La pugna entre Harris y Trump por el voto en Pensilvania revive el debate por el ¡®fracking¡¯ en Estados Unidos

Durante el debate entre Kamala Harris y Donald Trump, el fracking ha vuelto a ponerse sobre la mesa. Preguntada sobre su cambio de opini¨®n al respecto, la candidata dem¨®crata recurri¨® a recordar su crianza en una familia de clase media: ¡°Mis valores no han cambiado y quiero traer esos valores y ayudar a la gente a mejorar, no a ir peor¡±. As¨ª explic¨® c¨®mo ha pasado de querer prohibir esta pr¨¢ctica en el pasado a comprometerse a respetarla como candidata. El expresidente contraatac¨® a su rival: ¡°Lleva 12 a?os contra el fracking¡±, asegur¨®.

Lo cierto es que la exfiscal ha flexibilizado su posici¨®n en una materia que vuelve a ser de gran importancia para los dem¨®cratas, quienes buscan los 19 votos electorales de uno de los Estados claves de esta elecci¨®n: Pensilvania; el segundo mayor productor de gas natural de Estados Unidos, en gran parte gracias al fracking.

Durante su primera entrevista como candidata presidencial, Harris quiso despejar toda duda: ¡°Como vicepresidenta, no prohib¨ª el fracking, y como presidenta tampoco lo har¨¦¡±. Donald Trump, decidido a ignorar el m¨¢ximo hist¨®rico de permisos de perforaci¨®n y producci¨®n de petr¨®leo de estos ¨²ltimos cuatro a?os, ha cuestionado repetidamente la pol¨ªtica energ¨¦tica de Harris en Washington, a la que acusa de que son sus decisiones ambientalistas acabar¨¢ con miles de puestos de trabajo y provocar¨¢ una subida en los precios de la gasolina.

¡°Su Estado [Pensilvania] se va a arruinar. Ella ha sido anti fracking, antiperforaci¨®n, antipetr¨®leo y gas pr¨¢cticamente desde el d¨ªa en que naci¨®¡±, dijo en agosto en Wilkes-Barre. ¡°Como la mayor¨ªa de los pol¨ªticos, Kamala est¨¢ tratando de mentir sobre su posici¨®n para ser elegida porque sus asesores saben que apoyar una prohibici¨®n de este tipo es una sentencia de muerte (...) Pondr¨ªa por las nubes las facturas de la energ¨ªa, los precios del gas y el precio de los alimentos¡±, expres¨® la portavoz de la campa?a de Trump, Karoline Leavitt.

?Qu¨¦ es el fracking?

El fracking, traducido al espa?ol como fracturaci¨®n hidr¨¢ulica, es una tecnolog¨ªa para el bombeo de agua, arena y productos qu¨ªmicos bajo tierra para la extracci¨®n de petr¨®leo y gas. En Estados Unidos se utiliza en aproximadamente 95% de los pozos, y es la gran responsable de la de la producci¨®n de petr¨®leo y gas en el pa¨ªs. Grupos ecologistas se han opuesto a esta pr¨¢ctica porque contamina las aguas subterr¨¢neas, pero la candidata dem¨®crata asegura que su apuesta por las energ¨ªas limpias puede continuar sin prohibirla. En este sentido, la Administraci¨®n Biden-Harris ha sido una gran promotora de los incentivos derivados de Ley de Reducci¨®n de la Inflaci¨®n, que desde hace dos a?os ha generado una ola de inversiones para la producci¨®n de bater¨ªas y paneles solares.

?Pueden los presidentes prohibir el fracking?

La respuesta es no. La discusi¨®n entre Harris y Trump sobre este asunto es m¨¢s bien simb¨®lica porque solo el Congreso tiene atribuciones para legalizar una prohibici¨®n nacional de la fracturaci¨®n hidr¨¢ulica. Hace ocho a?os, la Administraci¨®n Obama intent¨® aprobar una norma para que las petroleras y gas¨ªferas revelaran p¨²blicamente, y de forma obligatoria, los productos qu¨ªmicos que empleaban en la fracturaci¨®n hidr¨¢ulica, con miras a que el Departamento de Interior pudiera regularlos en terrenos federales, pero un tribunal anul¨® ambos intentos, alegando que el Congreso no hab¨ªa otorgado al Departamento esa autoridad. Sin embargo, Estados como Vermont, Washington y Maryland promulgaron leyes locales que proh¨ªben el fracking en su jurisdicci¨®n, pero ninguno es un gran productor de energ¨ªa. Pensilvania, que s¨ª lo es, lo hizo hace tres a?os, pero solo en la cuenca del r¨ªo Delaware.

?A cu¨¢ntos votantes de Pensilvania les preocupa el fracking?

Aunque la producci¨®n de gas natural sigue siendo una gran industria en el Estado, su huella se ha reducido desde el boom. Los permisos de perforaci¨®n han ca¨ªdo a la mitad seg¨²n cifras del Departamento de Protecci¨®n Ambiental de Pensilvania. Tambi¨¦n el n¨²mero de pozos que producen gas natural. Asimismo, la industria del petr¨®leo y gas tambi¨¦n ha despedido a miles de trabajadores desde 2019. El fracking en s¨ª es poco discutido en las campa?as electorales locales. ¡°La percepci¨®n es que los habitantes de Pensilvania hablan del fracking todo el tiempo, y la realidad es que no es cierto¡±, dijo Chris Borick, director del Instituto de Opini¨®n P¨²blica del Muhlenberg College en Allentown, en Pol¨ªtico.

El tema que se mantiene en la conversaci¨®n de los residentes de Pensilvania es la inflaci¨®n. Si bien el costo de la gasolina baj¨® significativamente desde los d¨ªas de la pandemia, el fantasma del encarecimiento de la energ¨ªa persiste entre los votantes. La estrategia de los republicanos apunta de nuevo al miedo. Desempolvan una vieja declaraci¨®n de Harris para indicar que sus pol¨ªticas van a ilegalizar el principal m¨¦todo de producci¨®n de petr¨®leo y gas de Estados Unidos, algo que disparar¨ªa los costos de la energ¨ªa.

Qu¨¦ dicen los ambientalistas

Las opiniones est¨¢n divididas. Collin Rees, director pol¨ªtico de Oil Change U.S., en declaraciones para Politico expres¨® que los comentarios de la vicepresidenta Harris fueron decepcionantes. ¡°La ciencia es clara: no podemos alcanzar nuestros objetivos clim¨¢ticos y abordar adecuadamente la crisis clim¨¢tica sin acabar con los combustibles f¨®siles¡±. Por su parte, congresistas defensores del clima como el dem¨®crata Jared Huffman apoyan la postura de Harris al afirmar que la candidata sigue teniendo entre sus prioridades detener la expansi¨®n de los combustibles f¨®siles en pro de energ¨ªas renovables.

En esta direcci¨®n, tambi¨¦n se inclina RL Miller, presidenta de Climate Hawks Vote. ¡°A nivel nacional, hemos sentado una base realmente importante, la Ley de Reducci¨®n de la Inflaci¨®n, para empezar a producir cosas en Estados Unidos de nuevo, y por cosas me refiero a productos importantes que vamos a necesitar en la transici¨®n hacia la energ¨ªa limpia¡±, dijo en su cuenta de X.