo. Este es el problema final de este mundo: toda soluci¨®n tiene "agujeritos".
Adolfo tiene por tanto una cuenta de Gmail, pero no usa la app de Gmail. Se conecta al correo a trav¨¦s de otra aplicaci¨®n con la que puede encriptar los mensajes importantes con amigos que tambi¨¦n encriptan. As¨ª hablan en secreto en las narices de Google: aunque Google guarde sus correos en abierto, los correos encriptados son ilegibles sin la clave de desencriptaci¨®n.
Google tampoco tiene los contactos de Adolfo: "No estoy conforme con que Google sepa con qui¨¦n hablo". Guarda sus contactos en un servidor ¡ªun disco duro¡ª en su casa. Cuando cambia el m¨®vil sincroniza los contactos de nuevo.
El GPS. Otro dolor de cabeza. A Adolfo le gusta la app de Google: "Funciona muy bien. Tiene una cartograf¨ªa buena, una respuesta r¨¢pida al buscar direcciones, busca por tiendas, da distintas rutas, no necesitas estar logueado. Lo que s¨ª te pide es que cuando la uses le pongas el GPS", explica.
Ah¨ª empiezan los problemas. Adolfo evita el GPS de serie y tiene activados en cambio "tres servicios de localizaci¨®n". El problema es su lentitud: "Con Waze una app de tr¨¢fico he estado a veces hasta media hora dentro del coche para poder empezar a moverme. El coche arrancado, la m¨²sica funcionando y nada. Solo para que me posicionara porque si no no funciona bien", dice. Dej¨® de usar Waze.
Adolfo sabe que de alg¨²n modo Google rastrea su uso de la app de mapas: "Te identifican de alguna manera con un identificador. Si es un identificador peque?o frente a mi cuenta entera, con todo el registro donde yo he estado, es un precio que puedo pagar. Tampoco lo uso mucho", dice.
Las redes sociales. No tiene. Solo LinkedIn y porque no hay m¨¢s remedio. Su ¨²nica cautela es que la tiene vinculada a otra cuenta de Gmail, para trabajo, no a la personal.
Usaba Twitter, Facebook e Instagram y ha abandonado las tres. A pesar de que usaba mucho Twitter y le gustaba Instagram. Usa Youtube, pero en el m¨®vil emplea otra app para ver los v¨ªdeos: Newpipe. "Baja el v¨ªdeo y lo reproduce pero sin cuenta de Google", dice.
El vocabulario que usa Adolfo para describir Mastodon es casi
de rebeldes pol¨ªticos
Hay otra red nueva que s¨ª usa: Mastodon. El vocabulario que usa Adolfo para describirlo es casi de rebeldes pol¨ªticos: "Mastodon es Twitter, pero federado. ?Qu¨¦ quiere decir? Que puede haber un n¨²mero ilimitado de instancias, es decir, no es una red centralizada. Se mantiene gracias a la generosidad de la gente y es software libre", explica.
Twitter es como un edificio donde todos entramos a tuitear y ver tuits y la empresa lo controla. En Mastodon cada cual tuitea desde su edificio y nos seguimos y nos vemos sin estar todos concentrados. Una entidad no lo controla todo.
El buscador. Solo DuckDuckGo, la alternativa privada a Google. "Pese a que no hay motivos reales, me f¨ªo en un 99% de ellos", dice Adolfo. "Siempre es bueno dejar un margen por si acaso sucede algo que me haga desconfiar de ellos".
El navegador. Fennec, una modificaci¨®n de Firefox sin rastreadores. ?Por qu¨¦ no Tor, el t¨ªpico navegador privado? Tiene cosas buenas: "En cierto modo, te anonimiza en internet, lo que mejora la privacidad considerablemente". Pero siempre hay objeciones y suspicacias: "En su inicio, fue un invento estadounidense para la marina. Aunque ahora es un proyecto abierto, el c¨®digo original est¨¢ ah¨ª y parte de su financiaci¨®n proviene del Gobierno de EE UU", explica.
La mensajer¨ªa. Tiene WhatsApp y Telegram. Lleva usando WhatsApp desde hace ocho o nueve a?os. "Solo le dejo acceso a mis contactos para ver qui¨¦n es cada cual y con el m¨ªnimo de personas posible. Tambi¨¦n lo usamos cuando se cae Telegram, que es mi mensajer¨ªa de prop¨®sito general", explica.
El gran problema de esta batalla no es solo la complejidad. Adolfo admite que hay cosas que le gustar¨ªa hacer y no hace porque no dan garant¨ªas.
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