El rechazo al pasado reciente, los alternativos debilitados y las estructuras fortalecidas marcan las elecciones del domingo

Si las elecciones nacionales de 2022 marcaron un giro a la izquierda en Colombia, las locales y regionales de este domingo 29 de octubre pasar¨¢n por el reforzamiento de los liderazgos locales y por la debilidad de las candidaturas alternativas, en un notorio contraste con lo ocurrido cuatro a?os atr¨¢s. Los 32 gobernadores y 1.102 alcaldes elegidos representar¨¢n menos a los diferentes partidos que los avalen que a los poderes locales que encabezan o de los que son parte. Ese cambio ser¨¢ m¨¢s o menos notorio seg¨²n el peso que tengan en cada municipio y departamento estos cuatro grandes factores.

El rechazo al pasado reciente

Los alcaldes y gobernadores salientes llegan a estas elecciones, en general, con mala imagen. Aunque no todos los casos son tan negativos como los de Daniel Quintero en Medell¨ªn (63% de desaprobaci¨®n, seg¨²n la encuestadora Invamer, y 73% seg¨²n Atlas Intel) o Jorge Iv¨¢n Ospina en Cali (77% y 75,9%, respectivamente), son peores que los de sus antecesores. Por ejemplo, el popular Jaime Pumarejo de Barranquilla tiene menos aprobaci¨®n que su jefe pol¨ªtico, ?lex Char, hace cuatro a?os: 57% contra 95%, seg¨²n la Invamer Poll.

La fuerza de esa tendencia general marcar¨¢ los resultados del domingo. Los alcaldes y gobernadores que llegaron el 1 de enero de 2020 enfrentaron la mayor pandemia en por lo menos un siglo y la mayor ca¨ªda del PIB en 75 a?os, enfrentaron un aumento del desempleo y luego una alta inflaci¨®n, y se mostraron impotentes ante el aumento de la inseguridad. La duda es hasta d¨®nde eso implicar¨¢ un cambio rotundo de poder local, como indican las encuestas en lugares como Medell¨ªn, C¨²cuta o Cartagena; y d¨®nde se mantendr¨¢ en las mismas manos a pesar de ello, como se prev¨¦ en Barranquilla, Boyac¨¢ o Valle del Cauca.

La debilidad de la marca alternativa

El 2019 fue el gran a?o de los candidatos alternativos, aquellos que ven¨ªan de fuera de la pol¨ªtica tradicional e, incluso, de la pol¨ªtica en general. Las elecciones de Claudia L¨®pez en Bogot¨¢, Daniel Quintero en Medell¨ªn, William Dau en Cartagena, Jairo Y¨¢?ez en C¨²cuta o Carlos Mario Mar¨ªn en Manizales marcaron ese giro. Ninguno llevaba m¨¢s de 4 a?os en la pol¨ªtica electoral, ninguno tuvo el apoyo de un partido tradicional y varios se impusieron frente a candidatos que s¨ª obedec¨ªan a ese molde.

Este domingo, en contraste, pocas candidaturas fuertes llegan con esa misma marca. En las mismas cinco ciudades, los candidatos punteros en las encuestas vienen de sectores tradicionales o tienen alianzas fuertes con ellas. Son, respectivamente, el exsenador por Cambio Radical, Carlos Fernando Gal¨¢n; el exalcalde y excandidato presidencial Federico Guti¨¦rrez; el exgobernador Dumek Turbay, primo del senador liberal Lidio Garc¨ªa; el exconcejal Leonardo J¨¢come, apoyado por el exalcalde condenado por homicidio Ramiro Su¨¢rez; y el exalcalde y exministro Jorge Eduardo Rojas.

Sin embargo, en 2019 victorias como la de Y¨¢?ez no estaban previstas en las encuestas. En estas y otras ciudades hay candidatos con la marca de alternativos como Judith Pinedo en Cartagena, pero con el rechazo a un pasado reciente que en muchos lugares significa administraciones alternativas; la probabilidad de esas sorpresas parece menor que cuatro a?os atr¨¢s.

La fortaleza de las maquinarias locales

Si la marca de ser alternativo ha perdido atractivo, la de ser un pol¨ªtico de carrera, con una maquinaria detr¨¢s, usualmente liderada por un congresista (o con un congresista que es ahijado de un candidato), parece ser un menor lastre. Eso es especialmente cierto en las Gobernaciones, cargos cuya relevancia es difusa para muchos ciudadanos por sus escasas funciones y fuentes de financiaci¨®n. En departamentos como Cundinamarca, Bol¨ªvar, Valle del Cauca, Tolima, Magdalena o Cesar todo est¨¢ encaminado para que se mantenga en el poder el grupo pol¨ªtico que lo ha tenido durante los ¨²ltimos cuatro a?os. Lo mismo en alcald¨ªas como las de Armenia o Barranquilla.

En otros departamentos en los que la campa?a est¨¢ m¨¢s abierta, hay choques entre dos maquinarias o alianzas de estructuras de ese tipo, como ocurre en C¨®rdoba, Santander o Meta. Algo similar ocurre en diferentes capitales, desde Riohacha hasta Pereira, pasando por Sincelejo o Neiva.

Con el debilitamiento del sistema de partidos, por la multiplicaci¨®n de personer¨ªas jur¨ªdicas que ya suman 37, el poder de cada ganador es incluso m¨¢s fuerte, ya que se personaliza m¨¢s el v¨ªnculo pol¨ªtico, como explica la experta Elisabeth Ungar.

El cambio de equilibrio frente al Gobierno

La renovaci¨®n de mandatarios locales y regionales significa un nuevo libro en la relaci¨®n con el Gobierno Nacional.

Un resultado evidente ser¨¢ que el gobiernista Pacto Hist¨®rico no tendr¨¢ grandes victorias. No solo tiene pocos candidatos viables, sino que pinta dif¨ªcil su gran apuesta por la administraci¨®n de la capital del pa¨ªs (¡°En la Alcald¨ªa de Bogot¨¢ nos jugamos la supervivencia del Pacto Hist¨®rico¡±, apuntaba su candidato Gustavo Bol¨ªvar, segundo en las encuestas y quien solo tiene opciones remotas de ser elegido). Tiene candidatos viables a las gobernaciones de C¨®rdoba y Nari?o, y un aliado de izquierda en Magdalena, as¨ª como opciones en la Alcald¨ªa de Villavicencio. Con poca fuerza en los cargos ejecutivos, un crecimiento en los Concejos y Asambleas no promete cambiar de manera significativa el equilibrio pol¨ªtico local.

Lo que s¨ª puede variar es la relaci¨®n entre las estructuras locales, que suman a mandatarios y congresistas de un mismo grupo, y el Gobierno, de una forma que todav¨ªa est¨¢ por verse. De un lado, algunos expertos y pol¨ªticos en oficio creen que los nuevos mandatarios se acercar¨¢n al Gobierno para conseguir recursos y apoyo para sus proyectos, y que eso le dar¨¢ m¨¢s margen de maniobra a Gustavo Petro para sacar adelante sus reformas en el Congreso. Del otro, otros entienden que en la medida en que tengan asegurado el poder local y el presidente mantenga una baja aprobaci¨®n, los congresistas de esas estructuras tienen una base de poder garantizada m¨¢s all¨¢ del cuatrienio de Petro, y les resulta m¨¢s redituable alejarse de un Gobierno poco popular.

Suscr¨ªbase aqu¨ª a la newsletter de EL PA?S sobre Colombia y aqu¨ª al canal en WhatsApp, y reciba todas las claves informativas de la actualidad del pa¨ªs.