¡®El rey le¨®n¡¯ y el ciclo sin fin de los cl¨¢sicos animados de Disney
Tras el ¨¦xito de ¡®Aladd¨ªn¡¯, la compa?¨ªa convierte los ¡®remakes¡¯ en acci¨®n real en su gran baza en taquilla
"No puedes superar a cerdos con m¨¢s cerdos". Eso respondi¨® en 1933 el magnate Walt Disney a quien ped¨ªa un segundo corto de Los tres cerditos. En 1991, en plena efervescencia de la animaci¨®n en su compa?¨ªa, el presidente Jeffrey Katzenberg respet¨® aquel deseo en un escrito de 28 p¨¢ginas al resto de directivos: "El p¨²blico no quiere ver lo que ya ha visto. (...) Nuestro trabajo no es reciclar ideas, sino crear y desarrollar historias". Sus secuelas ir¨ªan a v¨ªdeo. Aquella tabla de la ley es hoy papel mojado.
El ciclo sin fin comenz¨® el 15 de junio de 1994. Una gran fiesta en El Capit¨¢n de Hollywood daba por inaugurado el verano de El rey le¨®n. Aladd¨ªn se hab¨ªa convertido dos a?os antes en la pel¨ªcula m¨¢s taquillera de 1992, y la revitalizaci¨®n de los dibujos Disney que comenz¨® en La sirenita era un fen¨®meno global. El filme que se mostraba esa noche en Los ?ngeles iba a erigirse en el filme animado m¨¢s exitosa de la historia. Han pasado 25 a?os, y la misma historia vuelve a llenar los cines. Esta vez solo han pasado semanas desde el estreno de un nuevo Aladd¨ªn. Los cl¨¢sicos hoy nost¨¢lgicos de Disney renacen como filmes de acci¨®n real. El ¨¦xito comercial tambi¨¦n se replica.
El remake dirigido por Guy Ritchie del relato de Las mil y una noches acumula alrededor de 860 millones de euros. Es la pel¨ªcula sin superh¨¦roes m¨¢s taquillera del a?o. ?El truco? Apelar a la nostalgia de la generaci¨®n millennial repitiendo literalmente letra y m¨²sica. Dar al p¨²blico la f¨®rmula ganadora una y otra vez. Solo dos pel¨ªculas de esta hornada del Disney en carne y hueso superan a Aladd¨ªn en recaudaci¨®n: Alicia en el Pa¨ªs de las Maravillas (Tim Burton, 2010) y La Bella y la Bestia (Bill Condon, 2017).
Los analistas esperan, sin embargo, que la marca El rey le¨®n exceda todo. Incluso si en esos d¨ªas previos al solsticio de verano de 1994 algunos dudaban del ¨¦xito del cachorro shakesperiano llamado a ser rey. El riesgo era no adaptar directamente ning¨²n cuento, pero, para compensar, esta tragedia contaba con las pegadizas canciones de la estrella del pop Elton John (hoy reforzado con Pharrell y Beyonc¨¦) y una maquinaria de marketing bien engrasada impulsada por el director de Disney, Michael Eisner. No hab¨ªa precedentes. Burger King regalaba mu?ecos; Toys 'R' Us contaba con un expositor de la sabana; Mattel, Kodak, Nestl¨¦... hasta 186 licencias. Un analista de Wall Street se?al¨® que as¨ª ya era "la pel¨ªcula m¨¢s rentable de la historia", recuerda James R. Stewart en el libro DisneyWar. Aquellos experimentos son hoy el modelo.
En una escena en Dumbo (Tim Burton, 2019), un gran empresario mercantiliza al elefante vendiendo peluches como los que en la vida real exponen las tiendas Disney. La l¨®gica de estas reinvenciones nace ah¨ª. "Si no mantienes viva la propiedad intelectual antigua, no se recuerda", explica por correo electr¨®nico Jerry Beck, historiador estadounidense experto en animaci¨®n y antiguo directivo de Disney TV. "Cuando las nuevas generaciones van al parque y ven la atracci¨®n de Dumbo no lo conocen, ?c¨®mo lo hacen relevante?", agrega Beck. Tras estos remakes, los juguetes vuelven a circular.
El rey le¨®n sigue vigente tres d¨¦cadas despu¨¦s. Su musical, que debut¨® en Broadway en 1997, es el m¨¢s taquillero de la historia, y replic¨® el ¨¦xito sobre las tablas en una veintena de ciudades como Madrid, donde lleva ocho a?os llenando. Los analistas esperan que la versi¨®n de animaci¨®n fotorrealista, dirigida por Jon Favreau (El libro de la selva), supere los 200 millones de d¨®lares (178 millones de euros) en su estreno en EE UU. "Hay tantos lugares donde ver cine que el objetivo de Disney es llenar salas como sea, mientras refuerzan su propia marca", apunta Beck: "Pero hoy hay muchas otras compa?¨ªas con ideas originales: Netflix, Dreamworks...". Disney va sobre seguro tras los fracasos de franquicias no probadas como Un pliegue en el tiempo y El cascanueces y los cuatro reinos, a la espera de Artemis Fowl en 2020.
El argumento de Dumbo sirve, adem¨¢s, para entender otra de las se?as comerciales de estas reinvenciones. El elefante volador no era el ¨²nico protagonista de la pel¨ªcula. En busca de convencer a una audiencia diversa, lo acompa?aba una ni?a que quer¨ªa ser cient¨ªfica. Este mensaje acorde a los tiempos se traslad¨® a Aladd¨ªn. Jasm¨ªn, que ten¨ªa una flamante canci¨®n, a?oraba ser sultana, mientras el Genio estaba interpretada por la superestrella negra Will Smith. Pese al revuelo que caus¨® entre sectores machistas y racistas en Internet, no afect¨® a la recaudaci¨®n.
El rey le¨®n tambi¨¦n est¨¢ llena de voces negras, y en 2020 llegar¨¢ la adaptaci¨®n de la china Mul¨¢n, dirigida por Niki Caro, cuarta mujer en la historia en manejar un presupuesto de 100 millones de d¨®lares (90 millones de euros), y que recibe cr¨ªticas por huir de la adaptaci¨®n plano a plano, sin canciones y con personajes modificados. La sirenita de Rob Marshall (El regreso Mary Poppins), a su vez, se reencarna en la afroamericana Halle Baley, joven de 19 a?os a?os que ya es objeto de insultos e incluso de peticiones para blanquear Pocahontas, obviando que, al contrario que Ariel, la raza es la personalidad de la aborigen.
Hay material para a?os. Merl¨ªn, el encantador, de Juan Carlos Fresnadillo, aparecer¨¢ en la plataforma Disney+, junto a La dama y el vagabundo. Y en cine preparan Blancanieves, Cruella (con Emma Stone como villana de 101 Dalmatas), Pinocho, El jorobado de Notre Dame e incluso la moderna Lilo y Stitch. Una vez que comienzan a languidecer los cl¨¢sicos recordados, y tiren de Los rescatadores en Cangurolandia, el reto ser¨¢ triunfar gracias a secuelas con historias propias. La primera prueba ser¨¢ Mal¨¦fica: maestra del mal en octubre, con Angelina Jolie repitiendo su personaje de villana de La Bella Durmiente. Quiz¨¢s el fundador estaba equivocado. Quiz¨¢s el p¨²blico solo quer¨ªa ver cerdos (o leones) una y otra vez.
Los 'remakes' m¨¢s taquilleros de los cl¨¢sicos de Disney
- La Bella y la Bestia (Bill Condon, 2017): 1.122 millones de euros.
- Alicia en el Pa¨ªs de las maravillas (Tim Burton, 2010): 911 millones.
- Aladd¨ªn (Guy Ritchie, 2019): 860 millones (todav¨ªa en salas).
- El libro de la selva (Jon Favreau, 2016): 857 millones.
- Mal¨¦fica (Robert Stromberg, 2014): 673,88 millones.
- Cenicienta (Kenneth Branagh, 2015): 482,87 millones.
- Dumbo (Tim Burton, 2019): 312 millones.
- 101 D¨¢lmatas (John Hughes, 1996): 284,92 millones.
- Alicia a trav¨¦s del espejo (James Bobin, 2016): 266,09 millones.
- 102 D¨¢lmatas (Kevin Lima, 2000): 163,12 millones.
- Peter y el drag¨®n (David Lowery, 2016) 143,7 millones.
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