Las cinco claves de la reforma tributaria de Petro

¡°Los impuestos no ser¨¢n confiscatorios, simplemente ser¨¢n justos, en un pa¨ªs que debe reconocer como aberraci¨®n la enorme desigualdad social en la que vivimos¡± dijo el presidente Gustavo Petro en su discurso inaugural, el 7 de agosto. Menos de 24 horas despu¨¦s su ministro de Hacienda, Jos¨¦ Antonio Ocampo, present¨® en la C¨¢mara de Representantes un proyecto de reforma tributaria para aterrizar ese discurso. Un proyecto ambicioso, que buscaba recoger 26 billones de pesos adicionales en 2023, equivalentes a un 1,8% del PIB, esencialmente cargando m¨¢s a las personas de mayores ingresos, a empresas financieras y del sector extractivo, y a productos poco saludables o contrarios al ambiente. Y que ten¨ªa como objetivo asegurar la estabilidad fiscal y, a la vez, reducir la pobreza y la desigualdad.

En los casi tres meses de debate desde entonces, el proyecto sufri¨® cambios que llenaron titulares. Pero su esencia se mantiene, y gira alrededor de estos cinco puntos:

1. El mayor recaudo vendr¨¢ de los hidrocarburos

El mayor debate que queda abierto, y el mayor ¨¦nfasis de la reforma en t¨¦rminos de recoger dinero, est¨¢ en los hidrocarburos, y especialmente en el petr¨®leo. Ese centro de gravedad ya estaba claro en el proyecto inicial, en el que el Gobierno propuso prohibir que se reste en el impuesto de renta el pago de las regal¨ªas, el dinero que se entrega al Estado por extraer bienes del subsuelo, que es estatal. Tambi¨¦n creaba un impuesto nuevo del 10% de las exportaciones de petr¨®leo crudo, oro y carb¨®n cuando el valor de esos productos pase cierto umbral, que hoy sobrepasan de lejos. La l¨®gica se mantiene.

La no deducibilidad de las regal¨ªas qued¨®. Fue fuertemente criticada en el Congreso, y por fuera de ¨¦l, ya que en el impuesto de renta se deducen todos los costos y gastos que tiene una empresa o persona para lograr sus ingresos, y las regal¨ªas son uno de ellos. Ocampo la defendi¨® as¨ª en la plenaria final de la C¨¢mara este jueves: ¡°Este tema fue objeto de mucho debate con las comisiones terceras, e incluso tuvimos una alternativa de una sobretasa fija¡±, reconoci¨®, pero defendi¨® la medida. Cont¨® que el Ministerio calcul¨® que esa medida equivale a entre el 2% y el 5% adicional en la tarifa de renta. Fedesarrollo, un reputado centro de pensamiento econ¨®mico, calcula un impacto sustancialmente mayor, del 17,7%.

La reforma no solo aumenta el recaudo de los hidrocarburos por esa v¨ªa. Adem¨¢s de otros cambios relativamente menores (como la limitaci¨®n de algunos beneficios tributarios o del tratamiento que se da al pago de otros impuestos), crea una sobretasa al 35% del impuesto de renta. Para las empresas petroleras, ese extra del 5% de cuando el precio promedio del a?o sea del 30% al 45% del promedio de los 10 a?os anteriores, del 10% cuando sea del 45% al 60% y del 15% cuando sea m¨¢s alto. Es decir, podr¨ªan pagar una tarifa del 50%. Para el carb¨®n la sobretasa llegar¨ªa hasta el 10%.

Esos cambios tienen por lo menos dos efectos: el de llevar al Estado a depender m¨¢s de los hidrocarburos para financiarse, y a la vez crear un menor incentivo para invertir en ellos. Eso ¨²ltimo est¨¢ alineado con el objetivo de modificar el sistema econ¨®mico para depender menos de ellos y lograr la transici¨®n energ¨¦tica, pero puede terminar reduciendo los recursos para financiarla.

2. Env¨ªa mensajes en defensa de la salud y el medioambiente

Adem¨¢s del petr¨®leo, el otro gran debate de la reforma estuvo en los llamados impuestos saludables, que buscan desincentivar el consumo de alimentos que aportan poco a la nutrici¨®n y afectan la salud por su alto contenido de az¨²car, sodio o grasas.

Uno es el impuesto a las bebidas azucaradas, que el Gobierno incluy¨® y que tiene ganada una batalla en la opini¨®n desde que se propuso por primera vez en una reforma en 2016. El Congreso lo aprob¨® aunque en una versi¨®n menos estricta: se cobrar¨¢ a las bebidas que tengan un nivel de az¨²car m¨¢s alto del inicialmente propuesto, lo que deja por fuera varias de las marcas m¨¢s vendidas de Postob¨®n y Coca-Cola, que as¨ª logran evitar la mayor parte de su cobro.

El otro impuesto saludable es el de los alimentos ultraprocesados, los que tienen un proceso industrial en el que se les agrega az¨²car, sal o grasas. Ac¨¢ el debate estuvo inicialmente marcado pro el salchich¨®n, que qued¨® por fuera, y luego pro el pan, que tambi¨¦n fue excluido. As¨ª, pagar¨¢n un 10% en 2023, 15% en 2024 y 20% en 2025, los alimentos como las salchichas, los cereales, las galletas o el chocolate que tengan m¨¢s de 300 miligramos de sodio por cada 100 gramos, o en el que el 10% o m¨¢s de sus calor¨ªas provienen de az¨²cares libres o grasas saturadas. Ese trabalenguas nutricional ha aterrizado en un debate sobre alimentos que muchos colombianos consumen todos los d¨ªas, como el yogur, la pasta o los ponqu¨¦s.

La reforma tambi¨¦n apuntala la defensa del ambiente, un asunto que ha estado entre las prioridades de Petro desde hace un cuarto de siglo. Ahora habr¨¢ un impuesto a los pl¨¢sticos de uso ¨²nico, como los empaques desechables, y ser¨¢ m¨¢s alto el ya existente impuesto al carbono.

3. Hace ¨¦nfasis en la igualdad, aunque perdi¨® en el camino

El discurso de posesi¨®n de Petro, las palabras de Ocampo al radicar el proyecto y su documento de exposici¨®n de motivos coinciden en que la reforma busca reducir la desigualdad porque se concentra en las personas de mayores ingresos. ¡°Este proyecto de reforma tributaria tiene como objeto avanzar fundamentalmente en dos dimensiones. Primero, en disminuir las exenciones inequitativas de las que gozan las personas naturales de m¨¢s altos ingresos¡±, dice la exposici¨®n de motivos.

Sin embargo, en el camino perdi¨® varios de los elementos que m¨¢s resaltaban este punto, encabezados por la eliminaci¨®n del impuesto de renta a las pensiones de 10 millones de pesos o m¨¢s por presi¨®n de las bancadas gobiernistas que no son de izquierda y especialmente la conservadora. Tambi¨¦n cambiaron elementos como los techos a los beneficios que puede descontar una persona, elementos del impuesto al patrimonio o de la tarifa de renta a los dividendos.

Sigue en el aire la posibilidad de que exista una tarifa del impuesto de renta menor para las llamadas mipymes (micro, peque?as y medianas empresas), como han pedido su gremio, varios congresistas de izquierdas y como impuls¨® Petro en 2021, cuando se tramitaba la ¨²ltima reforma tributaria del Gobierno anterior. Con votos de la oposici¨®n y de partidos aliados del Gobierno pero no petristas, la plenaria de la C¨¢mara aprob¨® una propuesta de Jeniffer Pedraza, del partido Dignidad (la izquierda no gobiernista) para incluirla, a pesar de no tener aval del Gobierno como es requisito de cualquier norma que implique gasto del Estado. Como el Senado no la aprob¨®, el futuro de esta idea depende de la conciliaci¨®n de los textos que aprobaron las dos plenarias, y deja el Gobierno en el dilema entre apoyar una medida criticada por los t¨¦cnicos y que no apoya, o quedar como un enemigo de esta bandera de la econom¨ªa popular y la igualdad-

4. Aporta a la financiaci¨®n del d¨¦ficit

Con un recaudo estimado de 19 a 20 billones adicionales en 2023, la reforma promete reducir el d¨¦ficit fiscal en alrededor del 1,2% del PIB. Ese es un aporte relevante que acerca el recaudo en impuestos al promedio de Am¨¦rica Latina, pero est¨¢ lejos de ser suficiente para cerrar el d¨¦ficit fiscal. los c¨¢lculos m¨¢s recientes del Comit¨¦ de la Regla Fiscal, un grupo aut¨®nomo de economistas encargados de hacer seguimiento a la sostenibilidad de las finanzas p¨²blicas, indican que en 2023 el d¨¦ficit ser¨ªa del 7,3% del PIB. La propuesta inicial de la reforma era recoger el 1,78% del PIB, unos 26 billones de pesos, pero tuvo el usual proceso de las alzas de impuestos de ver sus ambiciones reducidas en el tr¨¢mite en el Congreso.

Adem¨¢s, el mismo Comit¨¦ alert¨® sobre un potencial impacto negativo de la reforma en el d¨¦ficit fiscal por cuenta del efecto de el alza de impuestos, especialmente en el sector petrolero. ¡°La alta dependencia de estas transferencias [impuestos y regal¨ªas del sector petrolero] para la Naci¨®n hace que una pol¨ªtica que suspenda la actividad o desincentive la inversi¨®n en el sector represente un riesgo elevado para la sostenibilidad fiscal y cambiaria del pa¨ªs con efectos adversos sobre el desarrollo y el crecimiento econ¨®mico¡±, escribe el Comit¨¦ en su m¨¢s reciente pronunciamiento p¨²blico, el domingo pasado. Fedesarrollo, un reputado centro de pensamiento econ¨®mico, estudi¨® ese mismo impacto de la reforma y encontr¨® que por ella ¡°el crecimiento econ¨®mico podr¨ªa reducirse en promedio en 0,32 puntos porcentuales, con un m¨¢ximo de 0,4 puntos porcentuales en 2030¡å y que desincentivar¨ªa tanto la industria petrolera que el recaudo se reducir¨ªa en 0,12% del PIB.

5. La discusi¨®n se centra ahora en el gasto

Con la reforma ya aprobada, el debate ya se ha deslizado hacia el del para qu¨¦, de en qu¨¦ se gastar¨¢ el dinero. El presidente Gustavo Petro aclara que las prioridades son de gasto social: educaci¨®n, acueductos, v¨ªas, apoyo a madres cabeza de familia. ¡°Habr¨¢ algunos programas ambientales y de paz y tambi¨¦n para el fomento de la peque?a empresa, que en realidad tambi¨¦n es gasto social. Son nuestros objetivos b¨¢sicos¡±, dijo Ocampo al presentar el proyecto de reforma.

Desde ese momento el d¨¦ficit fiscal estimado ha crecido, as¨ª como ha aumentado la cantidad de pesos que necesita recoger el Estado en impuestos pagar pagar su deuda externa, en d¨®lares, por cuenta de la devaluaci¨®n. Seg¨²n los datos del Ministerio de Hacienda, entre el 31 de julio y el 30 de septiembre esa deuda creci¨® de 315,1 billones de pesos a 332,5 billones de pesos, un aumento mayor al que planea recaudar toda la tributaria en 2023.

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