Disney quiere ser la ¨²nica

En el futuro que retrata la novela El atlas de las nubes, todas las pel¨ªculas se llaman disneys y las salas de cine, disneyariums. Para 2021, el cine y la televisi¨®n no habr¨¢n pasado a ser exclusivo de Disney. Todav¨ªa. Pero la compa?¨ªa dirigida por Bob Chapek parece querer lograr algo que suena igual de dist¨®pico: transformar a su audiencia en verdaderos creyentes que solo tengan tiempo para ver lo que salga de sus oficinas directo a su plataforma digital, Disney+.

No ha sido un buen 2020 para una de las mayores empresas del mundo. Vale, tampoco lo ha sido para el bar de la esquina o para Zara. Aunque el golpe a los parques de atracciones y cruceros Disney, sin fecha de regreso, se har¨¢ notar durante varios ejercicios financieros. La compa?¨ªa, que hab¨ªa logrado copar un tercio de la cuota de mercado cinematogr¨¢fica, no ha podido tampoco lanzar en salas sus grandes estrenos. Pero, pese a los miles de despidos y una profunda reestructuraci¨®n de cada rama, la pandemia ha tenido un efecto colateral positivo. En noviembre de 2019 desembarcaron en el streaming. Y la covid hizo que esa decisi¨®n, aparentemente tard¨ªa, fuera ideal. En diciembre de 2020, y como dijo Leia de Obi Wan en La guerra de las galaxias, en ¨¦l reside su ¨²nica esperanza. As¨ª lo hicieron entender la semana pasada a sus inversores.

En un a?o, la plataforma de entretenimiento en casa ha alcanzado casi los 87 millones de suscriptores, muy por encima de lo estimado, aunque por debajo de los 150 millones de Amazon Prime Video y los 195 de Netflix. Hoy predicen que para 2024 alcanzar¨¢n los 350 millones. Disney no busca acercarse, quiere ser la primera y ¨²nica. ?C¨®mo? Explotando lo que nadie m¨¢s puede aprovechar: sus populares marcas. Convertir todo en franquicia, y confeccionar al gusto lo que sabe que buscan sus fan¨¢ticos. Una y otra vez.

La falta de originales era una asignatura pendiente en Disney+, m¨¢s centrada en familias y en esos ni?os adictos a repetir sus pel¨ªculas favoritas. La presentaci¨®n hizo que esto dejara de ser un problema, al anunciar que estrenar¨¢ 100 t¨ªtulos al a?o, as¨ª como planes de 10 series de Star Wars y una treintena de t¨ªtulos de Disney y Pixar. Tras Bruja escarlata y Visi¨®n en enero, en 2021 debutar¨¢n adem¨¢s otras cinco series con superh¨¦roes Marvel. Los aficionados no tendr¨¢n mes sin episodios. Para dar contexto; en los 12 a?os desde Iron Man, el sello ha estrenado 22 pel¨ªculas. Solo el viernes, Marvel adelant¨® 24 proyectos.

Esto se complementar¨¢ desde el 23 de febrero con el desembarco del contenido no familiar a la plataforma en Europa. El precio de Disney+ subir¨¢ dos euros, hasta 8,99, para cubrir una de las necesidades reclamadas desde su lanzamiento. El sello Star ser¨¢ espacio del cat¨¢logo adulto de Fox (tristemente el nombre de la cl¨¢sica major ha sido borrada para que no se confunda con Fox News), Searchlight y las televisivas ABC, Hulu y FX. Entre los t¨ªtulos que destacaron: La jungla de cristal, Modern Family, Bob¡¯s Burguer, It¡¯s Always Sunny in Philadelphia, Kingsman, Anatom¨ªa de Grey, Buffy, Homeland, 24, La favorita, Terminator, The Shield y Padre de familia. Incluso producir¨¢n una serie de Alien, creada por Noah Hawley (Fargo). Todo eso tambi¨¦n es Disney.

Los n¨²meros son mareantes. Disney se asemeja con este anuncio a una editorial de c¨®mics de superh¨¦roes. Donde, si alguno de sus personajes tiene un m¨ªnimo de seguidores, recibir¨¢ su serie o pel¨ªcula: Falcon y el Soldado de invierno, Ojo de halc¨®n, Loki¡­ Del cerdo se aprovechan hasta los andares. Lo mismo es aplicable a Star Wars, que ha encajado las series como otra pieza de un universo que lleva en expansi¨®n con libros y tebeos desde los setenta. Tendr¨¢n serie la jedi Ahsoka, Obi Wan Kenobi o Lando. La maniobra, claro, no habla por s¨ª misma de la calidad intr¨ªnseca de cada proyecto, motivo de un an¨¢lisis diferente. The Mandalorian, por ejemplo, ha resultado ser un entretenimiento digno, sin importar el objetivo de vender mu?ecos, y alguna serie Marvel se presenta de lo m¨¢s rompedor de su universo.

Al fin y al cabo, el rat¨®n Mickey tiene queso de sobra para fichar a algunos de los mejores de Hollywood. La muestra es que una secuela de El rey le¨®n se vuelve intrigante al saber que la dirigir¨¢ Barry Jenkins, responsable de Moonlight. Esa misma estrategia se replicar¨¢ en la serie precuela de La bella y la bestia, Sister Act 3, la revisi¨®n de Tres hombres y un beb¨¦, la serie del perro de Up, los nuevos Chip y Chop, la epopeya gal¨¢ctica de Buzz Lightyear, la secuela de Willow o la quinta de Indiana Jones. Todo es susceptible a ser una franquicia infinita. Todos ser¨¢n originales Disney (nunca una palabra fue tomada tan a la ligera).

?Entonces d¨®nde deja esto a las salas? Nunca la diferencia entre el cine y la tele estuvo tan desdibujada como en 2020. Durante la presentaci¨®n parec¨ªa hacerse un esfuerzo para no aclarar qu¨¦ pel¨ªculas ir¨ªa a cines y cu¨¢l se ver¨ªa en casa, salvo en el caso de Marvel, cuyos filmes se anunciaron sin ambages para salas, empezando por Viuda negra. Disney, de momento, no ha sido tan rupturista como Warner. Tiene suficiente contenido serializado para llenar las arcas, y sabe que para que los taquillazos den beneficios deben pasar por la experiencia colectiva. Si bien es verdad que dejaron sospechosamente fuera de la charla producciones de Fox adultas con un presupuesto menor. Quiz¨¢s porque esa marca no triunfa en Bolsa. Quiz¨¢s porque la ventana no est¨¢ a¨²n clara. O quiz¨¢s porque el pr¨®ximo paso de Disney sea comprar salas para crear una experiencia propia donde solo proyectar disneys.

Todas las fechas de estrenos y regresos, en el calendario de series de Quinta Temporada

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