Karol Zapata: la ciencia como ¡®un acto de revoluci¨®n¡¯ en un entorno dif¨ªcil

¡°Querer estudiar y no tener los recursos ha sido uno de mis mayores desaf¨ªos¡±, admite Karol Zapata (Medell¨ªn, 35 a?os). Un desaf¨ªo, pero jam¨¢s un impedimento. La muestra de ello es que en la actualidad combina la docencia con la investigaci¨®n: es pasante posdoctoral del Grupo de investigaci¨®n fen¨®menos de superficie Michael Polanyi, de la Universidad Nacional (sede Medell¨ªn), y su trayectoria incluye m¨¢s de 20 publicaciones cient¨ªficas en revistas indexadas y la participaci¨®n en m¨¢s de 15 eventos cient¨ªficos dentro y fuera de Colombia.

¡°Siempre quiero dar no mi 100, sino mi 30%. Me comprometo con cada proyecto de una forma muy profunda y, por mi naturaleza, siempre creo que puedo dar m¨¢s y los resultados me confirman que ese adicional marca la diferencia¡±, afirma la doctora Zapata, quien recientemente recibi¨® el Premio para las Mujeres en la Ciencia de L¡¯Or¨¦al y la Unesco por su trabajo con la flor del cannabis.

Este reconocimiento impulsar¨¢ su investigaci¨®n sobre el CBD, una idea que trabaja con su disc¨ªpula en formaci¨®n, la ingeniera qu¨ªmica Angie V¨¦lez. ¡°Nuestro proyecto a¨ªsla el CBD, un cannabinoide con potencial terap¨¦utico, y lo integra en un material que lo libera de manera controlada, directamente en el intestino, para mejorar su absorci¨®n y efectividad¡±, explica.

La dupla tambi¨¦n explora la capacidad del CBD para inhibir el crecimiento de c¨¦lulas tumorales de c¨¢ncer de colon, sin efectos adversos en c¨¦lulas sanas. Adem¨¢s, investigaciones recientes destacan su capacidad antioxidante, asociada con la prevenci¨®n de enfermedades como diabetes, estr¨¦s oxidativo, envejecimiento y c¨¢ncer. Ambas investigaciones han sido publicadas en prestigiosas revistas cient¨ªficas, como ACS (American Chemical Society) y Pharmaceutics.

Si bien es cierto que en el mercado colombiano existen muchos productos derivados del cannabis, la mayor¨ªa se est¨¢n desarrollando sin un soporte cient¨ªfico: ¡°Muchos no cumplen con la cantidad de mol¨¦culas bioactivas que informan¡±, asegura Zapata.

No es todo. La doctora Zapata quiere aprovechar todo el conocimiento que se tiene de esta planta, no solo para darle un uso terap¨¦utico, sino para involucrar a las comunidades que hist¨®ricamente han cultivado cannabis. Adem¨¢s, est¨¢n apelando a la econom¨ªa circular para aprovechar el c¨¢?amo, una parte de la planta de cannabis que no tiene uso espec¨ªfico, para que sea el soporte de la mol¨¦cula.

¡°Los cient¨ªficos estamos llamados a integrar las necesidades del entorno que nos rodea, no solo a contribuir con el conocimiento, sino que ese conocimiento sea ¨²til, tanto para la comunidad como para el consumidor final. Y que permita atender a los grupos m¨¢s marginados y vulnerados, entre ellos las mujeres¡±.

La doctora Zapata ha hecho toda su formaci¨®n gracias a becas y ayudas econ¨®micas. Desde muy peque?a, en el barrio Manrique Oriental, en la Comuna 3 de Medell¨ªn, donde creci¨®, comprendi¨® que la educaci¨®n podr¨ªa ser el camino hacia un futuro mejor. ¡°Le ten¨ªa mucho miedo a ese ambiente violento, y la academia me ofrec¨ªa paz, tranquilidad y felicidad¡±, cuenta.

Cuando ten¨ªa 10 a?os, su madre, que era cabeza de familia, tom¨® la decisi¨®n de salir del barrio porque no lo consideraba id¨®neo para la crianza de sus dos hijos adolescentes y de su hija peque?a. Se fueron a Copacabana, en el Valle de Aburr¨¢, a 35 minutos de Medell¨ªn, un lugar m¨¢s rural y pac¨ªfico donde viv¨ªa la familia materna.

En el nuevo colegio, Zapata sigui¨® destac¨¢ndose hasta terminar el bachillerato. Ser la mejor de su promoci¨®n le vali¨® una beca que cubr¨ªa media matr¨ªcula en una universidad privada. Pero segu¨ªa siendo inalcanzable. Decidi¨® presentarse en la Universidad Nacional, en Medell¨ªn, e ingres¨® en Ingenier¨ªa Biol¨®gica, una carrera que llam¨® su atenci¨®n porque conten¨ªa una materia que le fascinaba: la biolog¨ªa. En el cuarto semestre, se incorpor¨® al primer grupo de investigaci¨®n y sell¨® su futuro como investigadora cient¨ªfica.

Tras terminar su carrera, aprovech¨® su excelencia acad¨¦mica para aplicar al programa J¨®venes investigadores e innovadores del Ministerio de Ciencias, lo que le permiti¨® cursar la maestr¨ªa.

Su esfuerzo comenz¨® a dar frutos. Gracias a su experiencia como monitora en el pregrado, desempe?¨® ese rol en el postgrado, y eso no solo le gener¨® ingresos econ¨®micos, sino que le abri¨® camino de la ense?anza. Continu¨® con estudios doctorales en Biotecnolog¨ªa, tambi¨¦n en la Universidad Nacional, y al terminar, la contrataron como docente de Qu¨ªmica en la misma instituci¨®n.

De peque?a, Zapata no tuvo referentes de mujeres dedicadas a la ciencia. Hoy, admite que le hubiera convenido conocer esas historias, porque as¨ª habr¨ªa tenido m¨¢s certeza de que s¨ª era posible. Por eso quiere encarnar ese referente en el que las ni?as y j¨®venes se inspiren para seguir el rumbo de la ciencia. ¡°La academia puede ser ese salvavidas que cambie la realidad adversa; que lo tomen como un acto de revoluci¨®n hacia ese entorno complejo. S¨ª se puede y es una manera de hacer una vida bonita y feliz¡±.

*Apoyan Ecopetrol, Movistar, Fundaci¨®n Corona, Indra, Bavaria y Colsubsidio.