La justicia brasile?a investiga a Musk por atacar en X al juez que combate la desinformaci¨®n
El multimillonario amenaza con restaurar los perfiles de pol¨ªticos y ¡®influencer¡¯ de extrema derecha bloqueados por los tribunales
Elon Musk, el due?o de X (antes Twitter), ser¨¢ investigado en Brasil por posibles delitos de obstrucci¨®n a la Justicia e incitaci¨®n al crimen. As¨ª lo decidi¨® el domingo el juez del Tribunal Supremo Federal Alexandre de Moraes, el magistrado que en los ¨²ltimos a?os lider¨® la batalla contra la desinformaci¨®n en internet y se convirti¨® en el enemigo n¨²mero uno del bolsonarismo.
El rifirrafe entre los dos empez¨® cuando Musk, sin venir a cuento de nada, le dirigi¨® un comentario pregunt¨¢ndole ¡°por qu¨¦ est¨¢ exigiendo tanta censura en Brasil¡±. A ¨¦ste le siguieron otros, en los que amenazaba con restaurar los perfiles de varios l¨ªderes de la extrema derecha bloqueados por la Justicia en los ¨²ltimos a?os por atacar las instituciones y el sistema democr¨¢tico. Musk afirm¨® que lo har¨ªa aunque eso pusiera en riesgo su negocio y tuviera que cerrar X en Brasil. ¡°Ese juez ha traicionado descaradamente y repetidamente al pueblo brasile?o y su Constituci¨®n. Deber¨ªa dimitir o sufrir un impeachment¡±, lleg¨® a decir.
El regocijo fue m¨¢ximo entre las filas bolsonaristas. Muchos pol¨ªticos de primera l¨ªnea se lanzaron a postear en ingl¨¦s peticiones de ayuda internacional y r¨¢pidas s¨ªntesis sobre la supuesta persecuci¨®n a la que est¨¢n sometidos en Brasil para aprovechar que Musk hab¨ªa puesto el foco en el pa¨ªs. Incluso Bolsonaro colg¨® un video en el que aparece al lado del multimillonario, en 2022, con la leyenda: ¡°Musk es el mito de nuestra libertad¡±.
La respuesta de De Moraes a las declaraciones del CEO de X lleg¨® con rapidez. Orden¨® abrir una investigaci¨®n sobre la conducta del empresario y lo incluy¨® en el caso ya abierto sobre las llamadas ¡°milicias digitales¡±, los grupos organizados por el entorno de Bolsonaro para difundir noticias falsas, discursos de odio, atacar a opositores y jueces y poner en duda la fiabilidad del sistema electoral. Adem¨¢s, el juez orden¨® que X no desobedezca ninguna determinaci¨®n de la justicia brasile?a y estipul¨® una multa de 100.000 reales (casi 20.000 d¨®lares) por cada perfil que reactive de forma irregular. Entre los vetados por la justicia brasile?a est¨¢n, por ejemplo, el empresario Luciano Hang, el exdiputado Daniel Silveira (condenado a casi nueve a?os de c¨¢rcel por estimular actos antidemocr¨¢ticos) o el bloguero Allan dos Santos, pr¨®fugo en Estados Unidos. De momento no se han restaurado ninguno de esos perfiles.
En su decisi¨®n, el juez del Supremo brasile?o carg¨® con dureza contra Musk y su empresa: ¡°La flagrante conducta de obstrucci¨®n a la Justicia brasile?a, la incitaci¨®n al crimen, la amenaza p¨²blica de desobediencia de las ¨®rdenes judiciales y de la futura ausencia de cooperaci¨®n de la plataforma son una falta de respeto a la soberan¨ªa de Brasil¡±, expres¨®. En otro fragmento, en letras may¨²sculas, escribi¨®: ¡°?Las redes sociales no son tierra sin ley! ?Las redes sociales no son tierra de nadie!¡±.
Las declaraciones de Musk provocaron una fuerte indignaci¨®n en el Gobierno y el espectro progresista en general. El ministro de la Abogac¨ªa del Estado, Jorge Messias, por ejemplo, dijo que Brasil tiene que aprobar urgentemente una regulaci¨®n de las redes sociales para impedir que ¡°billonarios con domicilio en el extranjero¡± ataquen a la demcocracia brasile?a. Brasil hace tiempo que intenta, sin ¨¦xito, poner coto al todo vale que reina en internet, sobre todo por el profundo impacto que las noticias falsas y la desinformaci¨®n tuvieron en la vida pol¨ªtica de los ¨²ltimos a?os.
Hace justo un a?o, los congresistas brasile?os estuvieron a punto de votar el llamado proyecto de ley de las fake news, que trataba de poner algo de orden en internet. Se propon¨ªa, por ejemplo, responsabilizar a las plataformas en el caso de difusi¨®n de noticias falsas de forma masiva, a trav¨¦s de robots, y se les daba un plazo de 24 horas para eliminar contenido identificado como il¨ªcito por la Justicia. Las ¡®big tech¡¯ hicieron una fuerte campa?a en contra de la ley, que no lleg¨® a votarse. Tras las declaraciones de Musk, crece la presi¨®n para que la ley vuelva a los debates de los congresistas.
Siga toda la informaci¨®n de El PA?S Am¨¦rica en Facebook y X, o en nuestra newsletter semanal.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.