James Manyika (Google): ¡°La inteligencia artificial cambiar¨¢ el mundo, como las computadoras o la electricidad¡±
El vicepresidente de la compa?¨ªa, encargado de la investigaci¨®n de la IA, alerta de la importancia de regularla y descarta que pausar su desarrollo sea una opci¨®n v¨¢lida
James Manyika (57 a?os, Harare, Zimbabue) asegura que la inteligencia artificial (IA) nos rodea hace d¨¦cadas, solo que la gente a¨²n no se hab¨ªa dado cuenta. ?l ya trabajaba en este campo mucho antes de convertirse en el vicepresidente de las ¨¢reas de Investigaci¨®n, Tecnolog¨ªa y Sociedad de Google, cargo que desempe?a desde hace un a?o. En ese tiempo, la inteligencia artificial ha saltado desde a las escenas apocal¨ªpticas de las pel¨ªculas de ciencia ficci¨®n a primera plana de la actualidad mundial. ¡°Hace 25 a?os, cuando hice mi doctorado en rob¨®tica, nadie entend¨ªa de que est¨¢bamos hablando. La gente sigue sin darse cuenta de que desde mucho antes de la llegada de los chatbots, ya se estaban beneficiando de la inteligencia artificial¡±, explica a EL PA?S en Madrid, donde particip¨® el pasado jueves en un evento de Google en el Museo L¨¢zaro Galdiano.
Manyika insiste en que esta revoluci¨®n se hab¨ªa venido gestando sobre todo durante los ¨²ltimos 15 a?os, aunque reconoce que ha sido en los ¨²ltimos meses cuando la irrupci¨®n de la inteligencia artificial se ha acelerado, tras el lanzamiento de ChatGPT, el chatbot de IA generativa de OpenAI. Desde el pasado febrero, tambi¨¦n Google cuenta con su propia aplicaci¨®n de esta categor¨ªa, Bard, que a¨²n no se puede utilizar en Espa?a. ¡°Llegar¨¢ pronto¡±, garantiza Manyika. ¡°Hay mucho trabajo que hacer porque el espa?ol es una lengua compleja, con muchas variantes. Queremos hacerlo bien porque es un asunto muy importante¡±.
Pregunta. ?Es posible que est¨¦n sobrestimando la importancia de la inteligencia artificial?
Respuesta. No, no creo. Le estamos dando importancia porque es un cambio tan profundo a que afectar¨¢ a casi todo lo que hacemos. La econom¨ªa, la productividad, c¨®mo concebimos la informaci¨®n y el aprendizaje. Para m¨ª, la pregunta es c¨®mo conseguir las dos caras de la moneda: asegurarnos de que sea ¨²til para la sociedad y, al mismo, tiempo ser capaces de abordar los desaf¨ªos que se nos presentan.
P. ?Cambiar¨¢ el mundo?
R. Creo que s¨ª. Lo que encuentro tan cr¨ªtico acerca de la IA es que ser¨¢ como las computadoras o la electricidad. Es una tecnolog¨ªa esencial: no puedo imaginar una actividad ni una parte de la sociedad en las que no vaya a ser ¨²til. En ese sentido, pienso que cambiar¨¢ al mundo. Al mismo tiempo, creo que es tan poderosa y tan ¨²til que tambi¨¦n traer¨¢ consecuencias, riesgos y desaf¨ªos muy importantes, con los que tenemos que lidiar.
M¨¢s de dos tercios de los trabajos ser¨¢n diferentes. No desaparecer¨¢n, simplemente evolucionar¨¢n y cambiar¨¢n
P. ?A qu¨¦ se refiere cuando habla de riesgos?
R. Por un lado, est¨¢n los riesgos que se dan cuando la tecnolog¨ªa en s¨ª no funciona como queremos que lo haga, cuando resulta imprecisa o err¨®nea. Otros tipos de riesgos son los que tienen a que ver con la privacidad y con el manejo de las informaciones. Y adem¨¢s, incluso cuando esos dos aspectos funcionan bien, es posible hacer un mal uso de esta tecnolog¨ªa. Puede usarse con fines criminales, para la desinformaci¨®n o para crear amenazas a la seguridad nacional. Tambi¨¦n hay una cuarta complicaci¨®n, que tiene que ver con los efectos secundarios, como el impacto que la IA puede tener en los puestos de trabajo, en la salud mental y en otros factores socioecon¨®micos a los que deber¨ªamos prestar atenci¨®n.
P. De hecho, ya hay personas perdiendo su trabajo a causa de la IA¡
R. Hay trabajos en los que las m¨¢quinas pueden desempe?ar algunas tareas que ahora hacen las personas; y en ellos habr¨¢ p¨¦rdidas, es cierto. Tambi¨¦n se crear¨¢n puestos de trabajo, tanto por el aumento de la productividad como por la creaci¨®n de nuevas categor¨ªas. Pero creo que el efecto m¨¢s grande, y esto es lo que todos los an¨¢lisis parecen indicar ahora, es que los trabajos est¨¢n destinados a cambiar. Hay que pensar en los cajeros de los bancos, que en los a?os 70 del siglo pasado pasaban el 90% de su tiempo contando dinero, mientras ahora pasan menos del 10% de su tiempo con esta tarea. Nuestros datos sugieren que m¨¢s de dos tercios de los trabajos ser¨¢n diferentes. No desaparecer¨¢n, simplemente evolucionar¨¢n y cambiar¨¢n.
P. ?Hay que tenerle miedo a la IA?
R. No, pero deber¨ªamos tener cuidado en c¨®mo la usamos. La inteligencia artificial no es algo de los ¨²ltimos meses, vivimos con ella desde hace a?os. Si miras hacia atr¨¢s en su historia te dar¨¢s cuenta de que en cuanto alguna de sus aplicaciones se vuelve ¨²til, dejamos de llamarla IA; pero mantenemos el t¨¦rmino para las cosas que est¨¢n por venir o las cosas que nos asustan. No estoy diciendo que no debamos preocuparnos. Pero tambi¨¦n deber¨ªamos recordar todas las formas en las que ya la utilizamos y nos es muy ¨²til.
P. Geoffrey Hinton dej¨® Google justamente para alertar sobre los riesgos de esta tecnolog¨ªa.
R. Conozco bien a Jeff. Creo que lo que intentaba hacer, y lo que muchos de nosotros hemos estado intentando hacer, es resaltar que deber¨ªamos adoptar un enfoque preventivo. Porque s¨ª, los beneficios son incre¨ªblemente ¨²tiles, pero tambi¨¦n hay preocupaciones que debemos tener en cuenta. Creo que quiso recordarnos a todos los riesgos que conlleva, especialmente a medida que se vuelve m¨¢s avanzada. Y pienso que ese enfoque es apropiado.
P. ?Por qu¨¦ hay tantos manifiestos apocal¨ªpticos firmados por los padres de la IA?
R. Yo mismo firm¨¦ una de estas cartas, porque considero fundamental asegurarnos de que se est¨¦ prestando la debida atenci¨®n. Cada vez que tenemos una tecnolog¨ªa poderosa, hay que pensar tanto en sus beneficios como en los riesgos reales. En Google queremos ser audaces y responsables. S¨¦ que esas dos cosas suenan contradictorias pero ambas importan.
P. ?Regular la IA es una forma de ser responsable?
R. S¨ª. Estas tecnolog¨ªas son demasiado importantes como para no ser reguladas. Hace tiempo que lo estamos diciendo p¨²blicamente. Cualquier tecnolog¨ªa poderosa que sea tan rompedora y compleja lo necesita, incluso si es tan ¨²til como esta. Si est¨¢ afectando a la vida de las personas y a la sociedad, tiene que haber alguna forma de regulaci¨®n.
P. Hay quien pide pausar su desarrollo hasta que se regule.
R. Estar¨ªamos pausando los beneficios de esta tecnolog¨ªa para las personas. ?De verdad queremos dejar de enviar alertas de inundaciones a los millones de personas que las reciben hoy en d¨ªa? ?Dejar de trabajar en avances en medicina? No creo. Tendr¨ªa que haber un plan claro sobre qu¨¦ estar¨ªamos haciendo durante esa pausa y habr¨ªa que coordinar a todos los que est¨¢n trabajando en el desarrollo de la IA. Lo que considero que es importante es asegurarnos de estar en conversaci¨®n con los gobiernos, para averiguar qu¨¦ queremos hacer y como lo queremos hacer.
P. ?Hay alg¨²n sector donde es peligroso aplicar la IA?
R. No pienso tanto en sectores concretos, sino en el uso que se le da. Una tecnolog¨ªa aplicada en medicina es diferente a la misma tecnolog¨ªa aplicada en el sector del transporte. Los riesgos son diferentes. Estoy de acuerdo en que es necesario reflexionar en c¨®mo se aplica esta tecnolog¨ªa en cada caso. Por ejemplo, por mucho que me guste lo que hacemos con Bard, creo que es una idea terrible pedirle asesoramiento legal. Ahora, si me pregunta si se deber¨ªa usar Bard para escribir un ensayo y explorar ideas, mi respuesta es por supuesto.
P. ?Es una buena idea pedirle ayuda si estamos enfermos?
R. Yo no obtendr¨ªa un diagn¨®stico m¨¦dico de un chatbot. En general, si quisiera obtener informaci¨®n factual, ir¨ªa al buscador de Google. Si quiero saber qu¨¦ pas¨® en Madrid esta ma?ana, tampoco utilizar¨ªa Bard para eso.
P. ?Cree que los chatbots de IA (como Bard o ChatGPT) pueden llegar a remplazar a los buscadores?
R. No s¨¦ qu¨¦ est¨¢n haciendo otras compa?¨ªas, pero puedo decirle lo que estamos haciendo nosotros. Para nosotros Bard no es lo mismo que Google Search [el cl¨¢sico buscador de la empresa]. S¨ª que hay formas en las que estamos incorporando IA y los grandes modelos de lenguaje a Search, pero son dos casos muy diferentes. Lanzamos Bard como un experimento: estamos tratando de entender por qu¨¦ la gente lo est¨¢ utilizando, para qu¨¦ es ¨²til. Y todav¨ªa estamos aprendiendo. Es importante tener en cuenta que hemos estado utilizando la inteligencia artificial para mejorar la b¨²squeda durante mucho m¨¢s tiempo del que la gente cree. Hace seis a?os, cuando intentabas usar el buscador, probablemente ten¨ªas que escribir una consulta bastante precisa para que te devolviera algo ¨²til. Hoy ya no tienes que hacerlo. Con escribir algo que sea m¨¢s o menos correcto es suficiente.
P. ?C¨®mo cree que ser¨¢ el escenario en 10 a?os?
R. Creo que ser¨¢ asombroso. Pienso en todas las cosas que podr¨¢n beneficiar a la sociedad, por ejemplo la posibilidad de entender miles de idiomas, y me emociona. Ahora mismo nos hemos puesto como objetivo conseguir traducir 2.000 idiomas en Google, pero en diez a?os pienso que podemos llegar a todas las 7.000 lenguas que se hablan en el mundo, incluso a idiomas que est¨¢n desapareciendo. Ser¨ªa extraordinario. Pero, al mismo tiempo, espero que tambi¨¦n hayamos logrado progresos incre¨ªbles a la hora de combatir todos los riesgos de los que hemos hablado.
Parte del miedo que le tenemos a la IA viene de la incapacidad de aceptar que las m¨¢quinas tambi¨¦n pueden hacer cosas creativas
P. ?Qu¨¦ deber¨ªa pasar para que la IA se escape de nuestro control?
R. Que de alguna forma lleguemos a desarrollar sistemas que se dise?an por s¨ª mismos y que sean capaces de crear sus propios objetivos. Eso ser¨ªa problem¨¢tico, pero estamos a a?os luz de ello. Esa ser¨ªa la versi¨®n de ciencia ficci¨®n. Una situaci¨®n m¨¢s probable y problem¨¢tica no tendr¨ªa tanto que ver con la inteligencia artificial fuera de control, sino con las mismas personas. El peligro es que los humanos pongan estas tecnolog¨ªas al servicio de usos horribles. Sabemos que el mismo sistema que puede descifrar estructuras de prote¨ªnas para desarrollar medicamentos tambi¨¦n podr¨ªa dise?ar toxinas o virus si cae en manos equivocadas. Esto es lo que realmente me preocupa a corto plazo.
P. ?De d¨®nde viene entonces el miedo a la inteligencia artificial?
R. [R¨ªe] De las pel¨ªculas de Hollywood. Lo digo en broma, pero tambi¨¦n creo que es cierto. Vuelvo a lo que he dicho antes, a la idea de que cuando esta tecnolog¨ªa empieza a ser ¨²til, simplemente dejamos de llamarla IA. Parece que reservamos esta etiqueta para cosas que vemos en las pel¨ªculas o cosas que a¨²n no entendemos o est¨¢n a punto de suceder. Por otro lado, creo que parte de ese miedo se remonta a un factor muy humano, que es una pregunta que la humanidad se hace desde siempre. ?Qu¨¦ significa ser humano cuando las m¨¢quinas consiguen hacer las cosas que hasta ahora nos diferenciaban de cualquier otro ser vivo? Hasta ahora pens¨¢bamos que ¨¦ramos los ¨²nicos capaces de hacer arte, los ¨²nicos en tener creatividad y empat¨ªa. Pienso que parte de ese miedo viene de la incapacidad de aceptar que las m¨¢quinas tambi¨¦n pueden hacer cosas creativas, que hasta ahora se consideraban exclusivas de los humanos.
P. ?Podr¨ªamos decir que lo que nos asusta es que las m¨¢quinas puedan hacer algo mejor que nosotros?
R. Tenemos que enfrentarnos a ese miedo. Tenemos que ajustar nuestra forma de pensar y preguntarnos qui¨¦nes somos y en qu¨¦ somos buenos. Hubo un tiempo en que sol¨ªamos suponer que solo las personas que pod¨ªan hacer matem¨¢ticas en su cabeza eran inteligentes. Que si en un examen no pod¨ªas recitar de memoria cosas que hab¨ªas aprendido en un libro de texto, probablemente no eras muy inteligente. Sol¨ªamos pensar todo esto, pero ahora hemos avanzado, y creo que lo mismo suceder¨¢ con la IA. Es solo que quiz¨¢s est¨¢ sucediendo m¨¢s r¨¢pido de lo que los humanos estamos preparados para asimilar. Pero creo que la humanidad siempre se ha adaptado y que seguir¨¢ haci¨¦ndolo.
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