El uribismo le suelta la mano a ?scar Iv¨¢n Zuluaga, el candidato que casi venci¨® a Santos

?scar Iv¨¢n Zuluaga ya no brilla como una de las figuras favoritas del expresidente colombiano ?lvaro Uribe. Su historia actual, la de una ca¨ªda en desgracia, contrasta con la del candidato que casi venci¨® a Juan Manuel Santos en 2014 ¡ªgan¨® en primera vuelta y perdi¨® por menos de seis puntos en la segunda¡ª. No solo por las sospechas de financiamiento ilegal de la campa?a, que ya tienen a?os. M¨¢s bien por el golpe final el pasado domingo: unos audios que revel¨® la revista Semana evidenciaron que Zuluaga s¨ª sab¨ªa que la constructora brasile?a Odebrecht hab¨ªa pagado 1,6 millones de d¨®lares para contratarle al brasile?o Duda Mendon?a como asesor de su campa?a. Tras el impacto, el uribismo no ha tardado en soltarle la mano.

El responsable de grabar las conversaciones y filtrarlas ha sido Daniel Garc¨ªa Arizabaleta, exdirector del Instituto Nacional de V¨ªas y persona a la que Zuluaga consideraba como parte de su c¨ªrculo ¨ªntimo. W Radio cont¨® en mayo que la Fiscal¨ªa ten¨ªa en su poder dos audios de intercambios entre Garc¨ªa Arizabaleta y Zuluaga sobre la participaci¨®n de Odebrecht en la campa?a. Sin embargo, nada m¨¢s se supo hasta este domingo. En las grabaciones se escucha al excandidato presidencial informarle a su amigo de que Mendon?a estaba ¡°dispuesto a dar las declaraciones¡± que se le hab¨ªan ¡°planteado¡± para desligar a la campa?a de los pagos de Odebrecht. ¡°Efectivamente la plata la recibi¨® y eso no se puede ya tapar. Pero claramente va a salvar la responsabilidad¡±, dice.

El excandidato siempre hab¨ªa afirmado que solo se enter¨® de los v¨ªnculos con la constructora brasile?a cuando los revel¨® la revista brasile?a Veja, en enero de 2017. ¡°Nuestra campa?a no puede hacerse responsable de los acuerdos y pagos que la empresa Odebrecht tuviera con el se?or Duda Mendo?a al margen de lo convenido con nosotros¡±, declar¨® entonces. No obstante, la Fiscal¨ªa se?al¨® el pasado 13 de junio que Zuluaga se reuni¨® en varias ocasiones con un exdirectivo de Odebrecht para pactar estos aportes de la empresa brasile?a. ¡°Las evidencias dan cuenta de que ten¨ªa conocimiento del aporte il¨ªcito y que present¨® una contabilidad con tal omisi¨®n ante el Consejo Nacional Electoral (CNE)¡±, indic¨® la entidad acusatoria en un comunicado.

La Fiscal¨ªa le imputar¨¢ el pr¨®ximo 10 de julio los delitos de falsedad en documento privado, fraude procesal y enriquecimiento il¨ªcito de particular. En sus se?alamientos, la entidad recuerda que la Constituci¨®n proh¨ªbe el financiamiento de compa?¨ªas extranjeras para campa?as electorales. En este caso, adem¨¢s, no fue cualquier empresa: el caso Odebrecht ha sacudido a las clases pol¨ªticas de varios pa¨ªses de Am¨¦rica Latina, con sobornos millonarios a dirigentes pol¨ªticos para asegurar contratos favorables.

Las acusaciones nunca hab¨ªan logrado que los uribistas renegaran del todo de Zuluaga, al que eligieron como candidato oficial para las elecciones presidenciales de 2022 ¡ªantes de que se dieran cuenta de que no ten¨ªa chances¡ª. El expresidente Uribe incluso hab¨ªa reaccionado de manera moderada el pasado 13 de junio, tras el anuncio de la Fiscal¨ªa. ¡°Tengo dos dolores: uno personal por ?scar Iv¨¢n Zuluaga y David [el hijo, tambi¨¦n acusado], a quienes admiro y les tengo todo el afecto. Y otro dolor pero de Patria por las impunidades, una de ellas Santos y Odebrecht¡±, remarc¨® entonces, en referencia a otros esc¨¢ndalos que involucran a la administraci¨®n de Santos.

La crudeza de las ¨²ltimas grabaciones, sin embargo, ha sido demasiada. Escuchar que Zuluaga minti¨® sobre no tener conocimiento del financiamiento transform¨® la postura del exmandatario en un rechazo expl¨ªcito. El lunes por la ma?ana, Uribe defini¨® el caso de Zuluaga como ¡°una tragedia¡± para su movimiento, comparables con los reveses que le significaron la elecci¨®n de Santos y los acuerdos de paz con las FARC en 2016. ¡°Todo un enga?o a tantos que lo han hecho bien y creen en estas tesis [del Centro Democr¨¢tico]¡±, coment¨®. Asimismo, el expresidente se deslig¨® de responsabilidad: remarc¨® que ¨¦l le pidi¨® a Zuluaga un certificado que aclarara la situaci¨®n y que Daniel Garc¨ªa Arizabaleta le dijo que las acusaciones no eran ciertas.

Varios de los aliados de Uribe salieron a respaldar este cambio de postura. El exviceministro del Interior Rafael Nieto pidi¨® en Twitter que no haya impunidad: ¡°[Zuluaga] debe pagar por los delitos que haya cometido y disculparse con aquellos a quienes enga?¨® para impulsar sus ambiciones pol¨ªticas¡±. El exsenador Jos¨¦ Obdulio Gaviria declar¨® a Semana que espera que Zuluaga ya haya renunciado al Centro Democr¨¢tico, el cual presidi¨® hace unos a?os. ¡°Yo ten¨ªa la convicci¨®n o, por lo menos, el deseo ¨ªntimo de que lo que nos hab¨ªa dicho en su momento ?scar Iv¨¢n Zuluaga fuera cierto¡±, agreg¨®.

La senadora Paloma Valencia, que hab¨ªa apoyado a Zuluaga hasta ahora, fue de las m¨¢s enf¨¢ticas en expresar su desilusi¨®n. ¡°Ha sido nuestro candidato, sujeto de tanta confianza que quer¨ªamos que fuera nuestro presidente. Tenemos desconcierto y tristeza, todos los colombianos que votamos y cre¨ªmos en ¨¦l nos sentimos enga?ados. Muchos salimos a defenderlo de estas acusaciones¡±, expres¨® en Twitter.

Las grabaciones revelan que el excandidato presidencial tuvo dudas sobre c¨®mo deb¨ªa actuar. ¡°Yo tendr¨¦ que asumir la responsabilidad s¨ª me toca en un momento, por encima de todos (...). No voy a eludir mi responsabilidad, ni me voy a esconder, ni voy a lavarme las manos con nadie¡±, le comenta a Garc¨ªa Arizabaleta. Asegura varias veces que ser¨¢ leal a sus allegados y que no los incriminar¨¢ como responsables.

Tambi¨¦n hubo remordimientos que llevaron a Zuluaga a consultar con un sacerdote, en el norte de Bogot¨¢. ¡°Le cont¨¦ la verdad de las cosas. Le dije: ¡®Padre, yo lo sab¨ªa, esto ocurri¨® as¨ª, ?yo qu¨¦ debo hacer?¡¯ (...) Me dijo algo sabio: ¡®Uno tiene que protegerse a s¨ª mismo ante la maldad de los dem¨¢s. Nada le obliga a no protegerse¡±. De acuerdo a Zuluaga, este cura le dijo que estaba rodeado de ¡°maldad¡± y que deb¨ªa defenderse. ¡°?l me ilumin¨®¡±.

El exaspirante presidencial, que se mantiene en silencio, tiene m¨¢s de 30 a?os de carrera pol¨ªtica. Comenz¨® a finales de los a?os ochenta como concejal de su natal Pensilvania, una poblaci¨®n de 26.000 habitantes en el c¨¦ntrico departamento de Caldas, en el eje cafetero. Despu¨¦s, fue alcalde de ese municipio, senador de la Rep¨²blica, ministro de Hacienda del Gobierno de ?lvaro Uribe y director del Centro Democr¨¢tico.

Pese a las acusaciones por Odebrecht, el uribismo lo eligi¨® a finales de 2021 como el candidato oficial para las elecciones presidenciales del siguiente a?o, por encima de aspirantes como las senadoras Mar¨ªa Fernanda Cabal y Paloma Valencia. Entonces, como ahora, sus aliados acabaron saltando del barco. La ilusi¨®n de Zuluaga, ya manchado ante la opini¨®n p¨²blica, no se renov¨® en su segundo intento por la Presidencia y Federico Guti¨¦rrez result¨® ser el elegido por la derecha y el reconocido por todos como ¡°el candidato de Uribe¡±.

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