¡®Los amos del aire¡¯ mira al cielo para cerrar la trilog¨ªa de Steven Spielberg y Tom Hanks sobre la Segunda Guerra Mundial

En 2001, tres a?os despu¨¦s del estreno de Salvar al soldado Ryan, Steven Spielberg y Tom Hanks volvieron a la Segunda Guerra Mundial. Esta vez lo hicieron como productores, acompa?ados de Gary Goetzman y en la televisi¨®n. Hermanos de sangre se convirti¨® en un cl¨¢sico del g¨¦nero b¨¦lico a la que le sigui¨®, en 2010, The Pacific, ambas en HBO. Si la primera pon¨ªa el foco en la infanter¨ªa, la segunda se centraba en la marina. Ahora, aquel equipo que llev¨® al formato por cap¨ªtulos las historias de hermandad entre militares en la contienda que m¨¢s v¨ªctimas se ha cobrado completa su ¨¦pica trilog¨ªa televisiva dirigiendo la mirada al cielo.

Los amos del aire (los dos primeros episodios ya est¨¢n disponibles en Apple TV+, que estrena uno nuevo cada semana hasta completar los nueve de la miniserie) toma como punto de partida el libro hom¨®nimo de Donald L. Miller, adaptado para la televisi¨®n por el guionista John Orloff, quien hace 23 a?os estuvo en el equipo de escritores de Hermanos de sangre. Sus protagonistas son los hombres del 100? Grupo de Bombardeo de las fuerzas a¨¦reas estadounidenses. Antes de que ellos llegaran, los bombarderos brit¨¢nicos solo se atrev¨ªan con misiones nocturnas, m¨¢s seguras pero menos efectivas. Los estadounidenses corrieron m¨¢s riesgos con ataques diurnos, m¨¢s eficaces para alcanzar objetivos como redes ferroviarias, refiner¨ªas de petr¨®leo y suministros esenciales de la maquinaria nazi alemana. Tambi¨¦n sufrieron m¨¢s bajas: m¨¢s del 70% resultaron muertos, heridos o capturados.

Los actores Austin Butler y Callum Turner llevan la voz cantante del nutrido reparto. Ellos interpretan a dos de los hombres reales cuya historia refleja la serie, Gale Cleven y John Egan. A diferencia de otros combatientes, ellos son amigos desde hace a?os, y su relaci¨®n sirve de gu¨ªa al espectador por las misiones que deben acometer. ¡°Siempre me ha fascinado e intrigado este periodo y yo era un gran fan de Hermanos de sangre y The Pacific¡±, dice Austin Butler en una entrevista por videollamada. ¡°Cuando me lleg¨® la oportunidad, ni me lo pens¨¦¡±, cuenta el actor, nominado al Oscar en 2023 por Elvis. Callum Turner, sentado a su lado, describe como ¡°un honor haber podido interpretar a gente que cambi¨® el rumbo de la guerra y ayud¨® a salvar el mundo¡±. ¡°Recuerdo que cuando ten¨ªa 22 a?os y empec¨¦ con mi agente, siempre dec¨ªamos que ten¨ªamos que buscar algo como Hermanos de sangre. Muchos actores j¨®venes empezaron ah¨ª, Tom Hardy, Michael Fassbender, Andrew Scott¡­¡±, contin¨²a.

Sus personajes tienen personalidades opuestas. Frente al estoicismo, la serenidad y las pocas palabras de Gale Cleven (Buck para los amigos), John Egan (Bucky) es extrovertido, despreocupado y social. ¡°Una de las cosas que hemos aprendido es que sea cual sea tu tipo de personalidad, cuando est¨¢s en una guerra, se multiplica por 10. Si eres introvertido, ser¨¢s 10 veces m¨¢s introvertido. Si eres extrovertido, lo ser¨¢s 10 veces m¨¢s¡±, relata Turner. ¡°Lo m¨¢s importante cuando est¨¢s arriba en ese avi¨®n es proteger a aquellos que est¨¢n contigo. Esa hermandad es el coraz¨®n de todo. Pasamos mucho tiempo juntos para construir esa relaci¨®n¡±, a?ade Butler.

Como preparaci¨®n para sus papeles, los actores recibieron dos semanas de entrenamiento a las ¨®rdenes de Dale Dye, asesor t¨¦cnico y veterano de la Marina que, de nuevo, tambi¨¦n asesor¨® las otras dos producciones b¨¦licas. ¡°Fue un lujo porque pudimos conocernos y compartir fatigas. Aprendimos a aterrizar y despegar un avi¨®n, qu¨¦ significa y d¨®nde est¨¢ cada bot¨®n del panel de mandos de un avi¨®n, c¨®mo disparar, c¨®mo preparar bombas¡­ Adem¨¢s, nos dio el pegamento como tripulaci¨®n que nos ayud¨® a impulsar el rodaje. Fue una grabaci¨®n que dur¨® 10 meses, que es un mont¨®n, y esas semanas ayudaron a construir esa unidad y la conciencia de que ten¨ªamos un objetivo com¨²n¡±, describe Turner.

Los actores tambi¨¦n tomaron conciencia r¨¢pido de la magnitud de la carga emocional y el peso que dej¨® la guerra en los combatientes. ¡°Estamos hablando de una zona de guerra sin precedentes hasta ese momento, era el lugar m¨¢s violento del planeta. La p¨¦rdida con la que tuvieron que lidiar esos hombres fue inmensa. En la tercera misi¨®n de la serie, en ?frica, van 27 aviones y aterrizan solo 11. Imagina el peaje que deja eso en sus almas, sus cuerpos y sus mentes¡±, repasa Callum Turner. Mostrar las consecuencias y el da?o f¨ªsico y emocional en esos hombres de la guerra es uno de los objetivos principales de la serie.

Para recrear aquel infierno, los responsables de la producci¨®n quisieron la mayor autenticidad posible. Pusieron especial empe?o en la recreaci¨®n de los aviones B-17 que utilizaron entonces. Aunque todav¨ªa quedan algunas de esas aeronaves, no ten¨ªan las funcionalidades que necesitaban para un rodaje, por lo que decidieron construir sus propios B-17 desde cero. Dise?aron dos r¨¦plicas, una que pod¨ªa rodar por la pista y otra para ser remolcada. Su construcci¨®n les llev¨® ocho meses. De esta forma, los actores pudieron grabar dentro de una cabina id¨¦ntica a la del B-17 a trav¨¦s de cuyas ventanas ve¨ªan, en enormes pantallas leds, el resto de aeronaves o los ataques que recib¨ªan de la Flak, la defensa antia¨¦rea alemana. ¡°Fue una experiencia incre¨ªblemente inmersiva¡±, concuerdan los dos actores. Adem¨¢s, construyeron unos 80 edificios para recrear la base militar, desde los barracones donde dorm¨ªan, las cantinas donde com¨ªan o la capilla. ¡°Nos dieron un mapa para que nos orient¨¢ramos, as¨ª de grande era¡±, recuerda Callum Turner. ¡°Esa combinaci¨®n de tecnolog¨ªa y modo de hacer a la vieja usanza fue una experiencia muy especial. Gary Goeztman, Steven [Spierlberg] y Tom [Hanks] no dejaron ni una piedra sin remover para lograrlo¡±, completa el actor.

De los meses de grabaci¨®n, los actores destacan la complicaci¨®n de rodar en tiempos de pandemia. ¡°Siendo sincero, tuve m¨¢s presi¨®n por no contagiarme de covid que por cualquier otra cosa. E, inevitablemente, todos cogimos el covid en diferentes momentos¡±, recuerda Callum Turner. A pesar de eso, y de la responsabilidad que sent¨ªan por la historia que estaban contando, tambi¨¦n tuvieron momentos para el esparcimiento. ¡°Tuvimos una core¨®grafa que nos dio lecciones de baile. Lo hicimos durante el entrenamiento, donde tuvimos que volar un avi¨®n, bailar, cantar... Recibimos lecciones de todo. Hay varias secuencias con movimientos de baile que quedaron bastante bien, y esos d¨ªas fueron muy divertidos¡±, recuerda.

Puedes seguir EL PA?S Televisi¨®n en X o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal.