El desperdicio del talento extranjero es un lujo que Espa?a no puede permitirse
Espa?a necesita talento desesperadamente pero se resiste a reconocer que su futuro depende de una demograf¨ªa que se transforma gracias a la movilidad humana
Espa?a necesita talento desesperadamente pero se resiste a reconocer que su futuro depende de una demograf¨ªa que se transforma gracias a la movilidad humana
Si un ser humano es capaz de cruzar un desierto y un oc¨¦ano para hacerse una nueva vida en este pa¨ªs, ?por qu¨¦ no hemos sido capaces de formular mecanismos para que eso ocurra?
A estas alturas, una pandemia, una guerra y la crisis clim¨¢tica deber¨ªan habernos ense?ado que no se puede gobernar ning¨²n pa¨ªs d¨¢ndole la espalda al resto del planeta
Los relatos del hundimiento de un pesquero con centenares de inmigrantes que intentaban llegar a Italia y la aventura fallida del sumergible que descend¨ªa hasta la tumba del ¡®Titanic¡¯, revelan que hay tragedias que hemos aprendido a leer sin sentir nada
Hay m¨¢s de 2,7 millones de mujeres migrantes en Espa?a. La arquitectura burocr¨¢tica, los prejuicios y los sesgos del mercado laboral suprimen el potencial de miles de ellas, incluso de las m¨¢s cualificadas
En la pol¨ªtica, en el sector privado, en las ONG, en los medios y en muchos escenarios donde se construyen los conceptos y narrativas que orbitan en torno a los migrantes, se habla de nosotros sin nosotros
Hace falta un reconocimiento a todos los que emigraron y viven con el temor de ser perseguidos por la ley y con la frustraci¨®n de ser invisibles. Y a todos los ni?os cuyas historias se escriben junto al concepto de la apatridia
El estallido popular que hoy atraviesa Colombia es un recordatorio de que para dirigir una naci¨®n, lo primero que hay que hacer es escucharla