Salvatore Mancuso seguir¨¢ en prisi¨®n a pesar de que una jueza orden¨® su libertad condicional
Seg¨²n una magistrada de Justicia y Paz, el sistema de justicia transicional para las antiguas AUC, el excomandante de ese grupo armado ha cumplido con las tres sentencias que hab¨ªa en su contra. No saldr¨¢ de la c¨¢rcel hasta que se resuelvan las 47 solicitudes de prisi¨®n preventiva tiene vigentes
Salvatore Mancuso G¨®mez tiene derecho a la libertad. As¨ª lo ha dictado este lunes la jueza Luz Marina Zamora, que pertenece al sistema de justicia transicional creado hace dos d¨¦cadas para procesar al grupo paramilitar en el que el antiguo ganadero era jefe, las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC). Seg¨²n la togada, el designado gestor de paz ha cumplido con las tres sentencias de Justicia y Paz que hay en su contra, en las que fue condenado a ocho a?os de c¨¢rcel, por lo que merece la libertad a prueba durante cuatro a?os. Si no se cruza alg¨²n otro juez en la decena de procesos que tiene abiertos el excomandante paramilitar ¨D33 en Barranquilla y 14 en Bogot¨¢¨D, la Justicia organizar¨¢ su liberaci¨®n de la c¨¢rcel La Picota de Bogot¨¢, donde ha estado recluido desde el d¨ªa de su retorno al pa¨ªs, el pasado 27 de febrero. Por ahora, sin embargo, Mancuso seguir¨¢ preso.
La versi¨®n de Mancuso sobre el conflicto armado es muy importante para el Gobierno Petro. El presidente lo dej¨® claro en agosto pasado, cuando lo design¨® como gestor de paz, una figura pensada para gestionar acuerdos con grupos ilegales y que puede implicar el levantamiento temporal de ¨®rdenes de captura, por lo que es su pasaporte m¨¢s seguro a la libertad. Adem¨¢s, en noviembre, Mancuso logr¨® ser aceptado por la Jurisdicci¨®n Especial para la Paz (JEP), otro sistema de justicia transicional creado en los acuerdos de paz con las extintas FARC para procesar los casos graves de las conductas criminales m¨¢s difundidas durante el conflicto armado. La JEP lo admiti¨® en calidad de ¡°sujeto incorporado funcional y materialmente a la fuerza p¨²blica¡± entre 1989 y 2004. Esto significa que el tribunal se enfocar¨¢ en su rol como ¡°bisagra¡± entre los paramilitares y los altos mandos de la fuerza p¨²blica en el enfrentamiento con la guerrilla.
Si llega a salir de la c¨¢rcel, se teme por su seguridad, pues es uno de los se?ores de la guerra de m¨¢s alto perfil en la historia de un pa¨ªs sacudido por d¨¦cadas de conflicto. Cuando lleg¨® a La Picota, la semana anterior, usaba casco y chaleco antibalas, y dos polic¨ªas lo proteg¨ªan con escudos. Alguien ¨Do muchas personas¨D lo pueden querer ver muerto.
Al antiguo ganadero cordob¨¦s se le acusa de m¨¢s de 60.000 hechos delictivos, entre los que cometi¨® directamente y aquellos de lo que es responsable como antiguo comandante de las AUC. Dirigi¨® directamente 139 masacres en las que fueron asesinadas 800 personas, adem¨¢s de otros delitos como desplazamientos, secuestros, desapariciones, narcotr¨¢fico o extorsi¨®n. Tras un proceso de paz entre el Gobierno de ?lvaro Uribe y las AUC, ¨¦l mismo ha reconocido su responsabilidad en centenares de asesinatos y otros cr¨ªmenes, y muchos de los hombres que comand¨® han hecho lo mismo. Entre otros actos atroces, los integrantes del Bloque Catatumbo de las AUC, que Mancuso encabez¨® por a?os, reconocieron haber cometido 12.427 homicidios entre 1999 y 2004 solo en Norte de Santander. En 2005, ese departamento ten¨ªa una poblaci¨®n de unas 1,2 millones de personas: asesinaron al 1% de la poblaci¨®n nortesantandereana.
En 2005, cuando se desmoviliz¨®, Mancuso parec¨ªa orgulloso del terror que hab¨ªa sembrado. En un discurso que dio en una visita al Congreso, dijo que los paramilitares hab¨ªan hecho una ¡°epopeya de libertad¡±, ¡°m¨ªtica y heroica¡±. Dos d¨¦cadas m¨¢s tarde, ha cambiado de tono. Entr¨® en 2006 a Justicia y Paz, el sistema de justicia transicional creado un a?o antes por el Gobierno Uribe, en el que los paramilitares reciben penas m¨¢s bajas a cambio de la verdad que ofrecen a las v¨ªctimas y de comprometerse a dejar de delinquir. All¨ª, r¨¢pidamente empez¨® a contar una versi¨®n de la guerra que incomod¨® a muchos uribistas: se?al¨® al entonces presidente de estar detr¨¢s de una masacre y lo vincul¨® a dos homicidios m¨¢s, dijo que los militares le entregaban listados de civiles para matarlos, y se?al¨® a varias de las empresas m¨¢s importantes del pa¨ªs de financiar a los paramilitares y sus delitos sanguinarios.
En 2008, Uribe lo extradit¨® a Estados Unidos junto con otra decena de jefes paramilitares, bajo el argumento de que todos ellos segu¨ªan delinquiendo desde la c¨¢rcel. Para muchos defensores de derechos humanos, era m¨¢s bien un esfuerzo del Gobierno para callar a Mancuso: sab¨ªa demasiado, y claramente estaba m¨¢s que dispuesto a hablar. Desde una prisi¨®n norteamericana, hizo exactamente eso. En 2014 Justicia y Paz lo conden¨® a ocho a?os de c¨¢rcel por m¨¢s de 2.000 cr¨ªmenes cometidos en ocho departamentos colombianos ¨Den la justicia ordinaria hubieran sido m¨¢s de 40 a?os¨D. Todav¨ªa faltan unos 60.000 delitos m¨¢s.
La ma?ana de este lunes, horas antes de la audiencia de Mancuso, Uribe se refiri¨® al exjefe paramilitar. ¡°De Mancuso nada me aterra, cuando pienso que se cambi¨® de autodefensa por asesinato y desaforo de dinero¡±, dice en un video publicado en su cuenta de X. A continuaci¨®n, alega que el excomandante se est¨¢ aliando con el presidente Petro porque los dos son sus enemigos y, dice, Mancuso quiere ¡°vengarse del enemigo que no pudo someter¡±. El expresidente tambi¨¦n aborda la decisi¨®n del presidente Gustavo Petro de designar a Mancuso como gestor de paz. Afirma que esa decisi¨®n ¡°para algunos conviene y para otros no. Las razones tienen m¨¢s intenci¨®n de amenaza pol¨ªtica que de paz¡±, pues compara su caso con el de otros antiguos comandantes de las AUC que no han sido designados como gestores.
2/4 Nuestras Fuerzas Armadas, la JEP, alternativas para nuestros soldados. pic.twitter.com/MVe83Wjjgw
— ?lvaro Uribe V¨¦lez (@AlvaroUribeVel) March 5, 2024
Mancuso lleg¨® a tierra colombiana tras 16 a?os en el exilio anunciando que planea seguir contando su versi¨®n del conflicto armado. ¡°Vengo a continuar con mis compromisos frente a las v¨ªctimas, como lo he hecho ininterrumpidamente a lo largo de estos ¨²ltimos 18 a?os, pero al mismo tiempo, vengo a ponerme al servicio de una agenda de paz que permita evitar que Colombia sea una f¨¢brica eterna de v¨ªctimas y dolores colectivos¡±, dijo en una carta publicada el d¨ªa que aterriz¨®. ¡°Tengo la tarea de continuar aportando verdad ante el sistema de justicia transicional, no solo con responsabilidad por las implicaciones que tiene en las personas vinculadas en los testimonios, sus familias y las comunidades v¨ªctimas, lo har¨¦ bajo estrictos est¨¢ndares que permitan contrastar y determinar que es una verdad cualificada¡±, a?adi¨®.
El pasado 21 de febrero, cuando se supo que Mancuso ya ten¨ªa pasaporte colombiano para volver a su tierra natal, el ministro de Defensa, Iv¨¢n Vel¨¢squez declar¨® que ¡°hay que proteger la vida de Salvatore Mancuso (...) por la posibilidad de contribuir en mayor medida a la verdad en el pa¨ªs¡±. Ser¨¢ una tarea dif¨ªcil si el excomandante paramilitar es dejado en libertad.
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