Vuelve la emergencia por la mpox: ?est¨¢ preparada Am¨¦rica Latina?

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Otra vez. La Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) declar¨® la mpox, conocida como viruela del mono, una emergencia de salud p¨²blica de importancia internacional el 14 de agosto. Han pasado poco m¨¢s de dos a?os desde que lo hizo por primera vez en 2022, solap¨¢ndose adem¨¢s con la emergencia por covid-19. En un doloroso y cansado d¨¦ja vu, hay preguntas que vuelven a apremiar: ?cu¨¢l es el riesgo para Am¨¦rica Latina? ?C¨®mo se puede preparar la regi¨®n? ?Qu¨¦ sabemos y qu¨¦ no?

La declaraci¨®n, que no significa que el brote de mpox tenga dimensiones pand¨¦micas, ha sacudido a quienes, hasta ahora, no le hab¨ªan puesto atenci¨®n a la situaci¨®n que atraviesan algunos pa¨ªses en el continente africano. En cifras de la OMS, los casos este a?o superan ya los diagnosticados en 2023, con 15.600 registros y 537 muertes. La inmensa mayor¨ªa se han dado en Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo, un pa¨ªs donde esta enfermedad es end¨¦mica, pero tambi¨¦n se han encontrado por primera vez contagios en pa¨ªses como Kenia, Ruanda o Uganda.

Adem¨¢s, la alarma cobra una urgencia especial por la ¡°r¨¢pida diseminaci¨®n de una nueva variante¡± en R. D. Congo, el clado 1b, en palabras de la OMS. Aunque todav¨ªa no hay datos concluyentes sobre su mayor capacidad de transmisi¨®n y letalidad, parece que presenta casos cl¨ªnicos m¨¢s graves y que, por ahora, tiene una tasa de mortalidad algo m¨¢s alta que en el brote de 2022. Es, seg¨²n el organismo mundial, ¡°una de las principales razones para declarar¡± la emergencia internacional.

Los escenarios que se abren para Am¨¦rica Latina son inciertos. En el brote de 2022 y 2023, la circulaci¨®n del mpox ¡°estuvo asociada a personas que hab¨ªan tenido registro de viajes a pa¨ªses donde la circulaci¨®n era bastante elevada, como Estados Unidos o pa¨ªses europeos¡±, recuerda Adri¨¢n D¨ªaz, investigador del Consejo Nacional de Investigaciones Cient¨ªficas y T¨¦cnicas de Argentina (Conicet). Por ahora, los Centros de Control y Prevenci¨®n de Enfermedades (CDC) de Europa reconocen un riesgo ¡°alto¡± de que el viejo continente registre casos de mpox importados desde el continente africano, pero determinan que el riesgo de una ¡°transmisi¨®n sostenida¡± es ¡°muy bajo¡±, ya que los casos se diagnostican ¡°con rapidez¡±. Los CDC de Estados Unidos advierten algo muy parecido. ¡°Uno podr¨ªa esperar el mismo escenario para los pa¨ªses de Am¨¦rica Latina, porque el intercambio comercial y de personas con [los pa¨ªses afectados] es muy bajo¡±, advierte D¨ªaz.

La densidad de poblaci¨®n y la higiene, claves en la transmisi¨®n

Sin embargo, eso no significa que el riesgo de que estos brotes de mpox lleguen a la regi¨®n no exista. Carlos P¨¦rez, m¨¦dico infect¨®logo de la Universidad Nacional de Colombia, opina que el virus ¡°va a llegar si no se contiene en la fuente¡±. ¡°Una enfermedad como esta (...) tiene una transmisibilidad muy alta sobre todo si llega a lugares con alta densidad de poblaci¨®n y con pobres medidas de higiene¡±, afirma.

Frente a escenarios inciertos, el llamado de la OMS es a prepararse. ¡°Al emitir una alerta, se genera atenci¨®n por parte de los Ministerios de Salud para que comiencen a mejorar los sistemas de vigilancia activa, empiecen a estar atentos a sintomatolog¨ªas compatibles con el mpox, que tengan acceso a m¨¦todos diagn¨®sticos validados y espec¨ªficos para este virus, para que se pueda detectar de manera temprana¡±, explica D¨ªaz.

Por ejemplo, el diagn¨®stico de la infecci¨®n por mpox debe realizarse con pruebas PCR, como el Covid-19, algo que para P¨¦rez es un ¡°desaf¨ªo¡±. ¡°Generalmente en Am¨¦rica Latina la posibilidad de esta tecnolog¨ªa est¨¢ en las grandes ciudades, pero los pacientes pueden estar en otras regiones¡±. Por otro lado, existe un f¨¢rmaco desarrollado originalmente para tratar la viruela que tambi¨¦n se puede usar contra el mpox, el tecovirimat, dif¨ªcil de conseguir en la regi¨®n. De hecho, hay pa¨ªses como Colombia que todav¨ªa no han aprobado su uso.

Y por supuesto, tambi¨¦n est¨¢n las vacunas. El f¨¢rmaco de Bavarian Nordic Jynneos es una de ellas, y tambi¨¦n la ACAM2000, desarrollada contra la viruela pero efectiva contra el mpox. Pa¨ªses como Argentina o M¨¦xico no inocularon una sola vacuna en el brote anterior; Brasil lo hizo solo a partir de 2023 y Colombia ¨²nicamente tiene en marcha un ensayo cl¨ªnico de un f¨¢rmaco nuevo contra la enfermedad. Esto contrasta con las vacunaciones regulares, que se recomiendan solo a la poblaci¨®n de riesgo y que se han mantenido hasta la fecha en pa¨ªses europeos o en Estados Unidos.

¡°Desde 2022 sabemos que hay una vacuna, deber¨ªamos haberlas adquirido, haber desarrollado tecnolog¨ªa para vacunas en nuestros pa¨ªses para tenerlas disponibles (...) Perdimos 18 meses donde podr¨ªamos haber hecho mejor las cosas¡±, lamenta P¨¦rez. ¡°Hoy va a ser mucho m¨¢s dif¨ªcil conseguir los medicamentos y las vacunas¡±, opina el infect¨®logo, que prev¨¦ que la alarma de la OMS despierte de nuevo la acaparaci¨®n de f¨¢rmacos por parte de los pa¨ªses con los medios econ¨®micos para hacerlo.

Una lecci¨®n del brote anterior

Sin embargo, hay una lecci¨®n importante del brote anterior que sirve para aliviar las preocupaciones hoy en d¨ªa. En ese momento, la vacuna no fue una herramienta decisiva para controlar la oleada de infecciones en la regi¨®n. ¡°Al reducirse el n¨²mero de contactos, hacer aislamiento y diagn¨®stico temprano hubo una reducci¨®n [de contagios]. Colombia es un ejemplo en el que no hubo vacunaci¨®n y se control¨® la transmisi¨®n de la enfermedad¡±, recuerda P¨¦rez. Desde 2022 hasta el 1 de julio de 2024, la regi¨®n de las Am¨¦ricas ha registrado en 31 pa¨ªses 62.752 casos de mpox y 141 muertes. La mitad, aproximadamente, sucedieron en Estados Unidos y, aunque el virus nunca termin¨® de desaparecer completamente y todav¨ªa se registran contagios, la mayor¨ªa de los contagios pertenecen al 2022.

Ante la falta de vacunas, la ¡°pedagog¨ªa comunitaria¡± es clave para P¨¦rez, igual que para Adri¨¢n D¨ªaz, que recalca la necesidad de ¡°fortalecer la importancia de la conducta en la prevenci¨®n de las infecciones¡±. La mayor¨ªa de afectados en el brote anterior fueron hombres que tienen sexo con hombres, y las campa?as de prevenci¨®n y conductuales se enfocaron a que esta poblaci¨®n redujera pr¨¢cticas de riesgo que facilitaran la dispersi¨®n del virus. Los brotes actuales que se desarrollan en ?frica podr¨ªan comportarse de manera diferente: por ahora, s¨ª se reconoce una transmisi¨®n sexual, pero tambi¨¦n hay una incidencia alta en la poblaci¨®n infantil en R.D. Congo. Las medidas de prevenci¨®n deber¨¢n adaptarse seg¨²n la circulaci¨®n que se observe.

Pero m¨¢s all¨¢ de mirar los posibles futuros para Am¨¦rica Latina, tambi¨¦n hay una necesidad de analizar el presente. ¡°Hoy todas las vacunas deber¨ªan estar en ?frica¡±, opina P¨¦rez. Mientras el mpox dej¨® de ser una amenaza para el norte global, en el continente africano los contagios ya hab¨ªan aumentado un 79% entre 2023 y 2022, y un 160% en lo que llevamos de 2024 respecto al mismo per¨ªodo de 2023. Cualquier contenci¨®n en el continente americano ser¨¢ in¨²til si el problema se mantiene en los pa¨ªses donde la enfermedad es end¨¦mica. ¡°Donde se necesitan las vacunas es en el Congo, para contener la infecci¨®n, pero estas vacunas van a quedar en pa¨ªses desarrollados (...) Y ah¨ª entramos en las paradojas de la pandemia: donde menos se necesitaban las vacunas, se desperdiciaron, y donde m¨¢s las necesitaban, no tuvieron acceso¡±, critica P¨¦rez. Los CDC ?frica anunciaron esta semana que actualmente solo hay 200.000 dosis disponibles. Se necesitar¨¢n al menos 10 millones.

Para D¨ªaz, el patr¨®n sobrepasa el caso del mpox. ¡°Las zonas de riesgo de emergencia [de virus] son las regiones tropicales y subtropicales, con mayor diversidad biol¨®gica, con alto grado de explotaci¨®n y degradaci¨®n ambiental. Los que se ponen en contacto con los pat¨®genos son los habitantes de esas regiones, pero, despu¨¦s, ah¨ª no tienen ni para hacer el diagn¨®stico ni para encontrar casos cl¨ªnicos¡±. Con el cambio clim¨¢tico, se prev¨¦ que cada vez sea m¨¢s com¨²n la emergencia de nuevos virus que pongan en jaque la salud global. Pero mientras los pa¨ªses con pocos recursos sean los ¨²nicos que ponen las muertes, quiz¨¢s los pa¨ªses de ingresos altos no se enterar¨¢n hasta que la crisis llame a su puerta.

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