La mexicana que saca las cuentas del cambio clim¨¢tico: ¡°Am¨¦rica Latina no sabe cu¨¢nto le va a costar¡±
Sandra Guzm¨¢n, fundadora del Grupo de Financiamiento Clim¨¢tico para Latinoam¨¦rica y el Caribe, explica qu¨¦ pa¨ªses de la regi¨®n tienen mejores finanzas sostenibles
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¡°Los pa¨ªses de Am¨¦rica Latina no saben cu¨¢nto les costar¨¢ enfrentar el cambio clim¨¢tico¡±, es una de las primeras cosas que aclara Sandra Guzm¨¢n (39 a?os, Estado de M¨¦xico), fundadora del Grupo de Financiamiento Clim¨¢tico para Latinoam¨¦rica y el Caribe (GFLAC) ¡°Son muy pocos los que han hecho ese ejercicio¡±, asegura. Como cabeza de esta organizaci¨®n y doctora en pol¨ªtica de la Universidad de York (Reino Unido), Guzm¨¢n ha trabajado en entender un tema que a muchos asusta: qu¨¦ tanto invierten los pa¨ªses de la regi¨®n en el cambio clim¨¢tico y qu¨¦ tanto lo hacen en industrias dependientes del carbono. Tambi¨¦n, ha perseguido la respuesta a varias preguntas que hoy siguen sin tener luces: ?cu¨¢nta plata necesita Latinoam¨¦rica y el Caribe para prepararse al cambio clim¨¢tico? Si quieren cumplir con lo que prometieron ante al Acuerdo de Par¨ªs sobre calentamiento global, ?cu¨¢nto deben sacarse del bolsillo y cu¨¢nto pueden pedir a otros pa¨ªses o donantes?
Desde hace dos a?os, con GFLAC, cre¨® el ?ndice de Finanzas Sostenibles, una herramienta que ayuda a mapear qu¨¦ tan alta o baja es la inversi¨®n p¨²blica en cambio clim¨¢tico de cada pa¨ªs de la regi¨®n. Con este y otros ejercicios, adem¨¢s, se ha acercado a cifras como que a los 21 principales pa¨ªses emisores de Am¨¦rica Latina les costar¨¢ alrededor de 25.000 millones de d¨®lares poder cumplir lo que se comprometieron bajo el Acuerdo de Par¨ªs, con base en c¨¢lculos que hicieron a partir de los cinco de esos 21 pa¨ªses.
Pregunta. ?Por qu¨¦ se lanzan a crear el ?ndice de Finanzas Sostenibles y en qu¨¦ consiste?
Respuesta. Porque no todos los pa¨ªses tienen claras sus cuentas clim¨¢ticas. Por eso, desde GFLAC creamos, desde hace un par de a?os, un ?ndice de Finanzas Sostenibles, en el que no solo vemos cu¨¢nto le est¨¢ llegando a cada pa¨ªs por temas de cambio clim¨¢tico, sino por finanzas intensivas en carbono. Es decir, cu¨¢nta plata reciben por actividades que generan el cambio clim¨¢tico. No solo podemos ver la parte bonita: cu¨¢nto estoy incrementando mi flujo en billones de d¨®lares para combatir el cambio clim¨¢tico, cuando a¨²n hay financiamiento que va a actividades intensivas en carbono. Por ejemplo, M¨¦xico es uno de los pa¨ªses con finanzas sostenibles m¨¢s bajas y lo entiendes porque tambi¨¦n depende mucho de los combustibles f¨®siles para generar ingresos. Las econom¨ªas son complejas y hay que entender que no solo es si los pa¨ªses gastan en mitigar o adaptarse al cambio clim¨¢tico, sino qu¨¦ tan metida est¨¢ su estructura en econom¨ªas intensivas en carbono, porque, si es as¨ª, el desacoplamiento de la econom¨ªa de las emisiones no es tan sencillo.
P. Justamente el ¨²ltimo ?ndice que publicaron ¨C en 2022, pero con datos de 2021 ¨C encontr¨® que M¨¦xico, Uruguay y Trinidad y Tobago son los pa¨ªses de la regi¨®n con peores finanzas sostenibles. ?Qu¨¦ est¨¢ pasando ah¨ª?
R. Son casos muy diferentes cada uno. En M¨¦xico es porque es un pa¨ªs que, como lo dije, sus ingresos dependen much¨ªsimo de actividades intensivas en carbono. Es decir, ingresos que vienen de la venta de petr¨®leo y de su exportaci¨®n. Eso le trae mucho capital y, por ende, hay mucha inversi¨®n p¨²blica en este tema. De hecho, el presupuesto p¨²blico en econom¨ªas intensivas en carbono en M¨¦xico se increment¨® much¨ªsimo en este sexenio. Entonces, si se compara lo que gasta el pa¨ªs para atender el cambio clim¨¢tico, es solo el 0,05% del total del presupuesto. En el caso de Trinidad y Tobago es parecido en el sentido de que, a pesar de ser una econom¨ªa caribe?a y peque?a, tambi¨¦n depende mucho de los combustibles f¨®siles. No han logrado desacoplar sus finanzas del carbono. Y, bueno, finalmente el caso de Uruguay es interesante porque, si bien han invertido mucho en energ¨ªas renovables, no se trata de inversiones p¨²blicas, sino primariamente privadas. Entonces lo que se identifica desde el an¨¢lisis de lo p¨²blico es que sigue estando muy asociado a actividades intensivas en carbono y hay poca inversi¨®n p¨²blica etiquetada en renovables. Ahora, tambi¨¦n hay algo interesante con este pa¨ªs y es que, a diferencia de la mayor¨ªa de los pa¨ªses, tampoco tiene informaci¨®n desagregada. Por ejemplo, en temas de cambio clim¨¢tico no tiene casi presupuesto etiquetado como tal. Entonces, en el punto de transparencia, que tambi¨¦n analizamos con el ¨ªndice, Uruguay tiene mucho que mejorar.
P. En el otro lado est¨¢n los pa¨ªses con un mejor ¨ªndice que, justamente, son los centroamericanos. ?Qu¨¦ es lo que est¨¢n haciendo bien?
R. Bueno, en general aparecen alto porque ¨²ltimamente los pa¨ªses de Centroam¨¦rica han hecho asignaciones mayores a los temas de cambio clim¨¢tico y sostenibilidad respecto a sus presupuestos totales. Obviamente, sus presupuestos totales no son muy grandes, entonces se podr¨ªa decir que lo que han aumentado es relativamente poco en cuanto a la cantidad de presupuesto. Pero s¨ª han aumentado mucho en cuanto a etiquetas de inversi¨®n clim¨¢tica se refiere. Por ejemplo, Nicaragua, El Salvador y Honduras, han hecho cada vez m¨¢s asignaciones presupuestales etiquetadas como cambio clim¨¢tico. Ahora, tambi¨¦n hay que decir que yo he recibido comentarios de colegas de Nicaragua que piensan que este Gobierno usa el cambio clim¨¢tico como una bandera, pero no necesariamente le interesa. Entonces tambi¨¦n eso es un poco un tema que est¨¢ a discusi¨®n, ?qu¨¦ est¨¢ pasando ah¨ª? Porque a lo mejor hay una etiquetaci¨®n que no es del todo adecuada, pero, bueno, esa es la informaci¨®n p¨²blica que existe. Lo que s¨ª hemos observado, y esto es importante decirlo, es que los pa¨ªses de Centroam¨¦rica son mucho m¨¢s vulnerables al cambio clim¨¢tico y eso los ha obligado a tener una financiaci¨®n mucho m¨¢s robusta ante este fen¨®meno. Adem¨¢s, tienen un mejor balance porque tampoco son pa¨ªses petroleros, y eso los pone en ventaja para desacoplar sus econom¨ªas de las emisiones.
P. ?Y por qu¨¦ es tan importante que la regi¨®n y espec¨ªficamente cada pa¨ªs sepa cu¨¢nto exactamente le va a costar prepararse ante el cambio clim¨¢tico?
R. Porque ahora, a nivel global [y en el marco de las discusiones que se realizan en las Conferencias de Cambio Clim¨¢tico ¨C COP] se va a acordar una nueva meta de financiamiento clim¨¢tico, que debe ir m¨¢s all¨¢ de los 100.000 millones de d¨®lares por a?o que se comprometieron en 2009 los pa¨ªses desarrollados a dar a los pa¨ªses en desarrollo. Y si no sabemos cu¨¢nto necesitamos, entonces ?cu¨¢nto vamos a exigir? Pero, de nuevo, en Am¨¦rica Latina muy pocos han hecho ese ejercicio. M¨¦xico, Colombia y Chile tienen algo, pero se necesita claridad para exigirle a otros pa¨ªses y a los donantes.
P. A nivel global tambi¨¦n hay una brecha entre la plata, que se destina a mitigar el cambio clim¨¢tico y a adaptaci¨®n, que es menor. ?C¨®mo juega esto en Am¨¦rica Latina, una regi¨®n que no es principalmente emisora de gases de efecto invernadero?
R. Yo creo que ese es uno de los temas centrales. ?Qu¨¦ sucede con la adaptaci¨®n? Que cuando lo ves en el contexto de financiamiento, hay varios retos. Uno es que la adaptaci¨®n es muy dif¨ªcil de estimar en cuanto a costos, porque no es un cambio simplemente tecnol¨®gico. Lo segundo, es que a los donantes suelen querer anunciar las batallas como ganadas y para eso suelen medir todo en n¨²meros. Y como la adaptaci¨®n es a largo plazo, a veces no ves cambios sustantivos, no es tan tangible o f¨¢cil de medir. Lo ¨²ltimo es que la adaptaci¨®n, muchas veces, no da rendimientos financieros, y a los financiadores, particularmente al sector privado, no le interesa eso.
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