Jos¨¦ Rub¨¦n Zamora recibe el premio Gabo a la excelencia: ¡°Prefiero morir de pie como otros ¨ªconos del periodismo independiente¡±
El periodista guatemalteco, detenido en una c¨¢rcel arbitrariamente desde el 2022, env¨ªa un mensaje sobre la libertad: ¡°No nacemos libres: la libertad es una conquista¡±
El periodista guatemalteco Jos¨¦ Rub¨¦n Zamora, 67 a?os, lleva m¨¢s de 700 d¨ªas detenido en una c¨¢rcel militar en la Ciudad de Guatemala, una decisi¨®n de la Fiscal¨ªa declarada como arbitraria por organismos como Naciones Unidas. Pero eso no le ha callado. Desde su celda, Zamora ha enviado, a trav¨¦s de uno de sus hijos, Jos¨¦ Zamora, sus palabras para recibir uno de los premios m¨¢s importantes para el periodismo en espa?ol, el Reconocimiento a la Excelencia en el Festival Gabo. ¡°Nunca hab¨ªa sentido tanta libertad como hoy¡±, escribi¨®. Estas son sus palabras:
Distinguidos miembros del Consejo Rector de la Fundaci¨®n Gabo; estimados colegas, queridas amigas y amigos:
Vaya paradoja: no obstante mi solitario aislamiento de dos a?os, acompa?ado ¨²nicamente de una planificada y amplia variedad de centenas de insectos voraces en mi fr¨ªa y h¨²meda bartolina, que por momentos m¨¢s se asemeja a un r¨²stico mausoleo refrigerado, encerrado dentro de una especie de precario pero eficaz gallinero en el que permanezco enterrado en vida, en alg¨²n lugar perdido en la prisi¨®n Mariscal Zavala, nunca, jam¨¢s, hab¨ªa sentido tan calurosa y nutrida compa?¨ªa y tanta libertad como hoy. Ustedes han transformado mi recinto y mi propio confinamiento en un lugar confortable y feliz, con inquebrantables pilares de fe, esperanza, humildad, paciencia y coraje.
Antes de seguir, quisiera pedir un minuto de aplausos para Guillermo Cano y Pedro Joaqu¨ªn Chamorro: m¨¢rtires inspiradores del periodismo independiente que prefirieron morir en defensa de la libertad que vivir hincados y renunciar a sus firmes convicciones frente a los narco clepto reg¨ªmenes fascistas caracter¨ªsticos de nuestra exuberante regi¨®n. Esta regi¨®n donde contradictoriamente hay grandes mayor¨ªas de gente que sobra, que vive en la exclusi¨®n y la miseria.
Con humildad, pero experimentando paroxismo de felicidad, en nombre de los periodistas de elPeri¨®dico de Guatemala y los periodistas y la prensa independiente de la regi¨®n, me siento profundamente honrado de recibir el Reconocimiento a la Excelencia del Premio Gabo 2024.
Es momento propicio para reflexionar sobre las inevitables relaciones, desaf¨ªos y tensiones entre la prensa independiente y el poder establecido. El desaf¨ªo de la prensa independiente es decir la verdad, expresar las cosas como son, desde todos los puntos de vista posibles. Por norma suele ser un ejercicio contra la corriente, en un contexto hostil, solitario y marginal y el poder suele considerarlo subversivo.
Son innumerables los intentos de poner a la prensa y a los periodistas independientes al servicio de una causa, una ideolog¨ªa, un inter¨¦s o un Gobierno. No importan los elevados ideales y las alt¨ªsimas razones que se utilizan para cooptar o neutralizar a la prensa: la ¨²nica intenci¨®n es que se deje de hacer periodismo y se haga propaganda a trav¨¦s de los medios y apolog¨ªa de pr¨¢cticas que terminan por convertirse en perversiones repugnantes.
Las responsabilidades del periodismo son la cr¨ªtica, la fiscalizaci¨®n y la lucha sin cuartel contra los abusos del poder. M¨¢s a¨²n, en pa¨ªses como Guatemala, en donde los peligros de abusos de los poderes establecidos se ven agudizados debido a la ausencia de controles, balances y contrapesos institucionales, que permitan a la ciudadan¨ªa fiscalizar los excesos y abusos del Estado, al extremo que la corrupci¨®n y la impunidad se han transformado en un fen¨®meno habitual, perenne e incesante.
Desde otra perspectiva, el sistema no puede combatir el narco, la corrupci¨®n y la impunidad, porque el narco, la corrupci¨®n y la impunidad son el sistema.
Nuestra democracia ha experimentado una metamorfosis siniestra: cada cuatro a?os elegimos un cleptodictador, un presidente ladr¨®n, que cogobierna con las mafias criminales, la oligarqu¨ªa, los contratistas, proveedores y sindicatos del Estado ignorando las necesidades de las grandes mayor¨ªas pobres de la poblaci¨®n. El sofisticado sistema de narco cleptocracia fascista que prevalece ha echado ra¨ªces profundas y es insensible e inconmovible a las demandas de la ciudadan¨ªa.
A la luz de esta dram¨¢tica realidad, resulta evidente la importancia capital de que la prensa juegue el papel agresivo de peque?o contrapoder de los poderes establecidos. Tarea muy cuesta arriba, pues la sociedad misma y los poderes tradicionales, parad¨®jicamente incluso los mismos periodistas, tratan de manera recurrente de exigir la redefinici¨®n del papel de la prensa y de los periodistas independientes. Claman porque la prensa deje de tener conciencia cr¨ªtica y se dedique a apoyar, predicar, persuadir, teniendo como ejes sus ideas, creencias, ideolog¨ªas, ortodoxias, dogmas, procesos pol¨ªticos y verdades oficiales y oficiosas. Ignoran u olvidan que la prensa, lejos de ¡°deber ser¡±, simplemente ¡°es¡±.
M¨¢s que periodistas y medios independientes quisieran propagandistas, propagadores de ¡°buenas noticias¡±, constructores de castillos de naipes y simples servilistas.
La prensa y los periodistas independientes deben percatarse que su sometimiento a cualquier causa ¨²nicamente puede desembocar en la siembra de conformismos, desinformaci¨®n y confusi¨®n y en la corresponsabilidad de cambios para que nada cambie.
La buena pr¨¢ctica period¨ªstica se limita a dudar, privilegiar la suspicacia, describir, expresar, revelar, descubrir, desnudar la realidad con ¨¦nfasis cr¨ªtico y fundamentalmente a poner a la vista lo escondido, propiciar vigorosamente la libertad en su sentido m¨¢s amplio, desmitificar los fundamentalismos, las ortodoxias y el poder y realizar un libre examen de la realidad. Cosas, que, en su conjunto, no son nada f¨¢ciles de llevar adelante en nuestros contextos, pues como bien lo dijo Octavio Paz, nuestras ¨¦lites jam¨¢s han hecho suyas la libertad, la democracia, la tolerancia, el debate p¨²blico plural, el mercado, la transparencia, el respeto al Estado de Derecho, la genuina independencia de poderes y el respeto a los derechos humanos. M¨¢s bien, sus aut¨¦nticas afinidades pol¨ªticas, morales e intelectuales han estado siempre con el fascismo, el mercantilismo, el corporativismo pol¨ªtico, los monopolios y oligopolios econ¨®micos y pol¨ªticos, la opacidad, los privilegios y la intolerancia.
Nuestras ¨¦lites poseen doble moral: sus amigos pueden hacer lo que quieran con impunidad, mientras que a sus enemigos aplican rigurosamente la Ley. Es m¨¢s, consideran leg¨ªtimo responder a quienes se salen de su redil, con boicots comerciales, coerciones, violencia en cualquiera de sus manifestaciones, asesinatos convencionales o morales, terrorismo de Estado e implacable persecuci¨®n judicial y fiscal, campa?as infames de desprestigio y difamaci¨®n en los monopolios de televisi¨®n y oligopolios de radio, campa?as sistem¨¢ticas de represi¨®n sicol¨®gica preventiva, secuestros, chantajes, encierro, destierro o entierro, hasta la vulgar compra de voluntades. Como dijo el expresidente ?lvaro Arz¨², en cuya administraci¨®n se firmaron los acuerdos de paz, parafraseando a un conocido y burdo dictador: ¡°Al periodista se le paga o se le pega¡±.
Mi pr¨¢ctica period¨ªstica independiente me oblig¨® a denunciar los abusos y excesos de los poderes establecidos, la corrupci¨®n y la impunidad, el terrorismo de Estado y los actos criminales de los altos mandos militares. Este tipo de periodismo signific¨®:
- Amenazas de muerte
- Atentados
- Persecuci¨®n judicial (m¨¢s de 300 denuncias penales desde el a?o 2000; 198 de estas denuncias entre 2013 y 2014)
- Persecuci¨®n fiscal (seis funcionarios de la superintendencia de impuestos con oficinas en el diario entre 2000 y 2004 y entre 2012 y 2015)
- Llamadas telef¨®nicas en las madrugadas por a?os
- Estrechos seguimientos a mi esposa y a mis hijos por d¨¦cadas
- Exilio permanente de periodistas del diario
- M¨¢s de 30 disparos en las calles de la ciudad por el narcoministro de la defensa de turno
- Severo boicot publicitario como resultado de coacci¨®n y persecuci¨®n del Estado y sus instituciones a nuestros anunciantes privados
- Descomunales campa?as de descr¨¦dito y desprestigio en el monopolio de televisi¨®n y el oligopolio de radio en los horarios de mayor audiencia
- Misiones nocturnas de helic¨®pteros militares sobre mi residencia
- Manifestaciones de empleados p¨²blicos frente a las oficinas del diario
- Allanamiento furtivo de la elite de contrainteligencia militar en mi residencia durante tres horas en las que fuimos golpeados y sometidos a vej¨¢menes f¨ªsicos y psicol¨®gicos
- Exilio de mi familia
- Asesinato del gerente de una industria en la que era socio minoritario, a quien cortaron los dedos de manos y pies, degollaron y tiraron en un pozo miembros del ej¨¦rcito de Guatemala y cuya familia vive en el exilio forzado en Alemania
- ?rdenes de restricci¨®n para salir del pa¨ªs en tanto estaba siendo perseguido judicialmente por el presidente y la vice presidenta de la rep¨²blica
Y mi detenci¨®n ilegal, que me llev¨® a experimentar una larga siesta con la muerte, desnudo, por m¨¢s de 16 horas en las monta?as, a m¨¢s de 50 kil¨®metros de la ciudad, sufriendo hipotermia, en un basurero clandestino, mientras los zopilotes volaban en c¨ªrculos sobre m¨ª, para disputarse mi cad¨¢ver con hormigas, perros y ratas hambrientas. Como da?o colateral, sufr¨ª un severo estr¨¦s postraum¨¢tico que me agobi¨® por eternos 11 meses en los que anduve inconscientemente en busca de la muerte.
En varias ocasiones y con diferentes gobiernos estuve al borde de la c¨¢rcel, nuestra planta de producci¨®n fue cercada por 200 oficiales disfrazados de polic¨ªas civiles para impedir la circulaci¨®n de la edici¨®n del diario, en dos ocasiones contrataron sicarios del c¨¢rtel del Golfo de Honduras para asesinarme, colapsaron nuestra p¨¢gina web en 14 ocasiones con la complicidad de la telef¨®nica de Slim, y destruyeron 14 a?os de nuestros archivos digitales. Nos espiaban constantemente y llegaron al extremo de negar p¨²blicamente investigaciones period¨ªsticas y noticias que a¨²n no hab¨ªamos publicado. Para evitar el espionaje tuve que trabajar en casa con periodistas extranjeros y aun as¨ª, antes de llegar a la planta de producci¨®n, los trabajos de investigaci¨®n period¨ªstica llegaron a la Casa Presidencial.
Comparto mi convicci¨®n que nuestro verdadero desaf¨ªo es vencer nuestros propios miedos y nuestra natural e inevitable cobard¨ªa, que representan los ¨²nicos obst¨¢culos para hacer frente a nuestro pervertido y siniestro status quo. La sobrevivencia de una genuina empresa period¨ªstica en muchos de nuestros pa¨ªses se trata, simplemente, de tener tenacidad en medio de un ambiente hostil, de trabajar con honestidad e integridad en medio de un contexto corrupto, capaz de corromper a cualquiera.
Es preferible morir de pie, como lo hicieron, entre otros ¨ªconos del periodismo independiente, Pedro Joaqu¨ªn Chamorro y Guillermo Cano, que vivir arrodillados, avergonzados y vencidos por ese lado obscuro que todos los seres humanos tenemos. El ¨²nico enemigo que debemos vencer es a nosotros mismos. Si nos vencemos a nosotros mismos, nadie puede derrotarnos ni detenernos.
Quisiera terminar compartiendo con ustedes una convicci¨®n de Octavio Paz: la libertad no es un concepto ni una creencia. La libertad no se define: se ejerce. Es una apuesta. La prueba de la libertad no es filos¨®fica sino existencial: hay libertad cada vez que un hombre libre, cada vez que un hombre en contra de la corriente, en soledad y en la marginalidad,a?ado yo, se atreve a decir ¡°No¡± al poder. No nacemos libres: la libertad es una conquista, y m¨¢s que una conquista una invenci¨®n que se ejerce al expresar lac¨®nicamente ¡°No Quiero¡± al poder establecido.
Siempre he dicho que Guatemala es un laberinto perfecto, es decir, sin salida. Con mayor amplitud y lucidez asombrosa Gabo escribi¨® de Guatemala: ¡°Muy pocos han padecido una represi¨®n tan atroz, tan intensa y prolongada, y ninguno la ha sobrellevado con tanta soledad. Guatemala patria de volcanes acezantes y aves del para¨ªso, es uno de los pa¨ªses m¨¢s hermosos del mundo, y tambi¨¦n de los m¨¢s desdichados.¡± Donde el a?ejo fascismo criollo dominante ¡°casi siempre se le ve la mano de rapi?a, recurrente y feroz, la extrema mano derecha de destripador que tira la piedra y esconde el cuerpo entero¡± en sus extensos cementerios clandestinos. Donde ¡°la utop¨ªa ¨C honorosa ¨C es de que el ant¨ªdoto para el comunismo e incluso para la derecha moderna y progresista no es la inteligencia, si no el terror.¡± ¡°La represi¨®n guatemalteca es peor que las otras, no tanto por su intensidad insaciable, ni por su ferocidad descorazonada, ni por su antig¨¹edad prehist¨®rica, sino porque ya no queda casi nadie en el mundo que se acuerde de ella.¡±
Sin embargo, debido a sus excesos y abusos, la Fundaci¨®n Gabo entre otras importantes organizaciones y pa¨ªses, la pusieron una vez m¨¢s en el mapa para fortuna de los guatemaltecos. La entrega del premio Gabo no solo honra al periodismo independiente, sino que tambi¨¦n es un encuentro propicio para deliberar sobre la importancia capital de ampliar y expandir los espacios de libertad de prensa, de reivindicar el periodismo riguroso, ambos pilares claves de las genuinas democracias, con instituciones y procesos electorales que garanticen la justicia y la transparencia electoral.
Adem¨¢s, es momento tambi¨¦n de hacer un alto y filosofar someramente que el periodismo es visto por las ¨¦lites¡ªque representan menos del 1% de la poblaci¨®n, pero poseen m¨¢s del 95% de la econom¨ªa¡ª como una especie de sacerdocio con voto militante de pobreza. ?lites que suelen considerar a los periodistas como un grupo peculiar de alba?iles de las letras y la cultura, por cierto, bohemios y ¡°hippies¡± exc¨¦ntricos, en su mayor¨ªa comunistas. Sin embargo dejando de lado a quienes tienen como caracter¨ªsticas distintivas ¡°clich¨¦s¡± simplistas y peyorativos irrelevantes, es mejor parafrasear la fant¨¢stica canci¨®n que Shakira escribi¨® para la memorable pel¨ªcula Amor en Tiempos de C¨®lera ¨C basada en la novela de nuestro premio Nobel de literatura Gabriel Garc¨ªa M¨¢rquez, para mi gusto el columnista m¨¢s notable que jam¨¢s he le¨ªdo. A prop¨®sito de los amores y pasiones entre el periodista y el periodismo, dice la canci¨®n: ¡°Son amores que se vuelven resistentes a los da?os, como el vino que mejora con los a?os; son amores que se esperan al invierno y florecen, que parece que se acaban pero en las noches del oto?o reverdecen¡±.
En nombre de la prensa independiente y los periodistas de la regi¨®n, de los y las periodistas de todas las ¨¦pocas de elPeri¨®dico, de Minay¨² mi esposa, de Jos¨¦ Carlos, Rodrigo y Ram¨®n Ignacio, mis hijos, de Carmen, Marina, Mar¨ªa Mercedes Marroqu¨ªn y Felicita Oliva Rivera, es decir el matriarcado que me malcri¨®, mi abuelo Clemente, mis hermanos Zamora, Marroqu¨ªn, Fern¨¢ndez, y en el m¨ªo propio, agradezco y valoro en su enorme dimensi¨®n la decisi¨®n del Consejo Rector de la Fundaci¨®n Gabo de prodigarme el honor invaluable que me han conferido, que profundiza mis convicciones por un periodismo libre de ataduras, audaz y sobre todo irreverente y dispuesto a correr altos niveles de riesgo frente al poder establecido, que por fortuna, s¨ª tiene quien le escriba a lo largo y ancho del hemisferio.
Abuso de este espacio para no perder las formas tropicales, y agradecerles tambi¨¦n a nuestros amigos entra?ables, que incesantemente nos han llenado de afecto, fe y coraje.
Muchas gracias.
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