Grandes reformas en a?o electoral

El a?o de las grandes reformas del Gobierno de Gustavo Petro comienza tambi¨¦n como el a?o en el que se notan grietas en la coalici¨®n que pas¨® como aplanadora los proyectos oficiales en la anterior legislatura. ?Podr¨¢n hacerlo ahora? Es dif¨ªcil cuando se suman varios fen¨®menos pol¨ªticos que pueden complicar el proceso.

Uno de los m¨¢s complicados es que se trata de un a?o de elecciones regionales y en ese escenario cada partido buscar¨¢ proteger su feudo. Otro reto que tal vez va de la mano con el anterior es la distancia que est¨¢ tomando el senador y presidente del Congreso Roy Barreras, hombre clave a la hora de alinear a una bancada plural que tiene muchas diferencias en temas claves.

El senador ha sido cr¨ªtico ante los anuncios de reforma a la salud y transici¨®n energ¨¦tica con lo cual se enfrenta a dos ministras que hoy est¨¢n en el ojo del hurac¨¢n: la de Salud Carolina Corcho, por una reforma que ha dado mucho de qu¨¦ hablar sin que se conozca todav¨ªa el texto final que se debatir¨¢ en el Congreso, y la de Minas y Energ¨ªa Irene V¨¦lez, quien ha tenido salidas en falso complicadas en los anuncios de la pol¨ªtica de transici¨®n energ¨¦tica y est¨¢ acusada de mentir en un documento p¨²blico usado para argumentar la necesidad de no otorgar m¨¢s contratos de exploraci¨®n. El senador Barreras, que ha pasado por las toldas uribistas y santistas, lleg¨® al petrismo como uno de los grandes pilares pol¨ªticos de la campa?a y motor de la bancada en el Congreso. Ahora lentamente toma distancia y al hacerlo puede golpear a la coalici¨®n.

El presidente enfrenta tambi¨¦n el debate en su gabinete sobre las reformas. Es bien conocida la posici¨®n del ministro de Educaci¨®n Alejandro Gaviria y los reparos que tiene sobre un cambio muy radical en el sistema de salud. Estuvo en ese ministerio seis a?os y se le reconoce en Colombia por ser uno de los mayores conocedores del sector. Ha dicho que ¡°el sistema de salud debe mejorarse pero no acabarse¡± y que en el debate no va a ir en contra de sus convicciones. Se sabe tambi¨¦n de las diferencias internas en torno a la transici¨®n energ¨¦tica y otras reformas. Es un gabinete plural en lo ideol¨®gico y lo pol¨ªtico y la discrepancia es normal en una democracia. Sin embargo, se puede complicar si el Gobierno no logra sumar en la diferencia y en el camino pierde apoyos importantes.

Cabe preguntarse si el presidente Gustavo Petro se va a radicalizar para defender a capa y espada sus reformas estructurales tal y como las quiere, o si va a mantener el pragmatismo pol¨ªtico que aplic¨® en el comienzo de su mandato y abrir¨¢ la puerta a sumar matices a sus ideas. Vale recordar que sorprendi¨® a muchos en los primeros meses de su Gobierno a la hora de armar gabinete y promover la bancada oficial. Mostr¨® una capacidad de ajedrecista para sumar apoyos y tener en su c¨ªrculo cercano a figuras de diferentes perfiles para acercar a distintos sectores. El suyo, elegido como el primer Gobierno de izquierda, result¨® ser en los primeros meses un Gobierno de amplia coalici¨®n que no teme repartir burocracia para ganar gobernabilidad. ?Aguantar¨¢ esa coalici¨®n tan variopinta el debate de grandes reformas en un a?o de elecciones regionales?

En los ¨²ltimos d¨ªas, el presidente llam¨® ¡°a discutir en las calles las reformas que se avecinan¡±. Ya no est¨¢ en campa?a, pero sabe que su maquinaria fundamental est¨¢ ah¨ª. ?Buscar¨¢ en la gente el respaldo necesario si llega la hora de pasar de la alianza pol¨ªtica amplia a tratar de hacer reformas con menos apoyo de partidos? Lo cierto es que en el Congreso se necesitan los votos y mantener las mayor¨ªas es un reto. Hasta el momento ha logrado sacar sus proyectos, pero lo de fondo apenas comienza y en a?o electoral todos tienen sus intereses, tambi¨¦n el Gobierno.

Es claro que el pa¨ªs necesita cambios para superar la inequidad y los inmensos problemas que enfrenta. Cu¨¢les deben ser las prioridades, de qu¨¦ tama?o debe ser el cambio, a qu¨¦ velocidad, a qu¨¦ costo¡­ todo eso genera discrepancias. Ah¨ª cada ideolog¨ªa da respuestas diferentes y tramitar las discrepancias democr¨¢ticamente no ha sido un talento de la colombianidad.

A Petro y al pa¨ªs les puede servir m¨¢s sacar reformas posibles que se logren con mayor consenso y construir sobre lo construido, en vez de alimentar confrontaciones parapetadas en posiciones ideol¨®gicas inamovibles. A nadie le conviene una radicalizaci¨®n del Gobierno aunque hay sectores que hacen votos porque le vaya mal y algunos hasta hablan de quiebres institucionales. Tampoco es bueno que se radicalice la oposici¨®n. Despu¨¦s de d¨¦cadas de guerra sin acabar de cerrar a Colombia le sirve que gobiernos de derecha, de izquierda, de centro y de todos los colores puedan rotar en el poder dentro del juego democr¨¢tico y que en el Congreso se debatan todos los temas buscando acuerdos. Por eso creo que es mejor el Petro pragm¨¢tico que convoca mayor¨ªas m¨¢s all¨¢ de la izquierda, dialoga con opositores y busca acuerdos.

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