Sergio Fajardo: ¡°Colombia est¨¢ condenada a cuatro a?os de populismo¡±
Entre Gustavo Petro y Rodolfo Hern¨¢ndez, el excandidato del centro ha optado por el voto en blanco, como ya lo hizo en 2018. ¡°No me fui a ver ballenas, reivindico una forma de la pol¨ªtica¡±.
Sergio Fajardo (Medell¨ªn, 65 a?os) se muestra tranquilo con su decisi¨®n, largamente meditada. Acaba de anunciar la ma?ana de este jueves que entre Gustavo Petro y Rodolfo Hern¨¢ndez, piensa votar en blanco en la segunda vuelta presidencial del 19 de junio, como ya lo hab¨ªa hecho en 2018. En esta campa?a, a la cabeza de la disuelta Coalici¨®n Centro Esperanza, que se caracteriz¨® por sus numerosos desencuentros, obtuvo el 4,2% de los votos en la primera vuelta y qued¨® fuera de la carrera, en un distante cuarto puesto.
Instantes antes de atender a EL PA?S en la sala de su apartamento sobre los cerros orientales de Bogot¨¢, con vista a una quebrada, termina una videoconferencia con el Tec de Monterrey, donde da clase, pues nunca ha abandonado sus actividades acad¨¦micas. Matem¨¢tico de profesi¨®n, m¨¢s de 20 a?os despu¨¦s de haber incursionado en la arena electoral todav¨ªa se percibe como un profesor que hace pol¨ªtica, m¨¢s que como un pol¨ªtico profesional.
Entre los argumentos sobre su voto que public¨® en sus redes sociales, esgrime que ¡°Petro es un l¨ªder mesi¨¢nico y autoritario¡± que ofrece programas ¡°imposibles¡±, mientras que Hern¨¢ndez ¡°conoce poco el pa¨ªs y su experiencia gobernando y en pol¨ªtica es limitada¡±. ¡°Yo no tengo por qu¨¦ salir a decir cu¨¢l es menos malo¡±, defiende el exalcalde de Medell¨ªn en esta entrevista. Su anuncio, por coincidencia, ocurre en medio de la polvareda por la filtraci¨®n de una serie de grabaciones en las que miembros de la campa?a de Petro discuten estrategias para desacreditar a sus adversarios pol¨ªticos.
Pregunta. Acaba de anunciar que va a votar en blanco en la segunda vuelta, como ya lo hizo hace cuatro a?os. ?Cu¨¢l fue la reflexi¨®n que lo llev¨® a esa decisi¨®n?
Respuesta. Son muchas cosas, no es lo mismo que hace cuatro a?os. Desde el momento en que vot¨¦ en blanco en el 2018 he estado sujeto a todo tipo de ataques, de agresiones, en t¨¦rminos pol¨ªticos. Todo esto me ha servido para cambiar, para entender mejor, para transformarme yo. Hice una reflexi¨®n acerca de lo que hab¨ªa significado, por qu¨¦ votar en blanco tuvo ese impacto. Y hoy, despu¨¦s de cuatro a?os de vivir todo lo que he vivido, de pensarlo, vuelvo y voto en blanco.
P. ?Podr¨ªa sintetizar sus razones?
R. Yo era perfectamente consciente de que Colombia iba a cambiar. Lo que ocurri¨®, que tiene una dosis de sorpresa asociada con la figura de Rodolfo Hern¨¢ndez, fue que Colombia vot¨® por el cambio. Desde la perspectiva del mundo de Petro, yo era el obst¨¢culo mayor. Despu¨¦s de las elecciones de 2018, al estar muy cerquita de pasar a la segunda vuelta, dise?aron una estrategia para cancelarme, borrarme en t¨¦rminos pol¨ªticos de la vida p¨²blica. Despu¨¦s de pasar por la campa?a, despu¨¦s de la experiencia de la coalici¨®n, despu¨¦s de todo eso, creo todav¨ªa, con profunda convicci¨®n, que hay que luchar por una forma de hacer pol¨ªtica que es distinta a la de Gustavo Petro y a la de Rodolfo Hern¨¢ndez. Con el voto en blanco estoy tomando una decisi¨®n pol¨ªtica, reivindicando una forma de la pol¨ªtica, minoritaria hoy, sin duda alguna. No es indiferencia, es una posici¨®n cr¨ªtica.
P. ?No equivale a volver a irse a ver ballenas, como tanto se lo criticaron entonces?
R. No. Estoy activo, aqu¨ª estoy; escribiendo, discutiendo, participando. Me siento orgulloso de la campa?a que hicimos. Ahora, entiendo que no era lo que estaban esperando las personas en Colombia. Yo no me fui a ver ballenas, estoy reivindicando una forma de la pol¨ªtica. Estoy haciendo pol¨ªtica. Tengo el esp¨ªritu tranquilo, estoy en paz y convencido de lo que hago. Tranquilo y contento. Sigo luchando.
P. Muchos consideran que se ha incrementado mucho el costo pol¨ªtico de no tomar partido¡
R. Es que estoy tomando partido. Estoy tomando una posici¨®n, y la estoy defendiendo. En el escrito puse tres principios. Primero, son los medios los que justifican el fin; segundo, las personas y las propuestas no se pueden separar; tercero, de la forma como se llega al poder, as¨ª se gobierna. Soy perfectamente consciente, esto es una posici¨®n y estoy dispuesto a debatirla.
P. Ante los resultados del Gobierno de Iv¨¢n Duque, que usted ha calificado de ¡°malo en todos los sentidos¡±, ?nunca ha lamentado haberse mantenido en el voto en blanco?
R. No, esa es una forma torpe de pensar las cosas. Votar en blanco significa que ninguno de los dos me gusta, que no estoy dispuesto a apoyarlos. No me arrepiento. Pero no es por orgullo, no es por soberbia, no es por ego, sino que es una decisi¨®n consciente.
P. ?Est¨¢ Colombia condenada a cuatro a?os de populismo, gane quien gane?
R. S¨ª. Para el que le toque, as¨ª hubiera sido yo, va a ser muy dif¨ªcil gobernar. Hay mucha expectativa. Las promesas de resolver r¨¢pidamente los malestares y la inconformidad, que de eso se trata el populismo, se van a ver frustradas muy r¨¢pido. ?Qu¨¦ viene despu¨¦s? Una posibilidad es la explosi¨®n [social]. Veo un panorama muy complicado, ojal¨¢ est¨¦ equivocado. Eso de unir al pa¨ªs es muy necesario, pero no veo c¨®mo lo van a hacer. Frustraci¨®n, y despu¨¦s de la frustraci¨®n viene explosi¨®n o autoritarismo.
P. ?Atribuye esos conceptos a alguno de los dos?
R. Est¨¢ claro. ?Cu¨¢l cree usted que va con uno o con el otro? Est¨¢ f¨¢cil.
P. ?Piensa volver a presentarse a unas elecciones?
R. No lo he considerado. Lo que tengo claro es que comet¨ª un error la vez pasada cuando dije que me iba a salir de la pol¨ªtica y quer¨ªa ser rector. Despu¨¦s correg¨ª. Una parte muy importante de mi vida es la pol¨ªtica y lo p¨²blico. Seguir¨¦ luchando por estas ideas y estas propuestas.
P. ?Sergio Fajardo, el pol¨ªtico, no ha dicho la ¨²ltima palabra?
R. No. Estoy luchando por unas ideas, por una forma de hacer la pol¨ªtica. Yo creo, est¨¢ por verse, que muy pronto nos dir¨¢n ¡®esto es valioso¡¯.
P. ?C¨®mo se explica que al centro pol¨ªtico le haya ido tan mal en estas elecciones?
R. Lo hicimos muy mal en el marco de la coalici¨®n. Es una experiencia muy traum¨¢tica para m¨ª. Yo le dediqu¨¦ dos a?os y medio de la vida a tratar de luchar por esa coalici¨®n, y no fuimos capaces de consolidarla, de hacerla seria, de ocupar el espacio que yo creo que ocupamos en Colombia. Eso es lamentable. Hago parte de ese grupo en el que no fuimos capaces de consolidar una verdadera propuesta de centro. Lo que ocurri¨® adentro de la coalici¨®n fue muy lamentable.
P. ?Su relaci¨®n con Alejandro Gaviria qued¨® fracturada?
R. Prefiero no hablar de Alejandro Gaviria despu¨¦s de lo que vi y conoc¨ª.
P. Otras figuras de centro como Luis Gilberto Murillo, que era su f¨®rmula, han apoyado a Petro para la segunda vuelta. Usted ya dec¨ªa en octubre en una entrevista con este peri¨®dico que no se unir¨ªa con Petro bajo ninguna circunstancia. ?Concede que hay tambi¨¦n razones personales detr¨¢s de sus desencuentros?
R. Claro que s¨ª, ah¨ª est¨¢ escrito. Pero lo personal es una muestra de un comportamiento general. Lo asumo como personal, pero me permite ilustrar una forma de actuar de la pol¨ªtica, que no es solamente un problema con un individuo.
P. Su programa y el de Petro tienen varios puntos de encuentro. ?Desconf¨ªa m¨¢s de la persona que de su programa?
R. Las propuestas no se pueden separar de la persona que lidera esa propuesta. Est¨¢n ¨ªntimamente ligadas. En un debate le demostr¨¦ que esas propuestas que ¨¦l hace son irrealizables, son medidas populistas, enga?osas. Si llegara al poder se convertir¨ªa en una frustraci¨®n muy grande para el pa¨ªs.
P. Petro dijo en los debates que a ¨¦l s¨ª le gustar¨ªa tenerlo a usted como ministro.
R. Hay una incompatibilidad ¨¦tica. Esa palabra le fastidia a muchas personas que dicen que es superioridad moral; no lo es. No puedo trabajar con una persona que al diferente lo tiene que destruir. No quiero una persona como ¨¦l siendo presidente de mi pa¨ªs.
P. Usted tuvo acercamientos frustrados con el otro finalista. ?Qu¨¦ tan fluidas o qu¨¦ tan hostiles fueron las reuniones con Rodolfo Hern¨¢ndez y su equipo?
R. He tenido siempre una relaci¨®n amable con Rodolfo Hern¨¢ndez. Nosotros nos acercamos con una propuesta, conversamos acerca de las coincidencias o las divergencias y nos comprometimos a presentar un documento para discutir con ¨¦l, teniendo claridad de que en muchas propuestas estamos en franca contradicci¨®n. Nos ¨ªbamos a sentar y ¨¦l sali¨® con esa expresi¨®n desafortunada de que era una cortes¨ªa, que nosotros pretend¨ªamos imponerle a ¨¦l un programa. Es falso que fuera una cortes¨ªa, ¨¦l me pidi¨® a m¨ª que convers¨¢ramos. Nunca le pretendimos imponer nada. ?l lo que necesita o quiere es que haya adhesiones, lo que significa firmarle un cheque en blanco. Y desde la pol¨ªtica que hemos hecho toda la vida, eso no funciona. Estamos en una nebulosa que depende de un individuo que tiene una personalidad particular. No es Rodolfo Hern¨¢ndez la persona para apoyar en este momento.
P. ?Se enteraron por los medios de que ¨¦l daba los di¨¢logos por concluidos?
R. S¨ª, pero adem¨¢s hab¨ªamos entregado el documento. Supuestamente al otro d¨ªa lo ¨ªbamos a discutir y antes de hacerlo sale y dice todo lo que dijo. Es una forma descort¨¦s y grosera de hacer las cosas.
P. Otras figuras pol¨ªticas consideran que usted ha subestimado los riesgos de un Gobierno de Rodolfo Hern¨¢ndez.
R. Estoy diciendo exactamente lo que pienso. Ahora me convert¨ª yo, el derrotado, en el responsable. Voten por el que quieran. Pero esos argumentos que puse son los que yo creo, por los que he luchado.
P. Hern¨¢ndez y usted tienen una actitud diametralmente opuesta hacia el conocimiento y el ejercicio pol¨ªtico
R. S¨ª, es muy dif¨ªcil encontrar dos personas m¨¢s diferentes que Rodolfo y yo. Siempre he hablado de la lucha contra la corrupci¨®n, es a ¨¦l al que le creyeron y al que la gente escuch¨®. Es un fen¨®meno pol¨ªtico. Rodolfo, un se?or que tiene 77 a?os, que fue alcalde de Bucaramanga, que le peg¨® una bofetada a un concejal, hoy tiene una muy alta probabilidad de ser el presidente de Colombia. Es un reflejo de la sociedad, y ¨¦l lo supo entender.
P. Hern¨¢ndez est¨¢ investigado por corrupci¨®n, y sin embargo se apropi¨® del discurso anticorrupci¨®n. ?En qu¨¦ momento el centro perdi¨® esa bandera?
R. Las confrontaciones internas dentro de la Coalici¨®n Centro Esperanza no permitieron construir un verdadero proyecto. Perdimos esa bandera, y pr¨¢cticamente todas las banderas.
P. ?Se ve¨ªa de nuevo en una coalici¨®n con Ingrid Betancourt, que abandon¨® la Coalici¨®n Centro Esperanza en medio de acusaciones y adhiri¨® a Hern¨¢ndez antes de primera vuelta?
R. La experiencia con Ingrid Betancourt fue p¨¦sima. Yo no la repetir¨ªa.
P. ?Siente que se ha quedado solo?
R. No, es natural que unos vayan para un lado y para otro, as¨ª como yo me voy por el voto en blanco. Algunos tienen intereses de diferente naturaleza. Por ejemplo, Luis Gilberto Murillo, que me cae muy bien, me dice ¡°yo tengo que estar con Francia M¨¢rquez¡±. Viene de la regi¨®n del Pac¨ªfico, puede tener discrepancias pero no puede estar en contra de Francia M¨¢rquez. Yo lo entiendo perfectamente. M¨¢bel Lara tambi¨¦n, y eso no me molesta. Yo estoy explicando las razones que yo tengo, cada quien tendr¨¢ las suyas y evaluar¨¢. Esto se termina el 19 de junio y m¨¢s pronto que tarde van a ver el valor de lo que significa lo que yo represento.
P. Su biograf¨ªa pol¨ªtica se titula El poder de la decencia (Ariel, 2017). ?Esa idea ha perdido atractivo como bandera electoral?
R. S¨ª, claro. La decencia no est¨¢ de moda, no es viral. La seriedad no es viral, la transparencia no es viral, no despiertan emociones. Durante la campa?a se?alaba que Colombia tiene miedo, rabia, incertidumbre, est¨¢ indignada. A quien le toque le va a quedar muy dif¨ªcil. Ya veremos.
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