25 a?os del d¨ªa que Bill Gates se subi¨® a la ola de Internet
El l¨ªder de Microsoft envi¨® un memor¨¢ndum interno en el que alert¨® a su compa?¨ªa de que el futuro pasaba por la red, que describ¨ªa como ¡°crucial para cada parte del negocio¡±
En 1995 Bill Gates era, seg¨²n Forbes, el hombre m¨¢s rico del mundo, con una fortuna de 12.000 millones. A sus 39 a?os era adem¨¢s el m¨¢s joven entre los diez primeros de la lista. Considerado el rey del software, ordenadores de todo el mundo llevaban ya los programas de Microsoft, la compa?¨ªa que hab¨ªa fundado y de la que era el principal cerebro. Incluso se hab¨ªa permitido comprar por 30 millones de d¨®lares unos manuscritos de Leonardo da Vinci. Pero desde la cresta de esa ola, Gates se daba cuenta de que llegaba una mucho mayor, la de Internet, y de que solo quien la dominara controlar¨ªa el negocio en las siguientes d¨¦cadas.
El 26 de mayo de 1995, hace hoy 25 a?os, Gates abri¨® su coraz¨®n y su empresa a las promesas de ese tsunami. Lo hizo a trav¨¦s de un memorando de nueve p¨¢ginas dirigido a los directivos de la compa?¨ªa que se titulaba precisamente El maremoto de Internet. Muchas de sus expresiones ponen en evidencia el cuarto de siglo transcurrido. ¡°?Haz doble clic en ellos para abrirlos online!¡±, suger¨ªa el documento para explicar el funcionamiento de los hiperv¨ªnculos. Pero en general era el escrito de un visionario a quien el tiempo dio en muchas cosas la raz¨®n. Un llamamiento a concentrar todos los esfuerzos de la compa?¨ªa en la red que Gates describ¨ªa como ¡°crucial para cada parte del negocio¡±.
¡°Lleg¨® un poco tarde, pero igual por seis meses. En 1995 se dio cuenta de que hab¨ªa que ponerse las pilas y empezar a correr. De hecho, acierta bastante en el diagn¨®stico que hace. Al fin y al cabo, a Gates se le pueden criticar muchas cosas de las que hizo durante los 90, pero que es un genio es bastante indiscutible¡±, se?ala C¨¦sar C¨®rcoles, director de posgrado de Desarrollo de Aplicaciones Web de la UOC.
¡°Hasta el mercado de CD-ROMs se ver¨¢ dram¨¢ticamente afectado por Internet¡±, adivinaba Gates. Tambi¨¦n dibujaba el boceto de lo que hoy llamamos smartphone. ¡°Una posibilidad temible que est¨¢n discutiendo los fans de Internet es si deber¨ªan unirse para crear algo menos caro que un PC y que tenga suficiente potencia para navegar la web¡±, advert¨ªa. ?El modelo publicitario que hoy permite monetizar la web? Tambi¨¦n lo ten¨ªa en mente: ¡°Creo que Internet se convertir¨¢ en nuestro veh¨ªculo promocional m¨¢s importante. Incluir links a nuestras p¨¢ginas ser¨¢ una buena manera de gastar d¨®lares de publicidad¡±. No se le escaparon ni las videollamadas. Aunque reconoci¨® que la tecnolog¨ªa del momento solo permit¨ªa comunicaciones muy entrecortadas -incluso en intercambios de audio-, se mostr¨® convencido de que la velocidad creciente de Internet acabar¨ªa por consolidar estas comunicaciones y abrir¨ªa la puerta a la reproducci¨®n de v¨ªdeo en tiempo real (streaming).
En agosto del mismo a?o la compa?¨ªa cumpli¨® la promesa anunciada en el memorando y lanz¨® su navegador para competir con el entonces dominante Netscape. En 1998, un informe de la International Data Corporation (IDC) certificaba la primera victoria de Microsoft: hab¨ªa conquistado un 48,3% del mercado frente al 41,5% de su rival. Con los a?os, Netscape se fue desvaneciendo, mientras Internet Explorer crec¨ªa hasta concentrar un 95% de los usuarios. De las cenizas del navegador pionero resurgi¨® Mozilla Firefox, un proyecto de c¨®digo abierto que contin¨²a siendo estandarte del Internet abierto.
En 2015, arrinconado por Mozilla y Google, y sin presencia en los sistemas operativos de Android e iOS, Microsoft anunci¨® el fin de Internet Explorer y el nacimiento de Edge, que hoy tiene una cuota de mercado del 4,6%. ¡°Ahora tienen un navegador que ellos controlan, de c¨®digo abierto, que se integra bien con los est¨¢ndares web y que pueden utilizar en toda su estrategia. El objetivo no es ganar; es estar en la partida de manera razonable¡±, explica C¨®rcoles.
Freno al monopolio
La tensi¨®n entre aquella primera generaci¨®n de gigantes de la red explot¨® en 1998, con el caso de EE UU contra Microsoft, en el que se acusaba a la compa?¨ªa de abusar de su poder monopolista, fundamentado sobre el amplio dominio de su sistema operativo y su navegador web. La batalla se alarg¨® hasta 2002, y concluy¨® con el compromiso de la empresa de desvelar partes del c¨®digo de Windows y permitir a los fabricantes modificar los programas incluidos por defecto en el sistema operativo. ¡°Esto est¨¢ relacionado con la cultura y el modelo de negocio. La tecnolog¨ªa de Microsoft no pod¨ªa competir con la solidez de Linux, pero ten¨ªan el mercado de empresas relativamente cautivo. Hasta que vieron las orejas al lobo¡±, explica Guillermo de Haro, doctor en Econom¨ªa.
En sus etapas m¨¢s recientes, la empresa ha iniciado un proceso de redenci¨®n que toc¨® techo hace un par de semanas, con las declaraciones de Brad Smith, actual presidente de la compa?¨ªa, en un evento del MIT: ¡°Microsoft estaba en el lado equivocado de la historia cuando el c¨®digo abierto explot¨® a principios de siglo, y puedo hablar de ello personalmente¡±. Para De Haro, es una transici¨®n razonable que ya sigui¨® Steve Jobs, inicialmente reacio, cuando acept¨® abrir las APIs de la tienda de Apple para que otros programadores crearan productos. ¡°Cuando tienes una comunidad tan grande trabajando puedes crecer mucho m¨¢s r¨¢pido y de manera m¨¢s s¨®lida. Y si tus competidores lo adoptan y no te adaptas puedes desaparecer¡±.
¡°Microsoft no era la compa?¨ªa m¨¢s innovadora del mundo, pero era una m¨¢quina de vender. No desarrollaron desde cero sus innovaciones, compraron, adaptaron o se inspiraron en otros¡±, asegura De Haro. El experto subraya que un cuarto de siglo despu¨¦s, la compa?¨ªa de Gates ¡°sigue en el top mundial, cuando otros gigantes han ido quedando por el camino, como Sun Microsystems o Nokia¡±. ¡°Gates es un visionario. Igual que vio que en el futuro todos tendr¨ªamos un ordenador personal en casa, pudo ver que todos terminar¨ªamos conectados. F¨ªjate si lo es que en 2015 ya hablaba de una posible pandemia por un virus¡±, concluye.
G¨¦nesis del hombre de negocios
Guillermo de Haro, doctor en Econom¨ªa, destaca lo acertado del an¨¢lisis de la competencia que Gates hace en su memorando. "Combina el entendimiento de la tecnolog¨ªa con el conocimiento del negocio", se?ala. Esta ¨²ltima parte de la mezcla no es casual, explica el doctor en Econom¨ªa, puesto que su madre era miembro de la junta directora de la Universidad de Washington, directora del First Interstate Bank y consejera de empresas de radio, telecomunicaciones y seguros.
"Bill estaba muy unido a ella, as¨ª que no solo era un programador fan¨¢tico de las computadoras. Su madre le proporcion¨® una visi¨®n del mundo de los negocios excepcional. De hecho, el contacto con IBM, clave en el ¨¦xito inicial de Microsoft, se realiza gracias a ella. Una mujer visionaria para educar un genio visionario", sentencia el experto.
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